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Las semanas pasaron, yo ya estoy sana al 100%, había tenido misiones y mi relación con Tomioka va bien, solo que todavía no le habíamos contado a nadie, le dije que primero le contaría a Sanemi, después de todo, es como mi hermano mayor.
Ahora mismo, estoy volando en dirección a la finca de Sanemi, pues ya había regresado de su misión y si, dije volar, pues después de lo que pasó en el distrito rojo, puedo invocar mis alas cuando y hacerlas desaparecer cuando quiera.
Llegué a la finca sin hacer ruido, fui a el patio de entrenamiento y como supuse, hay estaba, volé rápidamente hasta estar frente a el, le solté una gran sonrisa.
- !!SANEMI!! - grite con felicidad, el no se asustó, al contrario, lo primero que hizo fue abrazarme.
- Me alegra ver que estás bien, me tenías tan preocupado enana - nos separó de el abrazo y me vio con detalle - y al parecer tienes un cambio de imagen - soltó una sonrisa ladina.
- No se ven fantásticas? - pregunte divertidamente, mientras extendía las alas para que las viera.
El río un poco y asintió.
- por supuesto, ven, vayamos a tomar un té adentro - yo asentí, desaparecí mis alas y entramos a la finca.
El fue a por la tetera y sirvió dos tazas de té, el se sentó frente a mi.
- Sanemi, te voy a contar algo - el me miró curioso.
- De que se trata?, puedes decirme lo que quieras, pero si lo que me vas a contar es sobre que como ahora tienes alas, quieres sentirte libre y te vas a convertir en una ave y volarás sin rumbo por el mundo, entonces ni me cuentes, es un NO, rotundo - hablo con una seriedad divertida.
Empecé a reírme un poco - Pero que cosas dices? - pregunte entre risas
- Entonces no es eso, bien, que es lo que tienes que decirme enana? -
- Estoy saliendo con alguien - comenté sin titubear.
El se quedó analizado la información unos segundos, parpadeó un par de veces y me miró seriamente.
- Quién es? - pregunto en un tono de voz serio.
Empezaba a tener por la vida de Tomioka en cuanto le dijera - ¿Que planeas hacer? - pregunte
- Nada, solo tendré una charla amena con el, muy tranquilo, ya sabes, lo normal - intento hablar en un tono tranquilo, pero hasta acá podía oír y oler sus mentiras, es obvio que lo iba a amenazar.
- Verás, con el que estoy saliendo es con.... Tomioka - hable con calma, creo que hasta humo le salió por las orejas.
Se levantó de el suelo con la intención de irse, me pare frente a el impidiendo su paso.
