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J- Tom, ¿estás enojado?

T- qué crees?

J- por qué.

T- estabas muy pegada a mi hermano.

J- en serio por eso?

T- pues si.

J- pero solo eres mi niñero y mi amigo.

T- pero tengo derecho.

J- no te pongas así Tom, sabes que te quiero a ti.

T- lo sé.

J- entonces no te pongas así.

Nos detuvimos en un semáforo y me acerqué a él para darle un abrazo.

J- ya deja de estar así.

T- está bien.- dijo mientras soltaba una sonrisa.

T- ahora ponte el cinturón, ya va a cambiar el semáforo.

J- okay.- me puse el cinturón y volvimos a casa.

T- quieres ver una película?

J- siii.

T- dale, ponte tu pijama y yo haré las palomitas.

J- dale.

Me puse mi pijama y bajé de nuevo a la sala.

J- ya estoy acá.

T- okay, siéntate.

Me senté y buscamos una película de terror.

En un punto me asusté y di un brinco.

T- ey, tranquila, ven.- dijo para abrazarme y tenerme acostada en su pecho toda la película.

T- ya termi-.— yo estaba dormida en su pecho, Tom me cargó y me llevó a mi cuarto y se recostó conmigo.

Al día siguiente me levanté en el hermoso olor del pecho de Tom, oh si, realmente me estaba enamorando en tan poco tiempo ¿como dicen por ahí? El amor a primera vista si existe ya que desde el momento en que lo vi parado en esa puerta, me enamoré.

T- buenos días dormilona.

J- qué hora es?

T- las 2:30 de la tarde.

J- QUÉ?! Oh Dios, debo ir a clase.

T- qué clase.

J- danza, son los sábados y domingos.

T- pensé que te querías quedar conmigo aquí.

J- créeme que quiero, pero no puedo faltar al menos el domingo, los domingos se pone más exigente la cosa y si no estoy llamarían a mi madre.

T- te llevo?

J- no te molestes.

T- no me molesta, vamos.

J- está bien, solo sal un momento, me cambiaré rápido.

T- no me puedo quedar?

J- no, te podré querer mucho pero no, maybe (tal vez) después podrías quedarte.- oh Dios tenía que mezclar el inglés.

T- hablas inglés?

J- soy nacida en Estados Unidos, mi lengua materna es el inglés, luego vine a Alemania, ahí aprendí el alemán.

T- ah.

J- qué esperas? Salte.

T- aaaaa!, ya me salgo.

J- gracias señor Kaulitz.

Soltó una risa y se fue, luego de unos minutos ya estaba lista.

J- Tom, ¿ya estás listo?

T- si, baja.

Bajé a desayunar y nos fuimos a la clase.

T- Bueno, llegamos, ¿a qué hora vengo por ti?

J- te puedes quedar?

T- puedo?

J- si, te dejarían quedar si decimos que eres familiar mío.

T- y qué decimos?

J- que eres mi hermano.

T- okay.

Entramos y por suerte me creyeron, estuve dos horas en ensayo, hasta que por fin salí.

T- se podían tomar fotos?

J- según yo si, ¿qué hiciste Tom?

T- mira.

Me había tomado una foto mientras practicaba mi solitario

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Me había tomado una foto mientras practicaba mi solitario.

J- ay, no me veo tan mal.

T- siempre te ves bien, eres re fotogénica.

J- gracias, ¿nos vamos?

T- si.

Nos subimos al auto y fuimos a casa.

•El niñero•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora