•°•°•°•°•°capitulo 10°•°•°•°•°•

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Ya dentro de la casa Leo se apresuró a dejar la pañalera en la cocina y regresó con Teodora.

-¿Tienes idea de como cuidar una bebé?-

-No estoy seguro, nunca lo había echo-

-Bueno supongo que tendremos que aprender, no sabemos cuanto tardará en volver mi vecina-

-¿Teodora puedo decirte algo?-

-¿Qué pasó?-

-Tu me…-

En ese momento la bebé empezó a llorar interrumpiendo a Leo.

-¿Leo puedes ir a preparar un biberón para la niña?-

-A... ¿Qué es eso?-

-Ah! Es verdad, entonces cargala un momento-

Teodora fue a preparar un biberón para la bebé mientras que Leo comenzaba a arrullar a la niña.
Cuando Teo terminó fue con Leo quién ya había tranquilizado a la bebé.

-Damela la voy a dormir-

Leo le entregó la bebé a Teo y ella comenzó a darle su biberón y mientras la arrullaba entre sus brazos y tarareando una canción de cuna logró hacer que se duerma.

-Que envidia-

-¿La quieres cargar tu?-

-La envidio a ella que puede dormir en tus brazos con tranquilidad-

Teodora se sonrojó y no dijo nada, al notar la cara de Teo enrrojeciendose Leo solo pudo soltar una pequeña risita.

-¿Qué te pasa tonto?-

-Nada, solamente que me gusta verte sonrojada, te ves muy linda-

-Sí gracias pero ahora estoy pensando en dónde dormirás-

-Pues en donde tú quieras, si quieres aquí mismo en el piso, solamente dame una cobija-

-No me gustaría dejarte solo aquí-

-¿Entonces?-

-Bueno creo que no hay ningún problema si te quedas conmigo, ¿verdad? o sea mi cama es lo suficientemente grande para que tú estes de un lado y yo del otro-

-Está bien entonces, ¿Y la bebé?-

-Tengo una cunita a tamaño real que mis papás compraron para mis peluches, supongo que podría dormir ahí, la pondré junto a la cama de mi lado-

-Bueno está bien y justo hablando de dormir ya tengo sueño-

-Sí pues, apaga las luces y subamos de una vez-

Teodora y Leo subieron al cuarto,
arreglaron la cunita para que durmiera la bebé y la colocaron a un lado de la cama.
Teodora se recostó primero en la cama y Leo comenzó a sacar algo de su mochila.

-¿Qué haces?-

-Nada pues es que yo también tengo mi pijama y me la voy a poner para dormir-

-Ah okay-

-¿Tienes un vestidor o algo así?-

-Te puedes cambiar en el baño-

Dijo Teodora señalando una puerta en la que Leo entró para poder cambiarse.
Ni 10 minutos pasaron y Leo salió del baño y pudo ver que Teodora ya estaba dormida, él se recostó frente a ella viéndola a la cara, era simplemente perfecta.

Leo se acurrucó entre los brazos de Teodora y la abrazó de la cintura, este acto hizo que Teodora se despertara un poco, notó a Leo acomodándose para dormir pero no dijo nada ni se movió.

Cuando sentía que Leo ya no se movía dedujo que ya estaba dormido, Teodora comenzó a acariciar suave y amorosamente el cabello de Leo, era tan suave y tan lindo, estuvo un rato así hasta que se quedó dormida.

Eran aproximadamente las 10 de la noche, unas horas después por eso de las 2 de la mañana la bebé se despertó y comenzó a llorar.

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