Sé Mío

472 92 9
                                    

—Mi hermoso Vante... El destino te trae aquí, frente a mi — sonrió ladino.

—¿Este bar... Es tuyo?

—Exactamente bebé, este es mi imperio.

—Yo...

— No necesitas decir nada cariño, solo sentirte dichoso por volvernos a encontrar — lo observó serio por unos segundos — has sido un chico muy malo necesitas un castigo — dijo con voz grave.

—No entiendo ¿De que hablas?

Taehyung trataba de mantenerse tranquilo, disimulando los nervios y la vergüenza que sentía por tener de nuevo frente a el a Guk, el hombre al cual le entregó su virginidad.

—¿Que hacias en la sección privada?

En ese momento recordó lo que había pasado con Yeonyun unos minutos atrás, el beso que habían compartido y que de no haber sido por el llamado de este mismo hombre a su acompañante, lo más probable es que estaría teniendo sexo con ese chico.

Por la mirada que le otorgaba el mayor podía advertir que el estaba al tanto de todo, a pesar de haber estado en un lugar privado.

—Explorar...

—¿Este mundo?— pregunto para recibir un asentimiento de la parte contraria — ¿A eso has venido al Nirvana?

— Quería conocer el bar, había escuchado de el y los últimos hechos me orillaban aquí, ha cambiar toda mi vida... pensar distinto.

— Iluminame — dijo sentándose en su sillón de cuero con sus piernas separadas y sus brazos en los costados— ¿Que te arrastró aquí?

La imagen que tenía Taehyung frente a el, era simplemente maravillosa.

La tela de los pantalones se apegaba a los gruesos muslos de Jungkook, dejándole apreciar su trabajado cuerpo, haciéndole desear sentarse sobre ellos y dejar que el mayor lo tomara a su antojo.

Jungkook sin duda alguna era un deleite para los ojos en su máximo explendor, un hombre completamente hermoso por el que estaba seguro podría perder la cabeza.

Sonrió levemente, mientras sacudía su cabeza y daba una explicación al pelinegro que lo observaba atento a cada movimiento.

— Descubrí que mi novio estaba conmigo por una apuesta — dijo sincero— el solo buscaba sexo, mientras yo era un ingenuo estúpido que pensaba en la idea del amor como un verdadero imbécil.

— Entonces decidiste solo venir aquí y entregarte a los lobos...

—De hecho me entregué al primer lobo que ví y curiosamente fuiste tu.

—Con que esa fue la razón para darle tan poco valor a tu virginidad, entregarte a mi, aún sin conocerme.

— Abrí los ojos, estaba molesto y pensé en perderla con cualquiera, daba igual, quería demostrarle a el y a mi mismo que su estúpida apuesta no había valido de nada, que podía entregarme a otra persona y así en cierta forma podría vengarme de su absurdo plan.

Jungkook se puso de pie, caminando hacia el hasta quedar frente a frente, imponiendo su majestuoso porte ante el delicado cuerpo de Taehyung que se encontraba algo tembloroso y sonrojado.

— Fuí afortunado— levantó su mano para acariciar el suave rostro del menor— de todos los lobos que podrían haberte cazado y devorado, el lobo mayor fue quien te encontró— dijo mientras decendia su toque por el cuello del contrario dejando su mano alrededor de este.

—Podria haber sido cualquiera— dijo atrevido.

El pelinegro presionó levemente el cuello de Taehyung, dándole una llamada de atención que fue captada de inmediato por el chico, el cuál gimió bajito, desconociendo por completo su reacción, sintiéndose extraño por lo que le había gustado aquella actitud.

Peligrosa tentación (Kookv)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora