Éter: Cazadores De Lo Oculto

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- últimamente has sido muy mala conmigo hermana, alejarme de la familia como si fuera la oveja negra- Habla Mauro a su hermana, el, su hermana y Emma estaban en una ciudad lejos del pueblo era de noche por lo que estaban en una mesa de un puesto de comida rápida muy concurrido- acaso piensas volverme un marginado como tú-

Dos días antes.

- ten, asegúrate de que el bebé lo use- Maia le entrego la obsidiana a su tío.

- con que tu también lo notaste, el bebé lleva algo oscuro- le dice el hombre de cabello largo- no tenia idea de como decirle a tu hermano, algo tan maligno como eso se escapa de mis manos-

Maia lo tenía claro puede que ahora el Ente que ella creía extinto estuviera débil pero seguía siendo un categoría (A). solo un cazador podría hacer algo en estos casos.

- es importante que  solo la madre éste presente cuando se lo coloques- ordeno ella ya que sabía que si su hermano se enteraba no lo permitiría.

Luego de eso tanto ella como Tania desplegaron velos en las casas de las personas cercanas a él incluida la suya.

A Maia no le gustaba acechar a sus presas era más de las que atacaba sin importar a quien se llevara por el medio eso era bien conocido por sus compañeros por eso Emma estaba confundida, por un lado tenía la esperanza de que en el fondo solo quería proteger a su familia aunque por fuera ella decía ya no sentir nada por ellos y por el otro lado esperaba que su amiga no terminara como la madre de Sáhara caer en la tentación por proteger a un ser querido nunca terminaba bien para un cazador.

Presente.

— veo que esta vez no ocultaste a tu amiga— ahora era el Ente quien hablaba desde el cuerpo de Mauro— También es distinta a la de la otra vez— dijo llevando su mano al su cuello recordando la noche que Tania se lo corto— dime cuantos son, quisiera saber a cuantos de ustedes voy a mandar a la tumba— preguntó con burla.

— aquí esta su orden— interrumpió una camarera colocando frente al hombre grandes cantidades de comida para luego alejarse.

— es desesperante cierto, el hambre, puedes comer todo lo que quieras pero nunca estás satisfecho— le habla Maia tranquila al verlo comer con desesperación— el hambre solo merma cuando el decide alimentarse ¿pero a que costo Mauro?—

— esa mujer se lo merecía— dijo sin pisca de arrepentimiento— además si alguien tiene culpa, eres tu hermanita— acusó para luego tomar el vaso frente a el y tomar todo el contenido de manera rápida— si fueras aceptado su trato nada de esto hubiera pasado—

— por eso aceptaste matarla— dice Emma sería mientras se mantenía reclinada en la silla— por eso querías matar a tu bebé— dice tomando por sorpresa a Mauro— no lo sabias— afirmó ella sonriendo de medio lado— el manto de oscuridad que lo rodeaba tarde o temprano terminaría por matarlo—

— no es cierto— dicen ente y humano atrayendo atención de otras personas extrañadas de oír dos voces de un solo cuerpo— oye tú mi hijo está fuera de todo esto— hablo Mauro a la Entidad que habitaba en el.

— no las escuches, te lo prometimos cierto— rebatió con prisa el ente— tu y tu niño estarán bien con nosotros, pero los demás son prescindibles y yo tengo que comer—

"Emma" aviso Maia por el enlace.
" si, avisaré a Emir" respondió ella.

— lo vez mi bebé esta perfectamente— aseguró mauro.

— ingenuo— le dijo su hermana— yo tengo más tiempo en esto y créeme cuando te digo que no tienes idea de en que te estas metiendo—

— debes estar bromeando— se burlo su hermano— no te parece que estas siendo una hipócrita hermana— la miró con odio y todas las personas que estaban en el lugar fueron colapsando una tras otra— !mi destinó era ser como tú! Tienes idea de cómo fue mi vida cuando desapareciste— grito golpeando sus manos contra la mesa.

Sin ninguna duda tanto Maia como Emma sabia que Mauro había sido cruelmente engañado todos los cazadores nacían con una afinidad hacia el submundo más una alteración en su aura fácil de identificar para otros cazadores así es como los reclutadores los identificaban, Mauro no poseía nada de eso Maia se había encargado de verificarlo mucho antes de irse.

—  crecí bajo la frase "tu no serás igual a tu padre o tu hermana"— continuo el—mamá se volvió paranoica y controló cada aspecto de mi vida ¿tienes idea de como es crecer llevando la culpa y el peso de otros?—

— por supuesto que si fue una parte de mi vida por diecisiete años— confeso tranquila— pero yo no asesine a nadie ni culpe a nadie más— aseguró y ya harta de la platica los traslado a todos al segundo plano.

— que es esto— se pregunto el confundido.

— un lugar donde no hay terrenales a los que dañar — aclaro la castaña.

— pero nosotras si podemos dañarlos— dijo Emma formando dagas con su energía.

— eres capas de hacerme daño— preguntó a su hermana quien ya desde hace rato no lo veía  de manera fría la mirada de la castaña había cambiado a una que reflejaba un sentimiento que ella misma creía olvidado, lastima.

— lo dije antes, mi concepto de familia está distorsionado, Emma— dijo y la nombrada lanzó las primeras dagas pero estas no dieron en el objetivo—

— Sahara— dijo la morena a la recién llegada y esta respondió sonriendo antes de desaparecer— no está vez— soltó Emma desapareciendo del submundo llevando consigo a Maia.

— no puede ser— dijo Sáhara al ver que las cazadoras le habían seguido el rastro hasta el plano feérico.

— esta vez no hay donde esconderse, Emir ya me dijo como ocultabas tu presencia — dijo la rastreadora con diversión.

— ya veremos— respondió la hibrida desapareciendo de nuevo saltando a otro plano sin ningún éxito.

— sabes el punto es matarlo nosotras no tú, el limbo suele corromper las almas terrenales— se burlo la castaña detrás de ellos sin obtener más respuesta que otra desaparición sin éxito de su presa.

Tercer plano tercer intento en vano está  vez el terrenal recibió una daga de energía que sólo afectaba al ente pero a Mauro igual le dolía obligando a Sáhara a cambiar de plano una vez más esta vez yendo más a bajo.

— suficiente de juegos— escucharon y otra daga de energía atravesó el corazón de Mauro acabando con el ente mientras el se retorcía de dolor.

— Mí amor— dijo el a Sáhara quien lo veía con una expresión sombría.

— lo siento mi amor, ya cumpliste con tu propósito— le susurro desapareciendo y dejándolo a merced de las cazadoras.

— hay que sacarlo de aquí— dijo la castaña cabizbaja luego de tomarlo en brazos para luego aparecer en el mundo terrenal.

Los tres aparecieron en la misma ciudad en la misma calle en un lugar oscuro y alejado del puesto de comida sólo que el era el único visible al ojo humano.

— ¡Maia!— grito una vez volvió en sí— ¡Maia!—

— estará borracho— dijo una mujer a su grupo de amigos al ver el caminar erróneo de Mauro y su ropa desalineada.

— drogas, seguro— comentó un chico en otra mesa.

— ¡Maia!— grito con fuerza mientras tambaleaba por todo el lugar—se que puedes oírme, no me voy a detener hasta que recupere lo que es mío eso te lo aseguro—

Mientras la cazadora y su amiga permanecían en el mismo lugar donde Mauro había aparecido observando los últimos momentos de este desviando la mirada justo cuando el auto pasó por el lugar. El accidente causo un alboroto Maia oía a las personas gritar y moverse en dirección al cadáver de su hermano pero ella no se animó a subir la cabeza.

— ya llego— la alertó su amiga y entonces ella elevó su vista solo para verla.

La deidad llamada muerte tiene entidades a su cargo denominadas parcas, las parcas toman una apariencia distinta según el destino que te toca al morir y como lo supuso Maia desde un principio el infierno terminó siendo su mejor destino.

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— resolvieron mi caso— preguntó la mujer fallecida a la castaña pero esta paso de largo ignorando a la mujer— que le pasa— le pregunta a Emma.

— es mejor que no la molestes, pronto vendrá alguien por ti— informa la morena.

— no quiero dejarlo así — confiesa ella— que seguirá ahora—

— eso dependerá de tu juicio y no te preocupes se puede volver a este plano aun estando muerto— aclaro Emma— solo reza por que sea privilegio y no castigo—

Por otro lado Maia se acerca al hombre de cabello largo que está en la cocina ella sabía que las cosas habían cambiado para el drásticamente de un momento a otro.

Cuando la parca se llevó a Mauro para su juicio las cazadoras recibieron el informe de Emir que tenían malas noticias.

— creí haber asegurado la puerta— le dice el hombre de cabello largo.

— tengo mis métodos— le responde la castaña posicionándose a su la do y ambos mantienen un breve silencio.

— tu madre será enterrada mañana temprano— le dice el aún sin creer las palabras que salieron de su boca.

"Fue cuando todas esas personas colapsaron" recordó ella cuando el ente tuvo un crecimiento de poder.

— y el bebé— pregunta ella aunque no era exactamente lo que quería saber.

— esta dormido con mamá— le responde con cansancio— su madre está inconsciente en el hospital los doctores aún no saben el por que— comenta el— y para colmo tu hermano no aparece tengo un mal presentimiento—

— promete que pase lo que pase serás fuerte—  fueron las únicas palabras que Maia encontró pero no sabía si se lo decía a él o eran para ella misma, y luego de minutos de silencio Emma y ella regresaron a casa.

— no vas a entrar— le pregunta su amiga preocupada.

—no. Necesito estar sola un rato— le dice para alejarse de la gran reja y ver como Emma entra y desaparece de su vista.

Entonces ella comienza a caminar acercándose al pequeño terreno a su izquierda el cual al pisar dentro de el se expande, un puente sobre un canal de agua cubierto por musgo es lo primero en recibirla y ella sin perderse en los detalles va directo a su objetivo, el Regente de ese lugar.

— dos ocasiones en menos de un mes acaso tu protector ya perdió su encanto— le preguntó el hombre de apariencia joven.

— quiero saber algo— fue directa.

— adelante después de todo te lo debo— respondió gentil.

— como elimino a alguien que esta bajo el voto de protección—