Mi sultana sabía como ponerme nerviosa, estábamos en mi habitación y la puerta estaba sin seguro para no abrir sospechas, estaba completamente desnuda en mi cama y esa hermosa dama estaba allí con sus carnosos y rosados labios besando cada parte de mí.
ella me dijo: "no se que estoy haciendo, pero quiero besarte ahí"
Lo dijo mientras se saboreaba con su lengua.
Empezó con su lengua a saborear mis partes privadas, mientras curiosamente miraba poder saber su próximo movimiento. Mis rosados pezones se endurecieron al instante, y empecé a sentir como si estuviera en el paraíso, así que empecé a gemir y como estaba haciendo mucho alboroto Ayşe Sultan subió rápidamente y me silencio con un beso en la boca.
Esta mujer me hacía perder la cordura, pasamos toda la noche explorando nuestros cuerpos y sin despegarnos la una a la otra hasta que después de tanto placer mi Sultana se dió de vuelta en la cama y me dio la espalda se le veía triste y un pequeno silencio se apoderó de un momento tan especial.
La sultana Ayşe me dijo después de que le pregunté cuál era el motivo de su tristeza. Miles de pensamientos cruzaron mi mente al verla así. ¿Será que no le gusto? ¿Será que se arrepiente de lo que estamos haciendo?Hasta que, por fin, dudosa, comenzó a decir estas palabras:"Te amo" - dijo mientras se volvía hacia mí y acariciaba mi rostro. "Pero hay algo que debo contarte. Me haces muy feliz, disfruto estar contigo y a veces olvido que soy Sultana. Pero mi pueblo me necesita. El imperio no solo consiste en lujos, adulaciones y poder, sino que nuestros antepasados lucharon hasta el cansancio para establecer justicia y poner fin a la opresión. Mi deber como sultana es contribuir a esa obra. Debo casarme con un hombre importante, Malhum" - dijo con una expresión entristecida.
AYŞE SULTAN
Los ojos de mi amada reflejaban una mezcla de dolor y ternura, y no podía culparla. Sabía que este momento llegaría tarde o temprano.
Quería envolverla en un abrazo reconfortante, pero primero necesitaba escuchar sus pensamientos.
Ella suspiró: "Sabía que esto podría pasar, y aunque sé que no debería ser un obstáculo para vernos, no puedo evitar sentirme angustiada. ¿Cómo te sientes al respecto?" Sus ojos negros, brillantes con lágrimas, buscaban respuestas en los míos.
Le respondí con sinceridad: "La idea de estar en brazos que no sean los tuyos me resulta repulsiva. Pero entiendo la importancia mis deberes y la misión que tengo por delante".
Malhum intervino con calma: "Podemos seguir juntas, pero debemos ser cuidadosas. No puedo arriesgarte a un castigo. Cuando llegue el momento, haremos un voto. Aunque estemos juntas, nos mantendremos distantes en público para protegerte y proteger nuestro secreto".
"¿No te parece que estamos un poco locas? Este amor que compartimos está marcado por la prohibición, pero cada amanecer anhelo despertar a tu lado, envuelta en el suave aroma que emana de tu piel.Mientras nuestros corazones se aceleran con la emoción del momento, nuestras sonrisas iluminan la habitación. Nos abrazamos con ternura, dejando que la calidez de nuestro amor nos envuelva por completo.Nos entregamos al sueño, permitiendo que la paz y la serenidad nos envuelvan. Cada toque, cada susurro, nos sumerge en una deliciosa sensación de seguridad y plenitud. Así dormimos, sabiendo que en los brazos del otro encontramos el más dulce de los refugios emocionales."
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Me enamoré de mi Sultana -COMPLETA- Girls Love History
RomanceEn el majestuoso escenario del Imperio Otomano, donde los susurros de los palacios se entrelazan con los misterios de sus calles empedradas, florece una historia de amor prohibido y secretos ocultos. En el corazón de esta trama se encuentra una jove...