Segunda parte inicio

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No llevaba ni media hora y en la casa de los Noceda ya había ruido tan temprana hora.

Camila Noceda, lista para hacer un desayuno para 6 personas, bueno... tres brujas, dos humanas y un pequeño demonio (sin incluirse ella misma).

La mujer estaba llena de emociones, pues tener tanta gente de repente en su casa la dejaba muy feliz.

Vivir un tiempo sola las tres, le hizo ver que la ausencia de su marido. Pero Lucia fue buena hija y hermana mayor.

Pero lo único que le molestaba era que sus vecinos seguían mirando mal todo lo que hacían, en especial cuando provocan a una de sus hijas. Por eso la llegada de sus nuevas amistades le vendrían bien a las chicas.

Eda por otro lado, su sentido del humor era muy extraño. Era de una forma tan sarcástica y sin sentido, pero de una forma su estado de ánimo junto a ella le agradaba. Y más porque su hija le encantaba tenerla ahí, su admiración por la bruja era genuina y eso la tranquilizaba. Por fin su hija tenía amistades que podía contar, que no eran falsos o que la evitarán. Por mucho tiempo miraba a su pequeña sufrir, pues la única que lograba esa sensación de aprecio era su hermana mayor.

Lucia era un caos pero entendía el porque, era la única de sus dos hijas que sabía la verdad de su padre. También llegó a ver más de una ocacion a las personas que los acosaron por las deudas de apuestas de su ex marido. Lo que ocaciono que la niña se vuelva adulta y muy sobreprotectora.

Cuidaba tanto a su hermana que se metía en problemas por su felicidad y comodidad. Dejando que sus problemas sean solo a dirección a la mayor. Camila solo podía agradecer que la cuidara, por eso ella como adulta hacia las cosas conforme la ley.

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- ya te dije que no debes preocuparte - dice Eda con su típica pose de bruja. - yo are que se haga los que haces - mira a las dos Nocedas más chicas, mientras que las hermanas Blight miraban la escena sin entender.

Camila no quería dejar a solas a todas ellas, pues su forma de actuar sobre temas delicados ella termina siendo la primera en apuntarse en las travesuras.

Miro a su hija menor y la señaló. - estas a cargo y tu igual Amity, nada de magia. Y nada de atormentar a los vecinos - con eso dicho se fue a su trabajo, tenía una citas programadas ese día y podía dejarlo pasar.

Confiada que las dos pequeñas podían contra las mayores se fue, desicion buena: no. Pero son más responsables que las otras tres opciones.

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Para Amity obedece una orden era importante, por eso ella se encargó de la lista de cosas que había que hacer y todo sin magia. Eda estaba muy frustrada, por eso prefirió irse al cuarto de Camila y esconderse ahí.

King invitó al vecino de Luz a casa para que el juego con el, mientras que las chicas hacían los deberes de limpieza.

Amelia se encargó de la cocina, Luz de los cuartos y Lucia de la sala y baño. Amity se encargaba de que King y Hunter: jugarán mientras limpiaban, el jardín y el patio.

Fue la mejor idea dejar en manos a la más chica de los Blight cargo, pues hasta Luz estaba algo distraída.

Cuando Amelia termino fue con su hermana, veían como los dos de afuera peleando hacían su parte y ambas sonreían por sus ocurrencias.

Cuando Lucia terminó ayudo a su hermana con los cuartos faltantes, por suerte el de su madre no estaba en la lista.

Cuando acabaron, decidieron ir al sótano para arreglarlo y dejar que ese sea la base de las chicas Blight, pues como iban las cosas lo más seguro que Amity se quede con ellas.

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Eda fastidiada de estar encerrada, se cambió de ropa y tomó a Owlbert. Se fue de ahí para buscar que hacer, en el camino encontró el lugar que una vez le hablo Camila donde trabajaba. Ahí entro con su taliamigo, diciendo que se sentia mal y eso hizo que Camila la vea.

- yo me encargo de ella - dice a su compañera y la lleva a su consultorio. - se supone que debías cuidar de las niñas - dice Camila mirando mal a la mujer, sino fuera porque sabía quien es ella y lo que podía hacer, pasaría desapercibida.

- si bueno... no soy buena obedeciendo, soy más de las que dan malas ideas - le responde y deja que Owlbert se deje mimar por la mujeres.

- si lo creo, por lo menos.. ¿avisastes que venías? - pregunta jugando con el pequeño búho.

- nop - responde Eda sonriendo.

Suspirando Camila dice. - que voy a hacer contigo - aunque molesta no estaba, estaba más relajada.

La más grande amenaza de que su casa no termine en una pieza estaba frente a ella, sonrió y dejó que la mujer se quede ahí junto con ella.

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Regresando a uno de mis primeras novelas.

Aclaró que me tarde porque me puse a escribir sobre otras cosas... y bueno... me distrajo y ya la dejé a un lado esta historia.

Pero ahora que regrese, la terminaré lo juro.

E intentaré no tardar en subir capítulos.

Sin más, gracias por la espera y nos leemos luego 😘

888 palabras.

TOH - vida humana y bruja (En Pausa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora