Hoy es viernes, y ya sabemos lo que significa. Fin de semana con el profesor Jeon.
-Solo estarás un día. Te traeré el domingo en la mañana. No preguntes el por que.- Dijo con las manos en el volante y viendo fijamente la carretera.
-¿Estas enojado?.- Dije frunciendo el seño.
-No, solo que ya se que cuestionas todo.-El tono que ocupo me demostró que efectivamente no estaba enojado.
-Bueno. De todos modos ¿A quien le importa no pasar un día contigo?.- Dije en un susurro.
Volteo a verme cuando llegamos a un semáforo rojo.
-¿Estas enojada?.- Esta vez el pregunto.
-No, estoy muy feliz.- Simule una sonrisa amable.- Me agrada tener mi domingo para mi.
Agarro mi nuca y me acerco a el.
-A mi no me agrada, me gustaria tenerte para mi, todos los días.- Coloco su mano a mi muslo.- Consentirte todos los días.- Los carros empezaron a tocar el claxon pero el estaba tan sumergido en mi mirada que me pareció que no los escuchaba. Corte ese momento quitando su mano de mi muslo.- Perdón, pero este domingo no puedo.- Arranco el carro.
Escuchar lo que acaba de decirme me hizo sentir ¿mariposas?. Tener estas emociones me esta asustando.
Llegamos a su departamento y cenamos.
-¿Quieres hacer algo?.- Pregunto mientras lavaba los platos.
-Si, dormir.- Dije caminando hacia su recamara.
No estaba enojada pero me sentía disgustada. Presentía que me ocultaba algo y lo que me molestaba mas, quiero que me explique con detalles pero no soy nadie para que me de explicaciones. Yo no soy así.
Tn simplemente debes dejarlo pasar.
Agarre mi ropa interior y me metí a la ducha.
Jungkook>>
Entre a la habitación y escuche la regadera. Presentía que no tardaría en salir por eso me apresure y entre al baño.
Tenia los ojos cerrados pero me logro escuchar.
-¿Jungkook?.
Me acerque a ella sin darle una respuesta.
-¿Profesor Jeon?.- La vi un poco asustada.
Enseguida abrió los ojos.
-¡¿Por que no me respondiste?!.- Sus ojos se cristalizaron.
Su cuerpo empezó a temblar. Parecía realmente asustada. No sabia que decir, no era mi intención asustarla así.
Se lanzo a mi y me abrazo.
-Lo siento.- Dije abrazándola de la misma forma.
Empezó a llorar con su cara oculta en mi pecho.
Oculto su cara en mi pecho y comenzó a llorar.
-¿Tn que sucede?.- Dije preocupado.
-Solo sígueme abrazando, por favor.
El agua seguía cayendo en nosotros, ella seguía aferrada a mi torso. Con una mano acaricie su cabello mojado y la otra estaba alrededor de su cuerpo.
Nos mantuvimos así unos minutos, estaba confundido no sabia que le estaba ocurriendo y me sentía culpable.
Cuando se tranquilizo tome su mentón e hice que me mirara a los ojos.
-Estoy bien.
Coloque mis dos manos en sus cachetes y con mis pulgares acaricie sus mejillas.
-Puedes confiar en mi. Si quieres contarme algo puedes hacerlo, muñeca.
-No fue nada.- Se volteo para cerrar la llave del agua.- Estoy bien.- se coloco su bata de baño y salió de la regadera.
La seguí al lavabo y la abrace por la espalda.
Comenzó a llorar de nuevo y nuevamente se volteo para abrazarme.
-Tu ropa... esta empapada.- Soltó haciendo que yo también me de cuenta que estaba empapado. Se alejo y agarro una toalla, colocándola en mi cabeza para secar mi cabello. Secaba mi cabello en silencio.
Verla en este estado solo hacia que deseara estar a su lado toda la vida.
Sus ojos se clavaron en los míos y me fue inevitable no besarla.
Descanso sus brazos en mis hombros.
-Lo siento.
-No lo sientas.- Sonrió tiernamente.- Cámbiate o te resfriaras.- Me dio un beso corto y salió del baño.
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