Por Las Buenas? O Por Las Malas?

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_ Tres de la madrugada del cuarto día y un molesto Kim buscaba  vencer el juego sin fin que creo Arm para despistarle en su incansable busqueda, cada que estaba cerca de lograrlo otro nivel de resguardó aparecía frente sus narices.

-Maldito no me puedes vencer en mí propio juego, yo te cree.-

Un ojeroso y trasnochado pelinegro se quejaba al no poder dormir durante dias, maldito Arm te mataré por hacerme esto, fue lo que dijo él peli largo al salir victorioso como siempre después de un largo tiempo de lucha cibernética. Te encontré musitó al ver cómo, dónde y cuando se ejecutó todo el teatro que preparo Khun anteriormente con la  ayuda de Arm.

-Ay hermano, tú traición te costará mucho.-

Interesante, asi que estás en Venezuela, Malditasea estás lejos, bueno  de igual manera, iré por tí y te castigare por irte lejos de mí, acaso no sabes que te necesito, yo  te lo dije Porchay tú me perteneces pensaba kim al sacar su teléfono para llamar a su hermano mientras miraba fijamente la pantalla de su computador.

Aló dijo Kinn al contestar la llamada, Aló? Volvió a decir al ver la pantalla iluminada de su celular para ver la hora. Es enserio Kim, son las 3 de la mañana se quejó.

Los encontré..

Donde? respondió él mayor con emocion alejando de su mente nublada él sueño que hace Segundos sentía.

Venezuela fue lo que respondió Kim sin ninguna emoción.

El maldito de Khun los mando a Venezuela, ya no se llaman Porsche ni Porchay ahora son Barcod y Apo Tinnasit, él muy maldito nos traicionó con la ayuda del imbécil de Arm, están con una chica, todo fue una trampa puesta por Khun aquella mañana, todo era parte de su plan soltó él menor.

Kim cálmate le pidió Kinn al escucharlo de manera exasperante o eso creía él mayor.

Disculpa? Acaso no estás consiente de lo que dices? Ellos dos me lo quitaron Kinn, quiero matarlos no me importa, al demonio la hermandad.

Calma volvió a intervenir él mayor con paciencia fingida..

Bien, descuida kinn estoy calmado, lo pensé bien y por esta vez le daré una lección a mí querido hermano mayor fue lo único que dijo al cortarle la llamada.

_La madrugada paso dándole paso a la hermosa mañana, todos se encontraban desayunando en aquella silenciosa mesa donde  Korn y sus dos hijos mayores desayunaban en paz o eso se veía desde lejos.

Una vez terminado con su respectiva comida cada quien se fue a cumplir con su deber, Kinn en su oficina preocupado por la amenaza disfrazada de su hermano menor hacia él mayor de los tres, sin duda se encontraba dividido y sin saber que hacer, aunque este tambien estaba feliz por saber donde estaba su novio, mas podia la duda de saber cual seria el siguiente paso de su pequeño hermano carentes de emociones.

Demonios Kim que vas hacer? Se preguntaba Kinn al leer algunos documentos sin ningún interés, las horas pasaban y él mayor se estaba estresando al no obtener ninguna señal de su hermano, su teléfono sonó como alguna señal del cielo anunciando un mensaje del cual se dedicó a procesar  rápidamente para luego salir despavorido de su oficina hacia él cuarto del mayor.
Kinn no entendía como era posible sentir tanta oscuridad con tan solo unas simples palabras, nunca  en sus años estando dentro de la mafia como el cabecilla, había experimentado de aquel sentimiento que sintió al leer el mensaje de su hermano menor, Kim era de temer, tan frio y calculador con  razon papá lo aprecia tanto. Pobre Chay penso kinn al darse de cuenta que debió ayudar a su cuñado desde un principio, sin embargo así como lo penso desechó aquella absurda idea.

-Eres bienvenido a la reunión de hermanos. Volvió a leer nuevamente el mensaje antes de llegar a la dicha reunión. Su respiración era agitada aunque este trataba de ocultarlo al estar serio, sin pensarlo mucho les ordenó a sus hombres que se quedarán afuera y no intervinieran pase lo pasé. Bien aquí estoy se ánimo al entrar sin avisar a la habitación donde se encontraba Khun.