capitulo Extra

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Camille

Al llegar a el lugar que se convertirá en mi nueva casa me invade cierto sentimiento de tranquilidad, por primera vez en 3 años me siento segura, siento que tengo un lugar al cual llamar hogar.

Mi habitación es acogedora, una cama semi-doble corona todo el lugar en el centro mientras una mesa de noche, un mini estudio y un armario la rodean, todo es complementado por unas lindas paredes blancas y lilas intercambiadas con decoraciones de libros, aves y mariposas.

Es sinceramente precioso

Cuando me dispongo a acostarme para descansar, noto un pequeño papel en la almohada.

"Esperamos que te guste tu nuevo cuarto, no sabíamos mucho de ti, pero hicimos un esfuerzo

Bienvenida a tu hogar

Con cariño S y H".

Sonrió por reflejo, hicieron un gran trabajo, incluso han traído mis libros favoritos, mañana les daré las gracias, por suerte, ahora tengo mucho tiempo para hacerlo.

Ya con el pijama puesto, me dispongo a descansar de este día tan agotador.

Pero lo bueno no dura mucho, la puerta se abre fuertemente y la imagen de mi padre furioso se presenta ante mí.

—Puedes explicarme ¿Qué carajos fue todo eso? — esta colérico, puedo notarlo en la forma como respira, como se juntan sus cejas y las facciones de su cara se hacen más notables.

—Era una noche especial para Helena y para mi, si te duele mucho o tu forma de ser no te permite hacerlo por mí, ¡tenle un poco de respeto a Helena!, ¡hazlo por ella!, ¡por Shailene!

—No me amenaces con ellas, por lo menos, ellas han tenido la delicadeza de tratarme como lo que soy, una persona y no como tú me ves , una estúpida fuente para mantener tu imperio— ahora yo estoy igual que él, por desgracia en mi manera de enojarme fueron ganadores los genes de mi padre, igual que en mi altura, ojos, cejas, nariz y cabello.

— ¡Pongo todo lo que quieras a tu disposición, si lo quieres, lo tienes ¿Qué más quieres?! —me grito con los ojos abiertos y un tono amenazador.

— ¡Quiero un poco de tu atención!— Grite

—Todo en mi vida estaba bien, hasta que mad...

— ¡No digas su nombre!— me amenazo de vuelta

— ¿Por qué? ¿Eh? ¿Qué tiene de malo decir el nombre de la hija que olvidaste por dinero?

David suspira, se acerca a mi e intenta tocar mi rostro, por instinto me alejo, el retira la mano.

—Yo cambie Cami, te lo aseguro, intente buscarla pero no logro encontrarla, se alejo para siempre, no puedo—agacha la cabeza y veo unas lagrimas recorrer su rostro. Ambos estamos callados.

—La extraño igual que tu, quiero abrazarla y pedirle perdón por el tiempo que no le di, quiero recuperarla.

Eso sinceramente me tomó por sorpresa, sin pensarlo mucho, lo abracé.

— ¿sabes algo? Decidí casarme y buscar a alguien para brindarte lo que no le di a ella, un hogar estable.

Mi visión se ponía borrosa, quería contarle todo, decirle porque Mad se fue, quería liberarme de este peso, pero no podía, se lo prometí.

Las promesas son un peso que las bocas cerradas tenemos que cargar solas.

—lamento todo esto, por favor dile a Helena que me disculpe y tu también por todo—digo con la voz entrecortada.

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⏰ Última actualización: Jul 02, 2015 ⏰

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