«Qué mierda de pesadilla», pensó al abrir sus ojos y encontrarse sumido en la oscuridad de su habitación. Ningún rayo de sol traspasaba la delgada y fina tela de sus cortinas, así que era evidente que aún faltaba mucho para que amaneciera. Trató de mover los dedos de sus manos, pero fue en vano: no respondían. Genial, lo que le faltaba. Igual que en las noches anteriores, su cuerpo se mantenía inmóvil, casi como una estatua, por lo que tenía que esperar unos largos segundos para que reaccione y deje de estar entumecido.
Una vez logró tomar asiento, encendió la lámpara que reposaba en su mesita de noche y se apoyó en el respaldo de la cama para luego soltar un hondo suspiro. Su mirada se perdió en la nada durante un rato hasta que esbozó una débil sonrisa. Estaba tan cansado que no podía echarse a reír a gusto y eso realmente le molestaba.
Despertar en la madrugada debido a una pesadilla dos o tres veces por semana le parecía bien, normal, pero que fuera así de lunes a domingo ya era demasiado. Lo peor de esta situación era que le causaba gracia, después de todo, debía admitir que era muy gracioso que no pudiera recordar lo que había soñado. ¿Qué cosa lo estará atormentando hasta el punto de producirle pesadillas que le dejaban un terrible vacío en su pecho? En serio odiaba que su mente quedara en blanco nada más despertar, odiaba levantarse de su cama y buscar algo que obviamente no iba a encontrar en su departamento. No saber el porqué de su malestar era realmente frustrante y no tenía idea si podría seguir soportándolo por más tiempo.
Para rematar, hoy cumplía 38 años y la pasaría solo.
Le gustaba la soledad.
No existen silencios incómodos ni miradas tristes, no hay risas, tampoco burlas.
Le gustaba la soledad.
Dream lo sabía y respetaba su decisión sobre no celebrar su cumpleaños, después de todo, no encontraba motivos para festejarlo. Era un jueves cualquiera, un día cualquiera. Un día sin importancia. Un año más, un año menos, da igual.
Y es que todo carece de importancia cuando llegas a la cima de la montaña, cuando logras esquivar los obstáculos y tener una vida exitosa.
Sin embargo, algo falta. Algo, algo, algo, ese algo que tanto necesita, ese algo que ha estado buscando día y noche... Pero qué es... ¿Qué demonios podría ser?
Si fuera alguien normal, podría llenar ese vacío en su pecho con sexo y mujeres. O talvez con otras frivolidades como viajes a lugares exóticos o la compra de propiedades. ¿O debería controlar el mercado?, ¿destruir pequeñas empresas?, ¿tener un hijo?, ¿un heredero o una casa?, ¿los dos?
¡¿Acaso alguien podría decirle cómo ser feliz?!
Le gustaba la soledad.
Estar solo era lo mejor.
Porque así nadie podría lastimarlo de nuevo.
A Lust le iba bien.
Su deslumbrante imagen aparecía en todas las portadas de revistas de moda y había muchos artículos en internet hablando sobre él. Y es que era increíble ver a un joven así de prometedor como Lust en la industria del modelaje. El muchacho era divertido, aunque sus bromas nunca le dieron mucha gracia, y su actitud a cualquiera podría agradarle, pero tenía un pequeño problema: su obsesión con bajar de peso. Cuando salía con él, podía notar su ansiedad al entrar a un restaurante o algún lugar que tuviera comida a la vista. Incluso bebidas tan simples como un batido o una limonada le provocaban nervios y dudas. Muchas dudas. ¿Qué habría en su linda cabecita para trastornarlo de esa manera? Bueno, quién sabe.
Lust ya no era su problema.
No es como si pudiera preocuparse por cada personita que conoce en su trabajo o vida personal. Por eso mismo, ya no le importaba lo que hiciera Dust o Cross.
Le da igual.
Todo le da igual.
Qué importaba si Dust salía más temprano del trabajo, qué importaba si Cross decidía quedarse al lado de Dream aunque este nunca pueda corresponder sus estúpidos sentimientos.
Nada importaba.
Al estar sentado en una solitaria banca de un parque, con la mirada cabizbaja y los brazos apoyados en sus piernas, no pudo evitar hundirse en su querido charco de miseria y porquería.
Dios, cuánto lo había extrañado.
Sin embargo, no esperaba que el flash de una cámara interrumpiera de improvisto su estado tan patético. Irritado, alzó la mirada, encontrándose con un chico que rápidamente se dio la media vuelta al verse descubierto.
¿Acaso ese sujeto le acaba de tomar una foto?
Siento que me tardé un montón en escribir este capítulo bien aburrido dnjdjsdna
Me odio por no escribir fics bien clichés donde se conocen en el primer capítulo y luego cogen en el segundo o tercer capítulo. ¿Por qué hago mi vida más difícil? 😭😭😭🔫🔫🔫
Bueno, no importa...
Pinche Geno, ya va acabar el fic y no da señales de vida :(
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⤜El espectador y la víctima⤛ NightGeno
Fanfic《La inusual historia de "amor" entre los protagonistas empezó en un callejón. Sí, lo leyeron bien. En un cochino y maloliente callejón. ¡Qué romántico! Luego todo se basó en miradas desde una distancia prudente por parte de uno, mientras el que era...