Nunca pude olvidarte. - Remus Lupin.

22.

Capítulo 22.

Narra Maia:

Bolso listo, llaves listas, regalos listos, pañuelos, pastillas, varita... Creo que tengo todo. Ahora a revisar que todos estén preparados.

En una hora tenemos que estar en el salón para la boda de Martina y Sirius. Llegamos de las vacaciones ayer a la noche y ya hoy temprano salí a ayudar a mi amiga en todos los detalles de su día. La emoción que carga me llena de calidez, porque se lo merece. Se merecen ser felices ambos.

Y yo... Yo estoy en un sueño hecho realidad con Remus, nos pasamos nuestra semana solos en la cama, solo salimos a comer en el restaurante del hotel y desayunar, nada más.

Ya cuando se sumaron los chicos, que nos fuimos a un hotel familiar, salimos a hacer excursiones y conocer París.

Y ahora volvimos a casa, como la familia que somos.

Ayudo a mi hija a prenderse el vestido y termino de realizarle el peinado que me pidió. Está preciosa y muy grande, no sé en que momento crecieron tanto. Ya en dos meses cumplen 12 años... Que emoción.

Remus está ayudando a Liam con el traje.

¡Cierto! Tengo que llevar protectores, me tiene que venir en estos días, prefiero ser precavida a que me ocurran accidentes.

- ¿Ma, cuándo volvés al hospital? - pregunta Sof.

- El lunes mi amor, pero quizás empiece a trabajar menos horas, quiero poder disfrutarlos a ustedes.

- Esperemos que no tengas tantos pacientes así volvés temprano esta semana y podemos hacer noches de películas. - dice sonriendo.

- Ojalá princesa, es lo que más deseo. - sonrío. - Igual pasarán mucho tiempo con su papá estos meses de vacaciones.

Sus ojos se iluminan con la mención de Remus. - Si ma, aprovecharemos el tiempo. Los abuelos quieren llevarnos a pasear también.

- Si, Hope y Lian son los mejores. - los papás de Remus siempre estuvieron allí para nosotros, son un ejemplo de padres.

- Se acerca la luna llena mamá. - me recuerda Sofi.

- Si mi amor, lo pasaremos con él de manera animaga. - le recuerdo yo.

- ¿Él quiere?

- A decir verdad, tiene miedo de lastimarlos, pero estará James también que se transforma en un ciervo. Seremos varios. - río.

- Que divertido ma. - ríe también.

- Amor, ¿Ya están listas mis mujeres hermosas? - pregunta mi esposo entrando en la habitación.

- Si amor, ya estamos.

- Vamos, así ayudamos al tío Sirius. - dice Liam.

- Hijo estás precioso. - digo acariciando su rostro.

- Ya sé que soy hermoso mamá. - dice encogiéndose de hombros.

- Te juntas mucho con Sirius me parece. - dije enarcando una ceja.

- Tu mamá tiene razón en eso campeón. - dice mi esposo dándome la razón.

Mis hijos se ríen y nos disponemos a ir a la ceremonia.

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Decir que todo salió hermoso en la boda sería quedarse corto, Sirius ve a Martina como si fuera lo único que existe en el mundo y ella lo ve como su sueño hecho realidad.

- Amor, ¿No tomarás alcohol? - pregunta Remus.

- No mi vida, me sentí medio mal cuando comí. - dije tocando mi vientre.

Sus ojos brillaron con emoción. - ¿No estarás embarazada verdad?

- No lo sé amor, no creo que tan rápido lo consigamos. - Reí. - Quizás haya que seguir intentando.

- No me quejo del proceso. - rió.

- Te amo mi amor. - dije mirándolo, no podía creer que finalmente, después de tanto tiempo, estamos juntos.

- Te amo tanto Maia, eres mi sueño. - dijo acariciando mi rostro. - me besó dulcemente, como él sabe hacerlo.

- Dejen de besarse de esa manera al frente de todos. - James interrumpió nuestro momento y nosotros reímos mirándolo.

- Amigo, déjanos besarnos en paz. - dijo Remus suspirando.

- No. - James rió de la cara que le hizo mi esposo.

- Amor, deja de molestarlos. - dijo Lilly.

- ¿Cómo va ese embarazo? - le pregunté.

- Muy bien. - dijo tocando su vientre, James también lo acarició con una sonrisa esperanzada. - Creemos que es varón. Estoy comiendo mucho con este bebé.

- Estás hermosa como siempre. - dije.

- Gracias Mai. - dice sonriendo.

- Siempre se lo digo y no me hace caso. - dice James.

- Es que tú siempre me dirás que estoy hermosa amor. - dice riendo.

- Son tan tiernos. - dije.

- Ustedes no se quedan atrás en eso. - dijo Lilly sonriendo.

- La amo y voy a demostrarle en todos lados cuánto la quiero. - dice Remus besando mi mejilla.

- Te amo amor. - dije mirándolo.

- ¿Para cuándo mi ahijado? - dijo James subiendo y bajando las cejas.

- ¡James! - ríe Lilly.

- Estamos trabajando en ello. - dice Remus.

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- Que cansancio que tengo. - dije frustrada, recién comenzaba el día y ya estoy con sueño. Ya había pasado un día de la boda de nuestros amigos.

- Amor, ¿Por qué no te acuestas? - me dice mi esposo.

- Si mamá, podemos hacer noches de pelis en su dormitorio si quieren, así puedes acostarte ahora. - dijo Liam acariciando mi mejilla.

- Gracias mis amores. - les dije.