Amanecer De Criaturas: La Revelación De Los Híbridos [Terminada]

Capítulo 36: Lux perpetua

**Narra Derek**

Estaba sentado en una banca de un pequeño parque en las orillas de la ciudad. Las calles ya estaban desiertas a estás horas y la lluvia ya había hecho su aparición. Estaba completamente mojado y ya estaba un poco aturdido por el alcohol. Después de salir del bar tuve que ir a una licorería por más alcohol. En este momento ya tenía tres botellas de whiskey encima y una botella de vodka que estaba por terminar.

Me sentía enojado, cansado, culpable y solo. No había nadie conmigo. Me levanté furioso y, después de terminar lo que quedaba de la botella de un solo trago, la arrojé al suelo haciendo que se estrellara en cientos de trozos pequeños.

¿Estaba llorando? ¿Porque?
No lo entendía. Se supone que Dios me envió aquí para proteger a Lisa y cumplir mi misión en la tierra para así poder ganarme la confianza de Dios y lo había arruinado todo. Me tire al suelo de rodillas y mire hacia el cielo. Las gotas de lluvia pegaban en mi rostro y algunos rayos ya caían a lo lejos.

-¡Que quieres de mi! Hice lo que me pediste, trate de ayudar a todos y me condené. Dios ¿Por qué me has abandonado?-grite pero no había respuesta.

Era real, Dios ya no estaba conmigo. Me quedé solo, lo entregue todo y lo perdí.

-¡Aaaaah! ¿Que más quieres de mi? Te daría mi estúpida vida aquí mismo si es necesario-me levanté completamente mareado. Camine en zigzag, me sentía derrotado.

Era hora de volver a lo que era mi hogar en estos momentos. Saqué mis alas volando por un momento desorientado. Cuando tome el rumbo también volaba en zigzag. Mierda, estaba poniéndome ebrio.

Con gran esfuerzo volando entre la lluvia por fin llegué al bosque. Decidí detenerme un momento para tratar de orientarme. Miraba los árboles en la oscuridad y entre ellos a algunos metros al fondo algo parecía brillar. ¿Dios? Dije para mí mismo creyendo que era una señal.

Me acerqué lo más que pude y cuando llegué me quedé estático en mi lugar.

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**Narra Drake**

Y la noche había llegado. Me la había pasado leyendo el diario de mis padres. Estaba tan concentrado que no me di cuenta del paso del tiempo. Me levanté para estirarme. Podría jurar que me estaba dando sueño.

-Vaya día-dije para mi.

Estaba a punto de volver a mi lugar cuando una voz llegó a mi mente.

~Drake, Drake, Drake ¿Estás ahí?~dijo esa voz que no pude identificar de inmediato pues las palabras salían a rastras.

~¿Hola?

~Drake, soy Derek-cuando dijo eso abrí los ojos sorprendido ¿Estaba ebrio?

~ ¿Derek, en serio estás ebrio?~le dije en tono burlón. A el no le pareció agradarle porque de inmediato hizo un sonido que indicaba que quería que callara.

~Drake, no es momento de eso. Necesito que vengas a dónde estoy en este momento. Hay algo que debes ver pero no quiero que le digas a nadie~articuló mejor lo que me dijo. Yo pensé de inmediato que era algo personal.

~¿Seguro que estás bien?~pregunté para asegurarme.

~Vampiro imbécil-dijo casi susurrando pero aún así lo escuché en la conexión~solo ven a los territorios del sur. Casi llegando a la ciudad. Pasó algo y creo que significa peligro~ok ahora sí ya me estoy preocupando.