Avant-propos

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Octubre 15, 2022

Lee JiHoon

— ¡Nada! ¡Absolutamente nada! ¡Un carajo!

Descargaba su cólera de forma violenta, llevaba más de tres meses sin poder hacer algo. Se está volviendo loco. Joshua espera pacientemente a que su amigo terminara de desahogarse destrozando su estudio, recostado en el marco de la puerta. En los 13 años de amistad con el rubio nunca había visto tal desespero.

— ¡No puedo dibujar nada, maldito bloqueo de mierda! — Tomó los lápices de colores y los estrelló contra el piso barroco, estos siendo regados por doquier

— Jihoon, cálmate. Te arrepentirás de haber roto todo esto — Atrapó al más bajo en un abrazo de oso y este acostumbrado a que su mejor amigo le abrace se deja aún zapateando llenando de pintura al contrario

— No puedo pintar, shua. No puedo hacer nada, ni siquiera un monito de palito — Tomó su platinado cabello y jaloneó levemente, entrando en pánico — tengo una exhibición dentro de 2 meses y no tengo piezas nuevas.

Lee JiHoon, un artista semi-reconocido. A sus 24 años de edad era aclamado por su retratos y paisajes que imitan a la vida misma, que dejó eufóricos a los miembros de la sociedad del arte con su última pintura, "El proximo Van Gogh" ahora está atravesando uno de sus peores bloqueos artísticos.

No pueden culparle, esto es algo que todo artista detesta, es algo que viene tan de repente como se va. Es frustrante hasta el punto de querer abandonar el dibujo.

Además con tantas entrevistas, tantas sesiones de fotos, los medios son un castigo. Necesita aire, un descanso.

París, Francia

Su madre. Su amada madre siempre decía "Si algún día sientes angustia, tengo un trozo de cielo allá en París" Se refería a una casa, algo vieja pero muy linda, jihoon solo ha ido pocas veces pero después de que su madre falleciera, después de pelear por quién se quedaba con las escrituras, por fin regresaría ahí. No estaría solo, Hong también podría alegrar el ambiente.

Vió como el más alto servía café en dos tazas hechas por el mismo, ofreciéndole una de estas. El humeante café y la sonrisa de su amigo le animaron a lo siguiente

— Vamos a Francia.

— ¿Eh?

Su amigo dejó su taza a un lado para mirarle serio a los ojos. JiHoon esbozó una sonrisa, siempre quiso dibujar algo de aquel lugar, quizás conectar con su querida madre le brinde alguna ayuda

— Mi madre siempre me llevaba a su, digamos casa de verano, cuando sentía que el mundo estaba en su contra. Quizás ella me ayude con este bloqueo, sé que si.

Joshua sabía de que hablaba, al atravesar la etapa mas dura de sus vidas juntos podía deducir que su amigo quería un descanso. La señora Lee siempre fué buena con él, la consideraba una segunda madre.

Francia no está tan mal ¿o si? Seguro la vida le tendrá algo preparado a su amigo, o para él.

— Sé que algún rincón, en cualquier esquina, hay algo esperando por tu llegada.

— ¿y eso a qué viene? —  Una risa salió de los labios del más bajo.

Observaron el desastre a su alrededor, lienzos rotos, pintura derramada. De verdad, ahora se arrepentía de esto.

Francia le hará olvidar todo.

y pronto, o eso espera, volvería a dibujar.

💫

Gracias por leer

Muse [soonhoon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora