Perdido en tu mirada [Rubiusplay]

12 | ¿Mi pasado o un posible futuro?

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Narradora POV

__ ¿Seguro que quieres ir solo?, podemos esperar a que regrese del trabajo o posponer la cita para el fin de semana __Vegetta tomaba las manos de Rubius.

__ No amor, tranquilo ademas... no tengo mucha esperanza de que haya cambiado algo ¿sabes?, sino ya lo hubiéramos notado ¿no crees?

__ Tienes razón, pero no te niego que me encantaría estar ahí si es que te da un positivo.

Rubius besa la punta de su nariz.

__ Cualquier cosa corro avisarte, todo estará normal __le sonríe. Ambos se miran con sonrisas, pero la de Vegetta reflejaba mucha dulzura, cosa que incluso Rubius le llamo la atención pues tenia tiempo que no sentía de esa forma a su esposo. 

Vegetta coloca una mano en su mejilla del castaño, y este lo mira asombrado y colorado.

__ En la noche quiero hablar contigo, de algo importante chiqui... __dice Vegetta__ quiero hablar de muchas cosas que, creo que son muy importantes.

Eso hablando unos instantes el corazón de Rubius, sobre todo lo hizo entrar en duda.

__ ¿A-Ah si?, ¿sobre?

__ En la noche lo hablamos chiqui, llegaré más tarde por la juta con accionistas, pero tendremos mucho tiempo de hablar... ojala tengas antojo de un poco de sushi __le besa la mejilla__ hace mucho que no vamos, ¿te parece?

Rubius con nervios asiente.

__ Me parece buena idea.

__ Perfecto, entonces ya sabes cualquier cosa me avisas, hasta la noche chiqui.

Con eso lo toma de la cintura y se acerca lento, unen sus labios en un beso bastante dulce pero con algo de intensidad, eso hizo sentir por unos momentos escalofríos en el castaño.

__ Te amo.

Rubius le sonríe.

Con eso Vegetta se va de la casa, dejando solo al castaño en la habitación completamente,  mira el reloj aun era muy temprano, eran casi las 6 de la mañana.

Se dejo caer en la cama mirando el techo y suspirando, tenía la cabeza que le iba a estallar por completo y estaba muriéndose de los nervios, tanto al grado que la presión se le bajaba o subía, no sabía pero las nauseas venían con eso y era horrible.

No iba ir a su cita con la doctora, no iba ir a revisar nada.

No iba haber charla con Vegetta.

No iba a volver a casa.

__ Vamonos de aquí, si no serás lo suficiente "egosita" para pedirme que no me vaya, yo si seré lo suficiente idiota para decirte que no te quiero perder y quiero que te quedes conmigo, vamonos y escapemos de aquí juntos.

Las palabras de Auron recorrían una y otra vez su mente, no podía creer que el de los tatuajes le había pedido eso, nunca pensó que algo así llegaría todo esto.

Después de un tiempo de la noticia, Auron se lo propuso, han pasado un par de semanas desde entonces y la mayor locura ha sido aceptarlo, porque aun que le costo aceptarlo, el tampoco quería perder a Auron.

La idea lo mataba.

Pero las cosas no han sido sencillas de planear y menos de asimilar por el hecho de que un tiempo para acá, Vegetta parece haber retomado su papel de esposo amoroso como en el pasado, como si lo que siempre le hubiera puesto de mal humor había desaparecido y Vegetta regresaba.