Las Descendientes Del Sol Y La Luna

3. Reencuentro.

Narrador Omnisciente

A la naturaleza es difícil llevarle
la contraria. En el caso de hacerlo las consecuencias serían graves.

León lo sabía perfectamente, con cada minuto que pasaba lejos de su compañero de vida, su poder se debilitaba ya que su parte vampírica se encontraba atada a su marca.

Lo mismo pasaba con Mail, su lobo se debilitaba al punto de estar al borde la muerte. Y si Mail moría, León lo haría con el.

Es la maldición de la marca.

Aun con la seguridad que les dieron hace años las hijas de eros que eso no pasaría, se les olvido mencionarles que la marca tenia que volverse hacer cada cierto tiempo. Ellos ya se habian extendido del limite, y ahora si no volvian hacer la marca, sus vidas peligraban.

León lo sabía, sabia lo de la renovación de marca, se lo oculto a Mail hace años por la misma razon. Si para el era difícil todos los dias, Mail no dudaria en correr hacia el dejando a la chica sola y rompiendo la promesa.

Cuando se vieran, el lobo de Mail despertaría y le informaría a este de la razón de estar al borde de la muerte. Y vaya que el estaría molesto con León y las hijas de eros.

Pensaria en eso después.

No han pasado veintiuno años.

Esto estaba mal.

Aun al estar al borde de la muerte.

Eso quedaria para después.

Estábamos hablando del destino de su mundo después de todo.

-Lo siento -Fue lo último que dijo león antes de salir corriendo hacia la pelinegra.

Raven ya se encontraba caminando lejos de la multitud de estudiantes, cuando empezó a sentir un ardor fuerte en el cuello. Miro hacia abajo y agarró el collar que siempre habia tenido, este se encontraba de un color rojo intenso.

-Auch -Soltó el collar cuando le empezó a quemar la mano dejando una marca, hizo una mueca cuando le empezó a doler detrás del cuello- ¿Qué mierda?

-¡RAVEN! -La chica giró la cabeza cuando escuchó a su amigo llamarla y lo vió agitado.

-León me siento mareada y con dolor -Raven trató de caminar hacia León pero simplemente no podía moverse.

El vampiro miró a su alrededor cuando empezaron a caer los pájaros muertos y se fijó que las flores también estaban muriendo.

Esto era muy malo.

-Tenemos que irnos ya -Tomó a la chica por el brazo y la empezó a jalar en dirección contraria hasta que sintió como la chica caía de rodillas.

-RAVEN...

-SUMMER...

Dos gritos se escucharon al mismo tiempo demasiado cerca.

León cerró los ojos al escuchar esa voz y levantó la cabeza hasta toparse con los ojos azules del lobo de Mail.

No se percataron que los dos gritos alertaron a las chicas, ambas se encontraban débiles en el piso.

Raven giró la cabeza, al igual que Summer encontrándose después de tantos años separadas.

Y el caos se desató.

Los collares que las mantuvieron seguras se rompieron.

Los poderes de Summer se descontrolaron haciendo que empezara a llover y que el viento soplara demasiado fuerte hasta derribar los árboles de alrededor. Los poderes de Raven por otro lado estaban haciendo que los animales a su alrededor empezarán a convulsionar y los mismo árboles que el viento de Summer derribó, el fuego de Raven los estaba volviendo cenizas.

En ese momento un rayo causado por la fuerza de ambas cayó sobre una de las antenas que colapsó sobre uno de los chicos de la universidad.

El grito del chico fue lo que despertó del trance a los cuatro que parecían haber estado en una burbuja.

Raven fue la primera en levantarse a pesar del dolor y caminar hacia el chico, pero cuando levantó la mano para tocarlo el chico empezó a gritar más fuerte por el dolor y la sangre más abundante.

Raven retiró la mano sin saber que hacer, en ese momento Summer se acercó al muchacho y lo tocó con su mano haciendo que la sangre dejara de salir pero el chico seguía gritando. Raven lo entendió, se alejó del lugar y el chico pudo respirar y dejar de gritar.

Eso la hizo sentir mal y cuando vio a León sin dejar de mirar a la chica, la hizo sentir peor. Con todo el dolor que traia en el cuerpo, decidió alejarse aprovechando la multitud de estudiantes que estaban ayudando a levantar al chico y a la chica rubia.

León miró a Mail por última vez antes de salir por Raven, en ese estado no era bueno dejarla sola.

El chico fue llevado a urgencias, y aunque trataron de llevar a Summer al hospital ella se nego y con ayuda de mail se apoyo en el carro.

-Mail no puedo hacer que se detenga -Dijo llamando la atención del lobo quien se fijó que el viento seguía soplando cada vez peor.

-Sube al carro Summer tenemos que ir con ellos pronto -Fue lo único que dijo antes de tomar la mano de Summer y subirla al carro para empezar a buscar a León y a la descendiente de la luna.

Ya se habían encontrado y los collares se habían roto, ahora más que nunca necesitaban estar juntas.

Mientras eso ocurría en el mundo mortal, el mundo mágico se oscureció a la vez que el suelo empezaba a temblar, haciendo que todos los seres que ahí habitaban se alterarán.

Las ninfas de todas las especies fueron al castillo de su reina para dar la noticia.

-Reina reina, los oráculos no paran de hablar de una desgracia algo,muy malo va a ocurrir -Todas las ninfas empezaron hablar al azar hasta que una mano fue levantada.

-Avisen a cad a persona que encuentren, nadie sale del mundo, necesitamos impedir la mayor cantidad de desgracias.-La reina de las ninfas una mujer hermosa con una larga cabellera rubia habló, estuvo esperando este momento por muchos años.

Mientras las ninfas cumplían esa orden, en el abismo una persona abrió los ojos después de un largo sueño...

-¿Quién lo diría,Cronos? Después de tanto tiempo aparecieron -Se estiró en el trono con una sonrisa, haciendo brillar sus ojos de color carmesí y una hermosa corona de rosas negras.-Que empiece la fiesta chicos.

Los titanes del tártaro empezaron hacer mucho ruido viendo a su reina sumergida en un vórtice de niebla y dirigirse al portal que conecta los mundo.

La cacería había empezado, ya que no era la única que buscaba a las descendientes, muy pronto el caos entre ambos reinos iba a empezar y no faltaba mucho para que los dioses entraran en esa guerra.