City | ᴊɪɴɴᴀᴍ

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Namjoon se encontraba en el plantío, recolectaba las flores para poder ir a venderlas aunque era difícil para él poder agacharse, su vientre había crecido, ahora con 5 meses era incómodo para el seguir cultivando y vendiendo pero no le importaba, el quería seguir haciendo lo que amaba y el bebé que venía en camino no le impediría hacerlo.

— ¿No deberías estar descansado? No quiero que nazca mal nuestro cachorro. — Namjoon reconoció la voz, levantó su rostro y ahí estaba él, lo miró, tiró su canasta sin importarle si sus flores se maltrataban o no y corrió a los brazos de su alfa.

Cuando el nudo de Seokjin se había terminado salió de Namjoon, este se encontraba desmayado debido al dolor y al placer que había experimentado pocos minutos antes, el Alfa se vistió rápidamente y salió del granero para dirigirse a su casa dejando al Omega desnudo acostado en la paja. Jin subió a su coche pero algo en su conciencia le remordia "no soy un monstruo para dejarlo así"  pensó,  así que a pesar de la lluvia que había salió del coche y vistió a medias a Namjoon, lo llevó hacia su casa y lo acostó en su cama, no podía hacer más, ahora si habiendo hecho eso se fue de la granja de aquel bonito Omega.

Namjoon al despertar se percató de que no tenía toda su ropa puesta, un dolor en sus caderas se hizo presente y los recuerdos llegaron a su mente, había hecho el amor con aquel alfa guapo, estaba feliz pero tenía que apresurarse a bañarse y vestirse antes de que sus padres llegaran. Una vez todo arreglado sus padres llegaron, ocultó lo que había pasado, si se enteraran de lo que hizo en el granero probablemente lo regañarian.

Pasaron los días, Namjoon siempre se asomaba a la carretera esperando que su Alfa fuera a verlo o que aquel alfa ruiseño fuera a comprar flores para su Omega gruñón (según palabras de Seokjin) pero ninguno de ellos dos aparecía.
Luego, pasaron los meses y su pancita había comenzado a crecer, Namjoon sabía que estaba pasando y le emocionaba, iba a tener un cachorro del alfa que se enamoró, aunque eso implicara el regaño de sus padres.

– Namjoon ¿¡Quién te hizo eso!? – Namjoon se quedó callado, no podía seguir ocultando su embarazo, a pesar de llevar pocos meses su vientre se veía bastante abultado y era momento de contarle a sus padres– ¿Fue Taehyung? Ahora verá ese-

– No fue el madre– por fin Namjoon pudo decir una palabra– Fue alguien más pero, no puedo decírtelo, el vendrá pronto, yo lo sé– su madre miró con tristeza a su hijo, sus ojos estaban llenos de esperanza y prefería por el momento no volver a tocar el tema.

No fue hasta un mes y medio después que vio a través de la ventana como su hijo con dificultad cosechaba sus flores, de pronto un hombre de traje se acercaba a él y el Omega corrió a abrazarlo, ahí supo que un alfa de la ciudad había dejado a su pequeño Namjoon así.