𝐎𝐁𝐑𝐀 𝐃𝐄 𝐀𝐑𝐓𝐄 | 𝑆𝑢𝑝𝑒𝑟𝑐𝑜𝑟𝑝 𝐴𝑈

Capítulo 11 - Infiltrada

Winn no se había movido de su lugar, nunca había estado en una situación tan peligrosa como esa. Había llegado a la mansión de Lena Luthor con la intención de ayudar a Kara para recuperar el cuadro que tanto Lex quería, sin saber que todo sería una trampa.

Lena había matado a su amiga, el momento se repetía una y otra vez en su cabeza. Era por eso por lo que siempre se mantenía detrás de su computadora, si hubiera bajado del auto con Kara, tal vez habría muerto también.

Llevaba varios minutos observando la mansión, esta vez no sabía qué hacer. La vez anterior había escapado, ahora que Kara había muerto, ¿que debía hacer? Solo se quedó ahí esperando por una orden que nunca llegaría.

Varios vehículos entraban a la mansión. No sabía que estaba sucediendo, pero alcanzó a ver el logo de una de las camionetas. Eso no era bueno, menos para él. Tomó la computadora, la tiró al asiento trasero y se cambió de asiento para encender el auto, pero dos hombres se colocaron delante del vehículo, apuntando hacia Winn.

—¡Sal del auto! — el joven hizo caso y lentamente se bajó del coche. Estaba nervioso, levantó las manos en alto, su cuerpo temblaba y el sudor frío se acumulaba en su frente. Se había metido en problemas, y ahora no tenía idea de cómo salir de ahí.

—¡No te muevas! — gritó uno de los hombres.

—¡No soy una amenaza! ¡No soy una amenaza!— gritó Winn, tratando de sonar lo más convincente posible. Sabía que cualquier movimiento en falso podría ser el último y no quería acabar como su amiga.

—¡Identifícate! — ordenó uno de los guardias, acercándose con cautela.

—Soy Winn Schott— respondió, su voz tembló ligeramente.

El guardia se detuvo y miró a su compañero, quien asintió. Uno de ellos bajó su arma para comunicarse con su superior acerca de lo que acababa de pasar. Recibió órdenes para que lo llevaran a la mansión para que fuera interrogado al igual que Kara.

Winn fue escoltado hacia el interior de la mansión con sus manos atadas a la espalda. Cada paso que daba sentía el peso de la incertidumbre y el miedo apoderándose de él. Al llegar al salón principal, se encontró cara a cara con Sam.

—Atrapamos a otro. Este si fue fácil— dijo uno de los agentes.

—Bien, sáquenle información mientras yo interrogo a Kara Danvers.

—¿Kara? ¿Kara está viva? ¿Ella está viva? — preguntó Winn.

—Ya llévenselo— ordenó Sam antes de volver a la sala de estar. No se encontró con Lena ni con Kara donde segundos atrás las había dejado.

—¿Dónde están? — preguntó a uno de sus hombres que estaba cerca.

—Subieron a una de las habitaciones— respondió antes de seguir en lo suyo.

Samantha con pasos decididos subió las escaleras, Lena se estaba tomando demasiado tiempo para contarle todo a Kara y no estaba para perder el tiempo, mientras que Lex todavía seguía libre.

—Bajen, debemos hablar— dijo la directora apenas entró a la habitación.

[...]

Lex Luthor estaba furioso. La operación para recuperar el cuadro había fracasado. Si su hermana sabía que estaba vivo eso no era buena señal. Debía irse de ahí cuanto antes. Observó a las chicas por unos segundos antes de llamar a sus hombres para que fueran por él. A pesar de que el sótano era un lugar seguro no podía darse el lujo de confiar en eso. Lena podría tener su ubicación y no se quedaría para ser carnada fácil.