°•trece°•

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ME HABÍA PREGUNTADO hace unas horas cómo conocí a mi mejor amiga, era un recuerdo un tanto borroso... Y ahora sé por qué.

¿Cómo explicar otra parte de la personalidad de mi amiga?

Ella era tan dulce y amigable, sin embargo unas de las cosas que más detestaba era que le ocultaran verdades y enterarse desprevenidamente, como acaba de pasar. Eso podía hacerla tomar una actitud realmente malvada y ofensiva... Aunque justo ahora podía ver en su rostro sumamente serio como trataba de contener ese temperamento, sabía que estaba pensando antes de hablar.

— ¿Sales con los dos al mismo tiempo? —esa primera pregunta me hizo abrir los ojos grandemente para luego negar.

—No es así, de verdad... —me encogí de hombros pensando si contarle todos los detalles o solamente explicarle un poco para que dejara de pensar mal de mí - No soy ese tipo de chica.

Un suspiro llegó a mis oídos y la volví a mirar como un cachorrito regañado.

—Entonces explícame, porque ese beso estuvo demasiado apasionado y no hace mucho tuviste una cita con Elísamuel.

—Lo sé —me tapé la cara con ambas manos mientras lloriqueaba. Creo que es mejor darle los detalles.

Así le conté mi historia con Hugo Graterol, hasta decidí cortar la relación que teníamos, y también le conté todo sobre Elísamuel.

— Maldita sea, Emilie. Te sientes atraída por los dos, ¿Estás consciente de eso?

— No lo quise admitir, pero ahora que hablo contigo no lo puedo seguir negando.

—¡Por supuesto que no! — me golpeó un hombro levemente — ¿Piensas tener una relación con los dos?

La miré una vez más con impresión para negar repetidas veces.

— No... De verdad había terminado todo con Hugo, pero el deseo me ganó hoy... Ahora me siento como la peor mujer. —la miré suplicante —De verdad me gusta Elísamuel, pero el deseo que siento por Hugo es increíblemente grande. El que hayamos cortado las cosas repentinamente, me hizo desearlo más —cada una de esas palabras salieron de mi boca como una queja llena de congojo. — No sé que hacer...

—¿ No sabes ? — Amy me juzgó implacablemente con su mirada- si dices que te gusta Elísamuel entonces debes cortar las cosas con Hugo de raíz. Ya verás que cuando te acuestes con el repartidor ese deseo por Hugo se irá.

— Ese es el problema, a penas vamos por la primera cita y siento que Elísamuel es un chico demasiado respetuoso. Sé que no me hará esa propuesta.

— ¿ Entonces piensas acostarte con Hugo hasta que Elísamuel te lleve a la cama?

— ¿Qué? ¡No! — dije de inmediato. — Se que no parezco yo, me metí en una grande, pero jamás he querido jugar con los dos. — me levanté del sofá con una mano en la cadera y la otra peinando mi cabello hacia atrás, la angustia se me notaba a kilómetros. — Lo de hoy no volverá a pasar, mañana hablaré con Hugo en definitiva y me concentraré en conocer más Elísamuel.

— Emilie... No voy a juzgarte, solamente piensa en lo que estás metida. —se levantó caminando hacia mi para luego tomar mis manos con las suyas. — Sé que no eres ese tipo de chica, pero si no detienes esto y uno de ellos se entera de lo que está pasando... Dime ¿Quién saldrá perdiendo?

Esa pregunta me hizo sentir un gran escalofrío de miedo por todo mi cuerpo, no quería imaginarme todo el desastre que seguramente causaría si Hugo o Elísamuel se enteran de todo lo estoy haciendo. El solo pensar como mi reputación e integridad serán pisoteadas si la verdad llega a salir, me provoca unas tremendas ganas de vomitar.

Dime que me amas ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora