My you 𓍢ִ໋🌷͙֒ ᰔᩚ KookMin

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-¿¡Dónde está MinJi!?

Todo el salón de aquella casa modesta quedó en silencio, la música bajó de volumen. Solo se escuchaban los jadeos de un omega.

Para ser más exactos, se trataba de JiMin.

-¿MinJi? -NamJoon salió de la cocina con dos refrescos en la mano-. ¿No estaba contigo?

-¡No!

Rápidamente toda la gente del lugar empezó a moverse, algunos se movieron por la casa y otros salieron en busca de la pequeña rubia desaparecida.

Con un JiMin que tiene el corazón en la mano.

Pero... ¿Qué pasó?

Unos cuántos minutos antes.

Sábado por la tarde, JiMin junto con MinJi, sus padres y HoSeok, estaban escondidos en el mesón de la cocina, esperando a que la pareja Kim cruzara por esa puerta, más que todo SeokJin, para cantarle a todo pulmón el feliz cumpleaños.

Es su cumpleaños número treinta y dos, y sigue viéndose como si tuviera diecinueve años. Algo debe de comer o ponerse en la cara, porque Dios mío, si que le hace efecto.

El omega estaba batallando con su pequeña hija, porque incluso en estos momentos la pequeña trataba de reírse, y debían mantener el mayor silencio posible.

-Minnie, haz silencio, así no podremos sorprender al tío Jin. -JiMin rió mientras ponía su dedo índice sobre los labios de su pequeña, aquella trataba de guardar silencio pero terminaba riéndose.

-Ay, que pequeña tan ruidosa~ -La señora Park pellizcó suavemente la mejilla esponjosa de la cachorra, haciéndola reír un poco más alto, justo en ese momento el cerrojo de la puerta se escuchó-. Oh, SeokJinnie está aquí.

Se agacharon hasta más no poder, y cuando por fin la puerta se abrió y el omega rubio caminó hasta bien adentro de la sala, la familia salió de su escondite y gritaron juntos "feliz cumpleaños".

SeokJin abrió sus ojos y se llevó una mano hacia su pecho, si bien ya sabía de su fiesta sorpresa, se asustó al escuchar aquello en voz alta y sobre todo, de la nada.

Es bien asustadizo.

-Dios mío. -El chico sonrió y se acercó a sus familiares, dándole abrazos y agradeciendo sus buenos deseos junto con pequeños detalles que llevaban consigo-. Muchas gracias~.

NamJoon se encargó de servir los refrescos mientras JiMin se encargaba de dar frituras, y el mejor trabajo lo llevaba HoSeok, quién animaba junto a MinJi al omega festejado.

-Oh, se acabaron... -El rubio miró por todos los estantes de la cocina, ya no hay más bolsas de frituras-. Iré a la tienda por más frituras, espérame.

-No te demores o te quedas sin refresco. -Le molestó el alfa.

NamJoon y JiMin se conocen desde hace unos siete o seis años, realmente nadie lleva la cuenta y se llevan a la perfección.

No son perfectos como cuñados pero lo hacen excelente, sobre todo porque tienen un buen común.

Hacer que SeokJin sea feliz y se sienta amado.

El rubio salió de la casa, dejando la puerta ligeramente abierta mientras corría hacia la tienda, no quedaba tan lejos, queda justamente en la esquina de a donde vive su hermano mayor, es decir, que queda a unas seis casas de donde están situados.

Compró las frituras y con las mismas se devolvió, las puso en el bowl donde estaban en el resto y salió a buscar a su pequeña, que se supone que debería de estar con HoSeok.