Éter: Cazadores De Lo Oculto

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¿Satisfacción?
Maia.

Dos semanas, dos putas semanas estancados en este pueblo.

Justo ahora estoy en la mansión del viejo, camino a su habitación por el momento darle de mi sangre a servido para mantenerlo con vida pero no es lo suficiente para que recupere su poder, después de que Tania y yo acabamos con el Ente todas las entidades que no pertenecían al pueblo se fueron y los nativos bajaron su actividad, estoy frustrada usar la técnica de espejo quizás fue un poco exagerado.

— Cuando aprenderás a tocar la puerta mocosa— me dice el viejo Regente aun postrado en cama.

—  se hacerlo, pero aquí no es necesario—digo mientras avanzo hasta su cama— como te sientes hoy— pregunto haciendo lo mismo que las veces anteriores, tomo la copa, la lleno con mi sangre y se la entrego.

— Igual que la semana anterior— responde con voz rasposa — que tal tú, no pareces estar de buen humor tiene algo que ver con tus amigos fuera de mi territorio —toce.

— Entonces Nathaniel llamó a Oliver— aseguré esta es la terceras vez que vengo a este lugar las primeras dos veces vine con Oliver siguiéndome “contra mi voluntad claro esta” y ahora que el trabajo se lo impedía envió a su gemelo pero el abuelo le negó la entrada.


— Ya veo el chico cazador de la otra vez teme que no regreses con vida— bromea mie tras bebe de la copa.

“ como si eso fuera posible”

— Solo es un idiota que cree poder controlar a todos— digo molesta pues su presencia solo me causa un sentimiento, ira.

— Maia— llamó mi atención de regreso a el— en todo este plano solo hay tres seres que conocen mi pasado dos de ellas están aquí— dice refiriéndose a Rosa y a mi—y no tengo buena relación con el tercero— me recuerda el.


— Tu crees que el seria capas de hacer algo así, sabiendo las consecuencias— lo dudo, el otro Regente esta loco pero no creo que tanto.

— El bien y el mal para nosotros es distinto lo sabes bien— me recuerda— las repercusiones son solo parte del precio—


“ Maia” la voz de Emma suena en mi cabeza por el enlace mental “chica entiendo que no quieras tratar con Oliver pero bloquear a Nathaniel eso es cruel” me reprende y yo giro los ojos “ que quieres Emma” pregunto directa “tienes que volver paso algo y tienes que verla por ti misma” dice sonando algo impaciente. “Estaré allá pronto” respondo cerrando el enlace.

— Me tengo que ir— le digo al abuelo mientras camino a la puerta.

— Lo se, Maia— me detengo antes de salir— no te excedas— me advierte.


— Trataré—

🌗🌗🌗

Emma esta con Emir entrenando al mocoso en la iglesia para que su uso descontrolado de la energía no nos delate, cuando notamos la merma de actividad de la entidades Oliver ordenó mantenernos omniscientes.

Los cazadores tenemos la ventaja de ocultar nuestra presencia de cualquier presa a voluntad de hay nuestro nombre  y el nombre de esta técnica es; omnisciencia. Pero existen excepciones en las que el control de esa técnica se va al carajo un ejemplo claro es cuando eres un novato o la técnica espejo.

— Emma— la llamo mientras me acerco por el pasillo que atraviesa el jardín de la iglesia— que era tan importante que… ¡puta madre! ¡Estas muerta!— grite sorprendida y la mujer que estaba al lado de Emma comenzó a llorar, no lo voy a negar me sentí bien al ver esas lágrimas caer. Después de todo la mujer frente a mi era una Víbora.

— Están llevando su cadáver al cementerio justo ahora— me dice cruzada de brazos, con que por eso se oía apura esta mujer la tenia irritada.


— Bueno querida mal por ti— digo con falso pesar— pero las almas pertenecen a otro departamento no podemos hacer nada por ti perra llorona— al decir eso último mis labios se curvan hacia arriba.

— De echo— Emma me interrumpe— un emisario estuvo aquí hace poco quieren que nos encarguemos de su caso antes de que ella transicione—


— Dime que estas jugando— le digo haciendo una mueca y ella niega con la cabeza— pero por que yo—

— Supuse que te entretendrá un rato—


— A caso mi muerte es un juego para ustedes— nos dice histérica la Víbora— pase las peores horas de mi vida— narra entre lágrimas—perdí a mi familia, nadie puede verme u oírme ni siquiera mi esposo—

— Mi tío se niega a hablar contigo— la miro con burla— eso si que es nuevo, puedes que tengas razón amiga— le hablo a Emma— puede ser entretenido—


— Para ti todo es un juego— grita molesta con sus manos echas puños encarándome— yo nunca te agrade, por años fuiste un estorbo para la vida de “mi” esposo— dice y una de sus manos acaba tomando el cuello de mi camisa lo que termina sorprendiéndola, gran error— ¡me duele!— gritó quitando su mano ahora llevándose ambas a la cabeza se parándose de mi acabando en el suelo en ese momento me detuve.

— Dejemos claro algo, me vuelves a tocar y tu siguiente muerte será lenta y tortuosa— digo acercándome a ella y bajando para estar a su nivel— sabes lo que le pasa a un alma que es destruida— ella niega atemorizada lo que amplia mi sonrisa— extinción, no hay planos superiores ni inferiores tu existencia llega a su fin— acaricio su espantado rostro— ya no hay leyes que me impidan lastimarte así que mantente lejos de mi— advierto y me separo de ella.


— Es hora de irnos— oigo que le dice Emma a la víbora y luego siento su presencia detrás de mi.

🌗🌗🌗

Y nuevamente estoy frete a un lugar al que nunca pensé en volver, la casa de mi tío.

— Donde fue— pregunta Emma.

— En la sala— dice y nosotras damos un paso a la puerta— ¡alto! Aquí aun hay gente que se supone que van a decir que dos enviadas del vaticano van a supervisar mis rezos— dijo, haciendo que Emma y yo nos viéramos cómplices antes de atravesar la puerta cual fantasma.


— Que es eso de los rezos— pregunta Emma.

— Aquí se acostumbra rezar a los muertos por unos días después de su entierro— le respondo.


— Que se supone que fue eso— dijo la víbora sorprendida— ¡ustedes están muertas!—

“Ya quisieras.”

— No en realidad pero para simplificar básicamente los vivos no pueden vernos— explica mi amiga.

— El lugar esta impregnado de energía oscura— digo recorriendo el lugar— recuerdas como moriste—


— Me arreglaba para salir, alguien toco la puerta y salí a recibirlo— izo una pausa parece que tiene espacios en blanco— no recuerdo quien era solo que lo deje entrar hablamos un rato y luego de eso no recuerdo nada más cuando desperté me vi a mi misma en el suelo y estaba ese hombre el que me llevó a la iglesia—

— El emisario, ellos son los encargados de darnos los casos — dice Emma terminando de recorrer el lugar— la persona que dejaste entrar tenia una entidad adherida un Ente— explica— aún es joven pero parece que ya entendió como ganar poder—


— Y de la forma más estúpida al parecer, matar a un terrenal activa mu rápido las alertas del submundo ¡oh! Chocolate— digo al sentir ese magnífico aroma y me dirijo inmediatamente a la cocina.

— Todo es tan confuso— dice la víbora— estoy aquí pero ellas no pueden verme u oírme— dice y llora de nuevo sacando un suspiro de cansancio por parte de Emma.


— Por esto no me gusta lidiar con almas. Maia— me llama y yo regreso de la cocina con un vaso de chocolate caliente— el rastro de energía oscura desaparece en la salida el ente se esconde en el terrenal— informa ella.

— Dices que la persona que dejaste entrar era conocida— preguntó y ella asiente— por lo menos eso reduce la búsqueda, Emma— mi amiga recolecta la energía oscura condensándola en su mano solidificándola creando una obsidiana.


— Que coño— suelta sorprendida la víbora— que se supone que son ustedes—

— Las encargadas de salvaje el culo— respondo— mientras Emma caminamos a la salida— si el ente sale de su escondite la piedra nos llevará directo a el—


— O si nos acercamos al terrenal en el que se esconde esta brillara— termina Emma.