¡TÚ ERES MI OMEGA! (MYUNGBIN)

XVI. 🥀

Los meses habían pasado y las cosas entre Moonbin y Myungjun se habían vuelto diferentes al principio, pero conforme el tiempo pasaba, la atracción y el deseo se intensificaban más.

En septiembre las cosas no progresaron, no era que no se hablaran, claro que lo hacían, sin embargo, las cosas no podían ser igual que antes, cuando se quedaban solos trataban de evitarse, y aunque Bin seguía llevando a la escuela a Myungjun, trataban de hablar lo menos posible.

Luego en octubre, para Halloween Myungjun fue con Jinwoo a la fiesta que Sanha organizó, Eunwoo le dijo a Bin que fueran con un amigo que los invitó, pero él le dijo que tenía mucho trabajo, por lo que Eunwoo fue solo, y Bin se quedó en la mansión.

Por otro lado Myungjun se la estaba pasando muy bien con Jinwoo, incluso fueron disfrazados en pareja, se vistieron de caperucita y el lobo, y Jinwoo no pudiendo resistirse al disfraz de Myungjun, lo folló en el baño, lo cual le trajo recuerdos a Myungjun de aquel viaje, en donde anteriormente había sido follado igualmente en el baño, solo que esta vez Jinwoo lo había follado en el lavabo. Cuando regresaron Jinwoo no estaba en las mejores condiciones, incluso Myungjun tuvo que manejar, pero no podía sacarlo del auto, por suerte Moonbin salió y lo ayudó a llevarlo a su cuarto.

—Gracias.

Dijo Jun.

—No hay de qué.

Dijo a la vez que examinaba al omega de pies a cabeza, repasando con su mirada el vestido que llevaba, no pudo evitar morderse el labio inferior, quería follarlo contra la pared.

Myungjun notó aquello, y se sonrojó, pero pronto sacó a Bin de la habitación, sintiéndose aliviado, porque él también lo pensó, y lo quería, quería a Bin adentro suyo.

Aquella noche nada paso, todo se quedó en las ganas que se tenían el uno al otro, pero con cada mes que pasaba sus ganas aumentaban.

Pasó noviembre y en cada momento que pasaban los cuatro juntos, tanto Myungjun con Bin se comían con la mirada, incluso empezaba haber encuentros "accidentales", en donde "sin querer" se rozaban o manoseaban, como aquella vez en la cocina, donde Jun no alcanzaba los platos que estaban arriba, y Bin sin decir nada, se colocó detrás de él y lentamente se estiró para alcanzar aquello que Jun no alcanzaba, Jun se tensó en cuanto sintió aquel roce entre el miembro de Bin y sus nalgas, suspiró y disimuladamente movió su trasero, a la vez que mordía su labio inferior, aquella vez estuvo a punto de arriesgarlo todo con tal de volver a sentir a Bin, si no hubiera sido porque Jisoo entró en ese momento junto con Jennie, ya que habían ido a hacer las compras; se separaron y continuaron como si nada, Bin salió de la cocina y Myungjun se sirvió su cereal, sin embargo, Jennie notó algo raro en aquel par.

Diciembre llegó, y con él la tensión aumentó junto con la culpa, aún no pasaba nada entre ellos, hasta la cena de navidad. Los cuatro estaban reunidos, incluso habían invitado a Sanha, ya que antes de ser amigo de Jun, había sido amigo de Jinwoo.

—Bien, es hora de los regalos.

Dijo Sanha.

Y así comenzaron a dar sus respectivos regalos, Eunwoo le dió a Jinwoo, Jinwoo a Sanha, Sanha a Bin, y cuando fue el momento de Bin, Jun se puso nervioso, pues a él le tocaba Eunwoo, por lo que era obvio que Bin era el que le iba a dar a él.

—Bueno, a mí me tocó Myungjun.

Y así se acercó a él con una pequeña caja, Jun no pudo evitar sonrojarse, abrió la caja y dentro de ella había un collar de fresa.

—¡Wow!, es muy lindo, muchas gracias Bin.

—¿Te lo pongo?

Preguntó Bin, a lo que Jun asintió, se volteó dándole la espalda, y el alfa se lo puso, al voltearse se perdieron en la mirada del otro, ambos querían comerse ahí mismo, pero sabían que no podían.

Se separaron y después Jun le dió su regalo a Eunwoo, luego bailaron y se divirtieron. Jun salió al patio a tomar aire, se sentó en el césped y miró las estrellas, le encantaba ver el cielo estrellado, era de las mejores vistas que podía tener.

—Es hermoso...

Se dijo a sí mismo.

—No más que tú.

Aquella voz llamó su atención, y pronto el alfa dueño de aquella voz se sentó a su lado.

—Bin, ¿No deberías estar con Eunwoo?

—Él está en el baño.

—Igual, no creo que debamos estar solos.

Dijo a punto de levantarse.

—¿Sabes por qué te regalé ese collar?

Jun se quedó en silencio y no se movió de su lugar, Bin volteó a verlo.

—Te lo regalé porque ese es tu olor...

Se acercó a él, y Jun se puso nervioso, y aunque sabía que estaba mal, tanto su lobo como él querían aquel tacto.

—Y tu sabor también.

Dicho esto, y sin poder contenerse más, estampó sus labios contra los gruesos de Jun, este último no protestó, al contrario, rodeó el cuello de Bin con sus brazos, profundizando más el beso, el alfa aprovechó esto y recostó a Jun en el pasto, quedando él encima, y sin separarse de aquel beso comenzó a tocar el cuerpo de Jun, el omega deseaba aquel tacto, pero recordaba que no estaban solos, por lo que se alertó, y se separó del beso.

—B-bin, para, nos pueden ver.

Dijo con la respiración agitada.

—Como siempre, tienes toda la razón.

Dijo riendo a la vez que observaba al omega debajo suyo, lo había extrañado tanto, y le reconfortaba saber que Jun también.

—¡Bin!

Se oyó una voz, el nombrado volteó hacia aquella dirección, y se encontró con Sanha.

—Bin, que bueno que te encuentro, ¿Haz visto a Myungjun?

Dijo mientras se iba acercando, y ambos se pusieron nerviosos, aunque agradecían que estaban en esa zona de bajada, en dónde no se veía Jun porque estaba recostado.

—Quédate aquí, y no te muevas.

Le susurró a Jun, mientras se levantaba.

—No, ¿No está con Jinwoo?

—No, justo él también lo estaba buscando.

—Bueno, tal vez esté en su habitación, ¿No?

Dijo regresando con Sanha al interior de la mansión.

Una vez que Jun dejó de escuchar voces, suspiró aliviado, y tocó sus labios, sonriendo como un tonto enamorado, nuevamente había tenido los labios de Bin en los suyos. Se sentó en el pasto, no podía estar más feliz, pero esa felicidad se vió interrumpida cuando escuchó una voz que lo llamaba.

—¡Jun! Que bueno que te encuentro.

—H-hola Eunwoo.

Se sentó al lado de Jun.

—¿Sabes? Realmente me impresionas.

Jun entró en pánico, ¿los había visto besándose?

—¿Po-por qué dices eso Eunwoo?

—Porque al principio pensaba que eras de esos omegas con los que solía salir Jinwoo, que lo único que querían era su dinero, pero con el tiempo me dí cuenta de que tú realmente quieres a mi hermano. Antes te odiaba, y creo que se notaba...

Ambos rieron.

—Pero ahora te tengo un cariño especial, te considero parte de la familia, eres como un hermanito para mí, y yo estaría muy feliz de que tú fueras el esposo de mi hermano, incluso podríamos tener una boda doble jajaja.

Jun rió falsamente, pues aquello que le acaba de decir Eunwoo le dolía, porque sabía que le estaba haciendo daño, al tener su romance con Bin, Jinwoo no era el único afectado, si no también Eunwoo.

—Bueno, vamos con los demás.

Dijo Eunwoo y Jun lo siguió aguantandose las ganas de llorar.

¿Por qué cuando todo parecía estar bien había situaciones así que lo hacían sentir la peor persona del mundo?, él no quería ser igual a su madre, no quería hacerle daño a nadie, pero, ¿Cómo le explicas a tu corazón eso?