Solo una vez || Riverduccion

Samantha / PT. 2

The party & The after party (The weekend)
For sure
Your lovin'
I need more
I need yours
She ain't lookin' for that un-con-ditional
What the fuck these bitches on?

——————————————

11:09 AM
Arquee la espalda y su lengua recorrió uno de mis pezones, termine vergonzosamente sobre sus dedos y aquel me observó con una sonrisa, recobré el sentido común y aquel me dio la vuelta de manera agresiva, alcé las caderas y clave las uñas en el colchón, entró en mi de manera agresiva y arquee nuevamente la espalda, solté un gemido y puse los ojos en blanco, mi mente se nublo de placer, aquel me llenó de golpe y este estaba perfectamente bien. 

Me moría de vergüenza porque me viera así, pero realmente esa siempre fue su intención.

—¡Oh Dios! Exclamé y aquel agarró mi cuello haciéndome verlo a la fuerza—Después de esto nadie mas podrá tocarte, Samantha—Téngalo por seguro, señor. Balbucee y empezó a bombearse dentro de mi, disminuyendo la velocidad de sus estocadas, solté un par de chillidos suplicantes para que volviera la velocidad de antes y lo hizo, apoyó sus manos en mis caderas y hundí mi rostro en las sabanas rosa palo que cubrían mi cama antes tendida de manera detallada.

—Que quede entre nosotros... Murmuró a mi oído y solté un gemido desesperado.

Un tono de llamada resonó en mis oídos, voltee a verlo y su semblante ahora estaba serio, agarró el celular y respondió la llamada.

—¿Quién habla? Preguntó con voz entrecortada sacudiéndose dentro de mi con agresividad, hundí mi rostro en las sabanas y me aferre con las manos a ellas, mis ojos soltaban lagrimas de placer y adrenalina de ser escuchada. 

—Tu esposa, Félix. Necesito hablar contigo ahora mismo, voy a tu casa.

—Si..., Carol, hoy no llegaré a mi departamento, estoy algo ocupado, atendiendo unos asuntos, hablamos luego.

—¿Estas con alguien más cierto?

—Estoy con un amigo, no empieces con tus cosas. Habló con crueldad y la respiración agitada, ahogué un gemido con las sabanas y escuché los gritos de Carol desde el otro lado de la linea, cerró su micrófono y  alzó mi rostro jalando mis cabellos y solté un gritito, arquee mi espalda—Félix... Estoy apunto.—Balbucee, sonrió y colgó la llamada, entró y salió de mi y tocó mi punto G de un momento a otro, mi espalda estuvo apunto de partirse en dos, mis pezones se rozaron contra la tela suave de la cama, haciendo que me dieran pequeñas descargas eléctricas por el movimiento.

Abrí los labios todo lo que mi cuerpo me permitió y mis músculos internos se contrajeron, envolviendo su pene, solté un gemido que no se escuchó para nada y me deje caer en las almohadas, aquel gruñó y soltó un gemido—Samy... Eres genial. Balbuceó, sonreí con el rostro cansado.

12:12 PM

Se acostó a mi lado, limpió las lágrimas que escurrían por mis mejillas y besó mi mejilla, me acomodé y cubrí mi cuerpo, lo observé y el me observó a mi, la comisura de sus labios se elevó—Me encantas.

—¿Después de esto puedes ser mi jefe? Murmuré, me fulminó con la mirada por unos segundos y asintió.

—Está bien, te prometo que solo seré tu jefe. En la oficina. Sonreí, acarició mi mejilla y me observó un momento, alzó la vista al techo y suspiró.

—¿Quieres tomar algo? Pregunté, asintió—¿Tienes vino tinto?—Claro. Dije, me destapé y me senté en la cama, recogí mis bragas negras de tela delgada del suelo y me puse su camiseta de botones, abroché un par y mi abdomen quedó a la vista, mis cabellos desordenados caían por mis hombros, la forma en la que mi cabello estaba recogido antes ya no existía.