Entrevista sorpresa

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Los documentos no paraban de llegar a la oficina de Neuvillete; se sentía atrapado en aquellas cuatro paredes que veia a diario, si el café no le desagradara, estatua seguramente tomando un poco siquiera para mantenerse aún cuerdo, necesita un descanso... Necesitaba tomar aire fresco... Necesitaba el calor de los brazos de alguien en específico... Lo necesitaba a él...


Sus ojos inconscientemente miraron el reloj de su escritorio "7:45" dejo escapar un suspiro, el infierno se estaba aproximando y los casos de robos y desapariciones aumentaban cada día más, aveces Neuvillete quería simplemente dejar su trabajo y tener una vida normal, pero su propia mente sabía que si sucediera algo así no sería capaz de ayudar al pueblo de Fontaine. Con tantas amarguras decidió sufrir en silencio.


Se dio la vuelta en su silla para ver el cielo de su pueblo de tonos naranjas y rosados, sería una hermosa vista para cualquier mortal.... " Esto le gustaría mucho a él..." Pensó Neuvillete mientras volvía a pensar por quinta vez al día del mismo chico, se quedó quieto en su sitio durante unos segundos antes de decidirse a escribir una carta para el chico.


Escribió con algo de apuro en una hoja en blanco que tenía cerca suyo, su letra elegante y firme se veía algo apurada y hasta torpe en algunas palabras, cuando finalmente acabo de escribir la carta escribiría al final de esta misma " para el Duque " antes de pedirle educadamente a una de sus melusinas más fieles, que le ayuda a enviar eras carta.


– disculpe señorita Kiara – dice neuvillete mientras se acerca cuidadosamente a la pequeña melusina de colores rosados.


– uh? Dígame su majestad? – dijo con voz calmada la pequeña melusina..


– podrías enviar esta carta al administrador de la fortaleza Meropide?– pregunta con algo de timidez, esto no se fue de la vista de la pequeña melusina la cual le sonrió.


– claro– con sus pequeñas manos agarraria el sobre – le daré su respuesta del duque apenas la tenga.


– gracias, eso sería muy considerado – una sonrisa amable se crearía en el rostro de Neuvillete.


Mientras Neuvillete esperaba la respuesta del duque, en su oficina siguio con su trabajo, pasaron algunas horas hasta tener que escuchar la puerta de su oficina siendo tocada. Ya eran casi las 9 y eso le tomo de sorpresa.


" Puede entrar" dijo con una sonrisa esperando encontrarse con la pequeña melusina llamada Kiara, pero lo que vio fue a una muchacha de cabellos rosados.


– buenas noches, Monsieur Neuvillete – dice haciendo una reverencia.


Esto tomo de sorpresa a Neuvillete, su expresión se volvió más seria y dura .... ¿ Donde estaba Kiara? ¿Y quien es esta chica? 


– que es lo que la trae por aquí? – pregunto de un tono recto y algo escalofriante, era el mismo tono que usaba para hablar con testigos y en sus casos de la ópera.


– Estoy aquí para hacerle algunas preguntas, mi nombre es Charlotte, reportera famosa por todo Fontaine – respondió con entusiasmo.


¿ Una reportera? ¿ Acaso fue por alguno de sus casos ?


– oh... Disculpe, pero respuestas o justificaciones de mis casos no pueden ser respondidos en - fue interrumpido abruptamente 


– ¿ Que tipo de relación tiene con el Duque? – pregunta de forma repentina Charlotte mientras sacaba una pequeña libreta. Esta pregunta agarro frío a Neuvillete, se quedó tan callado que Charlotte sabía que había tocado un punto exacto del Ludex.


– tenemos una relación política y laboral por nuestro trabajo...– respondió con algo de desconfianza.. no sabía si de esta respuesta iba a salir más preguntas incómodas.


– oh pero... Los compañeros de trabajo no salen ni tienen citas, Monsieur Neuvillete... Sabía? – dice con un ligero brillo en los ojos Charlotte mientras escribe rápidamente algo en su libreta.


– yo uh... – Neuvillete parecía claramente incomodo por aquello – yo creo que no debería responder aquello-


– solo es para un reportaje ! Solo serán una cuantas preguntas, no será nada malo– intento convencerle Charlotte.


– creo que la respuesta que le dí es más que suficiente, solo el duque y yo tenemos una relación laboral y política – responde con algo de amargura en su voz, iba a seguir hablando hasta que se escucha la puerta abrirse.


Neuvillete levantó la mirada de donde estaba Charlotte y vio a Wriothesley junto a la pequeña melusina " mierda ..." Pensó Neuvillete mientras miraba directamente a Wriothesley.


– oh .. interrumpí algo?– pregunta wriothesley mientras mira a Charlotte.


– no ! En absoluto! También tengo preguntas para usted!– dice Charlotte acercándose rápidamente hacia wriothesley – ¿ Siente alguna cosa por el Ludex? ¿ Tiene algún significado más que político y laboral sus citas nocturnas? ¿ Acaso las flores de la oficina del Ludex se la dio usted? ¿ Desde cuándo van saliendo? ¿Quien fue el que dio el primer paso?


Wriothesley parecía algo sorprendió al escuchar tantas preguntas por parte de la reportera.


– yo eh.... – wriothesley parecía también algo incomodo – creo que eso no debería responder y... Que debería irse, vamos a hablar cosas legales el Ludex y yo... Entiende ? – dice mientras saca a empujoncitos a Charlotte.


– pero ! Yo! Aún no les he preguntado mas cosas! – se queja Charlotte 


– uy... Será en otro momento... – dijo wriothesley mientras mandaba a la pequeña melusina a mostrarle a Charlotte la salida, después de eso cierra con cuidado la puerta antes de mirar a Neuvillete.


– vaya cosa eh? – apenas se da la vuelta wriothesley siente los brazos de Neuvillete abrazándolo fuertemente – oh... Estas bien? Acaso te incomodo ? 


– yo... Sinceramente no lo se, solo esperaba que pudieras estar un rato conmigo... Ah... Podrías estar-? – pregunta mientras levanta la mirada para ver directamente a Wriothesley.


– claro... Estaré toda la noche contigo si es necesario para hacerte dejar de pensar en esas preguntas raras – dice con una sonrisa mientras con cuidado carga en brazos el cuerpo de Neuvillete, para así dirigirse a uno de los sillones de la oficina del Ludex, así sentándose en este y dejando en su regazo a Neuvillete.


Para wriothesley justo en esos instantes Neuvillete era como un gatito que pedía afecto aunque sea del más mínimo, y eso se le hacía tan tierno que no podría negarse a aceptar aquella petición de darle todo su afecto.

╰┈➤ # ˗ˏˋ Una obra angustiante y pecaminosa { Wriollette}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora