Amanecer De Criaturas: La Revelación De Los Híbridos [Terminada]

Capitulo 8: De Híbridos A Humanos

*Narra Jane*

-Dígame que no es verdad-le dije a Marian mientras ponía ojitos suplicantes.

Con su magia estaba haciendo de nosotros dos cosas, ocultar nuestro rastro haciéndonos pasar como humanos y cambiar completamente nuestra apariencia. Al parecer había cazadores en esa ciudad y podían reconocernos. Jasón lucia gracioso con los lentes exageradamente ridículos, yo creo que debía verme igual.

-¿Por qué nos hace esto? Se supone que debo ser sexy vine al mundo con el propósito de embellecerlo, no me quite mi misión-Jasón era bastante chillón, le habían puesto un hechizo y algún pequeño rastro de acné comenzaba a salir, realmente pareciera que en algún momento de su vida pudo tenerlo-Porque-exclamó con terror mientras se tiraba de rodillas al suelo con la vista hacia el techo.

-Alpha Jasón, lo lamento pero es necesario a menos que quiera a un montón de adolescentes humanas con las hormonas alborotadas detrás de usted-solté una risita y ahora la bruja se dirigía a mí. Acercó sus manos a mi cara y me estaba poniendo nerviosa.

-Alto-exclamé a tiempo-creo que lo hacemos demasiado obvio, sería mejor que conmigo solo sean lentes, así no creo que haya problema-Marian pareció pensarlo y asintió.

-Tiene razón Alpha Jane, entonces...

-No es justo, se supone que eres mi hermana gemela, debe de ser igual-Jasón sin duda estaba desesperado.

-Jasón, quieres callarte de verdad que me estas desesperando. Ten un poco de más respeto por el trabajo que está haciendo la señorita Marian-lo regañé y el agachó la mirada.

-Lo lamento, pero tú sabes que soy sexy, y esta imagen no va conmigo-susurró y yo negué con la cabeza.

-Acabemos con esto-le dije a Marian y asintió mientras movía sus manos y pronunciaba palabras en un idioma extraño.

***

-Ni se les ocurra, que ni se les ocurra-fue tarde, los chicos estallaron a carcajadas mientras nos veían. Yo no lucia tan mal después de todo, los lentes me parecían bien. Jasón fue el más afectado, de verdad que mi hermano parecía un nerd.

-Cállense, al menos yo tuve el valor de aceptar la misión, no como ustedes cobardes-las risas pararon y Drake pareció molestarse. Se acercó encarando a Jasón.

-A quien le dices cobarde, prospecto de adolescente nerd, debilucho-parecía que jugaban, no se veían realmente molestos. Así eran ellos, “Hombres”

-A ti, paliducho sin memoria-el insulto le había quitado la diversión al asunto, los chicos murmuraron un “uuui” que no ayudaba en nada.

-Dame tu mejor golpe, nerd de mierda-contestó Drake y Jasón impacto su puño su estómago. Este ni se inmuto un poco y todos se echaron a reír de nuevo.

-Maldita sea pueden callarse-todos pararon al instante cuando grité-dejen de provocarlo, además Jasón, debes recordar que por el momento tu fuerza es la proporcional a un humano.

-Eso no es verdad, soy más fuerte que un humano convencional-corrigió.
Marian sello un momento a nuestros lobos y también nuestro lado vampírico, redujo nuestra fuerza lo más que pudo, claro que corremos el riesgo de que si uno de los dos se enoja más de lo debido y no se controla todo se ira al carajo.

-Bueno, creo que es hora de irnos-dijo Edward. Los chicos se acercaron y me abrazaron por turnos.

-Bueno señorita-dijo Drake-aunque usted crea que su aspecto es pésimo, permítame decirle que se sigue viendo igual de hermosa y sexy que siempre-seguíamos en el juego de conocernos. Para mi fortuna podía seguirlo gracias al brebaje especial de Marian.

-Oh, muchas gracias Drake. Parece que debo completar mi misión. Debo irme-estaba a punto de abrazarme pero me di la vuelta para ir detrás de Edward y mi hermano.

Era verdad que el brebaje borraba toda conexión que tenía con Drake, al menos esa cosa engañaba a mi corazón pero no a mi mente. Yo sabía que cualquier tipo de contacto con él me dañaba, no solo a mí, también a mi loba.

Subimos al nuevo auto de Edward. ¿De dónde saca tantos autos?
Deje esa pregunta vagando mientras nos alejábamos. No quise despedirme de los niños porque terminaría llorando y ya no quiero derramar ni una lágrima más. No quería ser débil. Quería conservar esa fortaleza al menos hasta que terminemos esta guerra.

***

Llegamos de madrugada, el sueño no se había hecho presente, al menos en mi. Nos estacionamos fuera de una pequeña cabaña que parecía antigua. El ruido de los autos pasar en la ciudad podía escucharlo perfectamente, sin duda estábamos cerca. Jasón recargaba su cabeza en mi hombro y respiraba tranquilamente.

Su cabello algo largo cubría el supuesto acné en su frente y sus lentes hacían resaltar el color brillante en sus ojos. Durante estos años el color de nuestros ojos ha estado cambiando, una combinación extraña de rojizo en mi caso y dorado en el caso de Jay.

-Jason-susurré para que se despertara. Mientras tanto Edward había bajado inspeccionando el lugar.

Jason se reusaba a despertar así que comencé a rascarlo detrás de la oreja, el comenzó a reír mientras movía su pierna enérgicamente. Sin duda se le había pegado alguna maña de su lobo. Abrió los ojos y parpadeo un poco. Le acomodé los lentes y sonrió.

-Promete que no me rascaras la oreja en público, sabes que eso hace que desate cierta tendencia a mover mi pierna como un perro-susurró y solté una risita.

-Lo prometo, pero bajemos del auto, acabamos de llegar-le dije y ambos bajamos.

Edward lobo parecía entretenerse olfateando algo en el suelo. Luego parecía examinar algo mas, me agache a su lado y también intente observar a pesar de los lentes.

-Cazadores-susurré mientras Edward asentía. Aspire el aire lo más que pude, pues al estar sellados en mi interior las criaturas sobrenaturales, mis sentidos se habían reducido-pasaron por aquí hace como cuatro días, las huellas están casi secas, al parecer solo pasaron y se fueron-concluí mientras mi amigo volvía la normalidad.

-Esperen, hay algo que está brillando ahí-murmuró Jason mientras usaba la linterna de su teléfono. Cuando me acerqué a mirar, vi una envoltura de alguna golosina que se reflejaba en los lentes de Jasón.

-Recuérdame que cuando regresemos regañe a Marian por dejarte casi ciego-solté una risita y Jason rodó los ojos.

-Dejen de jugar. Aquí nos quedaremos hasta que traigan a Derek-esperen, dijo ¿quedaremos?

-¿Quedaremos?-preguntó Jason y Edward asintió.

-por el momento ustedes están indefensos, necesitaran protección. Solo tenemos cinco días.

-Bien, ya que no tenemos de otra-dije y entré. Jason hizo lo mismo.

-Comencemos de nuevo. De una raza hibrida poderosa pasamos a ser humanos de nuevo-dijo mi hermano con nostalgia y suspire. De híbridos a humanos, eso no va a salir bien.