21 Lactancia

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Lewis se había corrido por sexta vez seguida, los gemidos hacían eco constantemente alrededor de la habitación mientras este se retorcía, al mismo tiempo que abría y cerraba las piernas constantemente dejando ver su tambaleante pene el cual no quería verlo ya que le hacía recordar que su cuerpo lo estaba disfrutando. Las crías se retorcían y jugueteaban tan felizmente dentro de Lewis que lo hacía gemir y gemir sin parar, hasta que el agua de la tina había llegado al punto exacto en el que sumergiría la redonda panza por completo. No paso ni cinco minutos para que Lewis pudiera por fin volver a descansar.

Era la cuarta vez que volvía a drenar el agua el cual se manchaba constantemente haciéndole repetir el proceso, el problema era que con el mínimo movimiento hacia que las crías estimularan a su madre convirtiendo la situación en algo más parecido a una masturbación asistida por las crías.

-no...no.....basta~ Lewis tartamudeaba de placer al sentir un ligero golpe que lo hizo saltar de un susto, despertando así a las crías y posteriormente volvía a cerrar las piernas en un esfuerzo por contener el orgasmo el cual era inevitable.

Gri había vuelto, este había traído el tercer pastel que Lewis le encantaba comer siempre, algo que era muy probable que lo hiciera vomitar, pero al estar en reposo en la tina no era muy constante que los mareos se presentasen.

- Ten, debes de tener mucha hambre- dijo Gri sarcásticamente sabiendo que era su quinto o sexto platillo del día

Lewis tomo el plato y el tenedor para posteriormente volver a disfrutar de su comida favorita, saboreaba la crema y el sabor tan dulce que lo hacia olvidarse de su situación actual.

-Ahora que estas mas tranquilo, creo que es momento de que revisemos esos pezones- dijo firmemente

Lewis se asusto y se sumergió en la tina, este quiso alejarse de su compañero, pero este sumergió los brazos y lo saco de nuevo a la superficie.

-No comencemos de nuevo-

-Suéltame!, ¿Por qué demonios quieres...? Para empezar, ¡¿Como es posible que pueda lactar?! – Lewis cuestiono a su compañero el cual lo mantenía sometido con sus brazos

-Bueno, sabes perfectamente que la madre cuando da a luz debe de amamantar a su cria, recuerda que hicimos ese procedimiento quirúrgico para que pudiésemos preñarte, sino como pensabas darle de comer a tus futuros hijos. - Describió Gri mientras acariciaba gentilmente la punta del vientre de Lewis.

~Ngh, suelta....me, no toques alli~ Lewis volvió a gemir

-Bueno, sin más preámbulos, debo comenzar- dijo Gri dando asi paso a su procedimiento

Gri posiciono a su compañero mucho más elevado en la tina para que pudiese mantenerse expuesto su pecho. Lewis asustado miro a otro lado para no presenciar lo que ocurriría a continuación. La mano de Gri se acercó a su abdomen, deslizándose gentilmente hacia arribo para posteriormente con un ligero toque de sus garras dio un pequeño pellizco al pezón derecho, algo que hizo chillar a Lewis.

~Ahh,.....Gri....~

- Oh no puedo creerlo, si que eres muy sensible- dijo Gri entre risas mientras ahora tocaba con la yema de sus dedos el pezón, acariciándolo y comenzando a explorarlo, este quería verificar que la forma y su manera de funcionar sea correcta, poco a poco con ciertos estímulos comenzó a pellizcar más seguido, Lewis volvía a gemir y a pujar, Gri tomaba su dos pezones y les daba pequeños estirones los cuales hacían que el liquido blanquecino comenzara a emerger de estos y Lewis seguía gimiendo cada vez más alto.

La estimulación siguió durante minutos, Lewis con sus dos brazos intentaba empujar a su compañero, pero este no sentía la fuerza del humano, en cierto momento los dos pezones volvieron a lactar, Lewis comenzaba a lagrimear ante la sensación tanto dolorosa y sensible como placentera que se había quedado impregnada en sus pezones. La leche salió disparada como una fuga llegando incluso afuera de latina, esta se dispersaba finalmente por su pecho hacia abajo dejado varias tiras de leche mezclarse con el agua de la tina.

-Todo va perfecto, ahora debo investigar a fondo los nutrientes- Gri menciono luego de lamerse los labios

-Espera...¿Que vas a hacer?- Dijo Lewis aún más nervioso que antes

-No te muevas Lewis, no te va a doler- dijo Gri el cual posteriormente abrir sus fauces y pegar su lengua en la punta del pezón derecho.

Lewis volvió a gemir asustado, mientras tanto Gri sometido con sus brazos a Lewis y prosiguió a juntar sus labios y chupar lenta y profundamente la leche materna de Lewis. Mientras tanto el embarazado gimió aun más mientras asqueado, pero en pleno sentimiento de exstasis combinado con relajación lo hizo entrar en un trance profundo.

-Gri.....no....no....no chupes.........ahhhh~ dijo mientras sentía un orgasmo avecinarse a su vagina interna.

Gri hizo caso o miso y prosiguió a saborear con deleite la leche de su humano, bebía sin parar ya que el mismo éxtasis y el saber dulce de la madre lo hizo mantenerse en un trance relajante el cual podía controlar, pero que se había dejado llevar para disfrutar su trabajo.

-Gri.....no mas....no....no no pares- Lewis se contradijo mientras imploraba más de este placer

-No lo....no más, Gri.....no pares....no pares.....amo esta sensación- dijo entre tartamudeos que lo hizo arquear la espalda y cerrar tan fuerte los ojos como pudo.

(Estas tan sabroso Lewis) pensó el reptil (Quisiera saborear por siempre tu néctar) pensaba con deleite mientras acariciaba y exploraba íntimamente el vientre de su compañero hasta bajar entre sus entre piernas, al llegar allí su tacto lo hizo percatarse que el aparato reproductor de Lewis estaba completamente erecto.

-No no no....No me toques allí....me voy a...-

al final solo basto un ligero toque en este para que Lewis gimiera y siendo esta vez la primera vez que sintió un orgasmo de parte de su pene. El semen había salido disparado hacia las manos de Gri y este nervioso saco las manos de la tina, la reacción repentina lo hizo alejarse para posteriormente volver a mirar completamente a su compañero. En ese momento los ojos de Gri se habían vuelto corazones, notaba el bello cuerpo desnudo y empapado de su compañero, su abultada panza que hacía sentir mariposas en el estómago de Gri, siendo una facción exagerada pero tractiva que no podía dejar de mirar y pensar en tocarlo y restregar su rostro en el globo de piel que se formaba en la panza de Lewis, finalmente el rostro del humano el cual se veía sonrojado, cansado y jadeante lo que lo llevo a pensar en mas situaciones bochornosas y cuestionables.

-Te.....te vez....hermoso- Gri soltó sin querer aquel comentario que incluso a el le hizo sonrojar su rostro escamoso

Al escuchar esto Lewis se sonrojo igual y miro a otro lado, se sentía sucio y enfermo, estaba disfrutando de una masturbación extraña con un ser de otro mundo y ya no tenia nada mas que pensar mas que en el futuro parto.

-Solo quiero que todo termine ya-

Gri no pudo contener sus emociones y posteriormente tomo a Lewis para abrazarlo tan fuerte como pudo, su cola se agitaba frenéticamente contra el suelo dando reflejando sus impulsos.

-Lewis....yo....no puedo contener más esto- dijo Gri – Te vez tan hermoso, tu piel desnuda es perfecta....es tan majestuosa para mi tu enorme y redondo vientre que no puedo dejar de querer verlo cada vez más grande y redondo, tanto que....no sé cómo describirlo- Gri menciono en un tono nervioso e impulsivo mientras le daba un beso en la cabeza

- Estoy enamorado de tu cuerpo Lewis, te prometo que...hare que el parto sea mucho más fácil de lo que puedas creer- abrazo mucho mas fuerte mientras acurrucaba su hocico en el pelo de su compañero.

Lewis estaba exhausto y atónito, pero no tenia de otra más que corresponderle el abrazo

-Yo no quiero placer....quiero volver a casa-

-No tengas miedo- dijo mientras abrazaba cada vez más fuerte -Te hare sentir a salvo-

Pasaron los minutos en los que los dos al fin se habían calmado esta posición que Lewis cansado y aburrido tomo de nuevo su plato de pastel que se había apartado de la tina para seguir comiéndolo, pero al ver detenidamente no pudo contener de nuevo su vergüenza, el pastel le había caído un poco de su propia leche materna y Gri no pudo contener sus comentarios sarcásticos.

-Si no lo quieres puedes dármelo, yo si quisiera probarlo-

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