Si tuviera que volver a comenzar mi vida, intentaría encontrarte mucho antes.
Cuando tú no eras tú, sino el niño que le gustaba montar en patinete con sus Vans.
Cuando yo no era yo, y tan solo era un niña a la que le encantaba patinar en el patio de su casa durante horas.
Cuando no éramos nadie y podíamos ser juntos.
Pero ahora, tú has crecido, has comenzado buscar aquello que necesitas.
Pero ahora, yo he crecido, y te sigo como una sombra fantasma porque me he enamorado de aquel chaval que montaba en patín con sus Vans.
Ahora, no somos juntos.
Somos tú.
Somos yo.
Por separado.
Cada uno por su lado.
Cada uno con sus respectivas vidas.
Esa vida que soñé en compartir contigo.
ESTÁS LEYENDO
DIARIO DE UNA CICATRIZ
PoetryAquí no vengo a ser fuerte. Vengo a ser yo. Con mis cicatrices y mis marcas. Yo. Que complicada esa palabra para alguien que lleva perdiéndose toda su vida, ¿verdad?