Te odio.
Te odio.
Te odio.
Te odio por no darte cuenta.
Te odio porque ahora mismo te estoy llorando y tú estarás riéndote con tus amigos.
Te odio porque te has metido en mi vida y en mi mente y no quieres salir.
Te odio porque no me buscas.
Te odio por existir y haber aparecido en mi vida.
Te odio por los segundos en los que cruzas tu mirada con la mía.
Te odio por todo el dolor que haces que sienta de forma inconsciente.
Y te quiero por lo mínimo que me haces sonreír.
Te quiero por la forma en la que me haces reír.
No me compensa.
No me compensas.
Pero no te puedo olvidar.
No te puedo alejar.
Simplemente no puedo por la forma en la que me haces odiarte y quererte a la vez, B.
No sé qué me has hecho.
No sé qué has hecho.
Qué has provocado.
Pero que te den, B.
Te quiero.
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DIARIO DE UNA CICATRIZ
PoetryAquí no vengo a ser fuerte. Vengo a ser yo. Con mis cicatrices y mis marcas. Yo. Que complicada esa palabra para alguien que lleva perdiéndose toda su vida, ¿verdad?
