Estaba ayudando a mi madre a empacar ya que se iba a ir de viaje por unos días.
C- Jess.
J- si?
C- contraté un niñero para que te cuide en lo que estoy de vacaciones.
J- pero mamá, tengo quince años, me puedo quedar sola.
C- conociéndote, sé que vas a hacer algo.
En eso, tocaron la puerta.
C- ya debe estar ahí.
J- agh.
Bajé con mi madre, frente a la puerta, había un chico alto, con rastas y con ropa bastante ancha.
T- hola, un gusto, soy Tom.
C- hola Tom, yo soy Catherine y ella es mi hija.
J- soy Jessica.- dije en el mero tono de desinterés.
C- okay, entonces, tu habitación está arriba a la derecha, no dejes que Jessica traiga gente a la casa sin permiso y no dejes que salga en la noche, no dejes que se duerma tarde porque le encanta desvelarse y tiene que ir a la escuela.
T- entendido.
C- en el caso de que pidan comida por teléfono, agregaré el costo a tu pago y mi número o los números que puedes utilizar en caso de emergencia están pegados en la pared del teléfono en esa mesa negra de allá.
T- okay.
C- Bueno, los dejo que puedo perder el vuelo, te quiero hija.
J- te quiero ma.
Mi madre salió y yo me quedé con el chico, no les miento, si estaba lindo.
T- entonces, ¿Jessica verdad?
J- si.
T- soy Tom, Tom Kaulitz.
J- okay.- me levanté y me fui a mi cuarto.
Luego de un rato de estar en mi cuarto, escuché como tocaban la puerta.
J- pase!- grité desde adentro.
T- hola, ¿tienes hambre?
J- la verdad si.
T- quieres que pida algo?
J- no sé, si quieres.
Me giré para seguir en lo mío.
T- qué haces?
J- te importa?
T- por algo pregunto, ¿no crees?
J- estoy dibujando.
T- puedo ver?
Quité mi mano del cuaderno y lo corrí un poco.
J- qué esperas? No muerdo.
Tom se sentó en mi cama y vio el dibujo.
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T- eres muy buena.
J- tú crees?
T- si, lo eres.
J- mi madre no piensa lo mismo, dice que es una pérdida de tiempo, me dice que debería concentrarme más en actuación, modelaje, danza, etc.
T- tanto así? Si se ve muy buena.
J- lo es, solo que me dice mucho que me concentre en esas cosas y que el dibujo no sirve de nada.
T- no le prestes atención, dibujas muy bien.
J- gracias.
Hubo un silencio incómodo.
J- ya podemos pedir algo de comer?
T- si, ¿qué quieres comer?
J- lo que sea.
T- pizza?
J- okay.
No sé cómo explicarlo, pero es tan lindo y al mismo tiempo me desagrada tanto.
Cuando llegó la comida, Tom subió a mi cuarto para avisarme.
T- Jessica.
J- dime Jess, porfa.
T- okay Jess, ya llegó la comida.
J- okay.- dije para bajar las escaleras detrás de Tom.
T- quieres ver una película?
J- okay.
Me senté a un lado de Tom, él puso la pizza en la mesa de en frente, escogimos una película y nos sentamos a comer.
Luego de unos minutos, que digo minutos. Horas, Tom me mandó a dormir.
T- okay niña, a dormir.
J- no soy una niña.
T- eres menor que yo, eres una niña para mí.
J- ª
T- Bueno, vete a dormir.
J- ya.
Subí a mi cuarto, me puse mi pijama y me fui a dormir.
