Capitulo 3

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El cielo se ha tornado de un negro con óleos azules y estrellas destellantes, la luna inquebrantable elevada sobre el cielo emana su luz sobre las montañas nevadas del Imperio dragón, cayendo sobre el imponente castillo que está sereno y silencios...

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El cielo se ha tornado de un negro con óleos azules y estrellas destellantes, la luna inquebrantable elevada sobre el cielo emana su luz sobre las montañas nevadas del Imperio dragón, cayendo sobre el imponente castillo que está sereno y silencioso por la noche, deja entrar sus rayos de luna por la enorme ventana de la habitación de un Dragoniano rubio y temperamental, se encuentra descansando en su enorme cama con sábanas blancas y mantas rojas, y algunas telas carmesí que caen elegantemente a modo de Dosel de cama, los techos altos y blancos están adornados con pinturas dragonianas y acabados de oro, los muebles son lujosos y las paredes parecen destellar entre acabados con rubíes y piedras preciosas, la perfecta combinación para la habitación de un emperador y un dragón, que se caracterizan por coleccionar piedras preciosas, el gran ventanal de la habitación da hacia las bastas montañas y deja ver una porción del extenso Imperio, que ha prosperado con dignidad gracias a los reyes Bakugou, y a su príncipe considerado un héroe del Imperio por sus numerosas victorias contra las criaturas demoníacas que asechan el continente.

El rubio da vueltas en la cama mientras duerme. Tiene ese sueño de nuevo, sabe perfectamente que se trata de un recuerdo, y hace años que no soñaba con eso.

En el sueño(recuerdo) el es un pequeño Dragón de aproximadamente 10 años, cuando los dragones son niños no pueden controlar sus transformaciones, y está era una de esas ocasiones, el pequeño Dragón rojo se encontraba herido, debido a su rareza en aquel entonces sus escamas y maná eran y son muy codiciados, sobre todo por los humanos que poseen muy poco maná en comparación de las demás criaturas, y al ser tan solo una cría de dragón incapaz de volver a su forma humana, se volvió rápidamente un blanco fácil para los caballeros que lo hirieron de gravedad pues no solo buscaban proteger al reino si no también hacerse de sus escamas y rarezas, afortunadamente logró escapar hasta un río cercano pero estaba muy herido como para continuar, se acostó a la orilla de aquel río mientras trataba de regular su respiración cerrando los ojos recordando lo que pasó ,odiaba a los humanos por ser tan estúpidos y codiciosos , solo estaba de visita con sus padres en el reino de Kenedith por asuntos diplomáticos, él y algunos de los niños nobles que se encontraban en el palacio por las mismas razones salieron a jugar al bosque que estaba conectado a los jardines del palacio cuando su transformación ocurrió de repente y no pudo controlarlo, entonces el príncipe de ese reino, Peter Kenedith comenzó a gritar a los guardias.

-¡U-Un Dragón! ¡Rápido! ¡Guardias! ¡Atrapenlo! ¡Antes de que nos mate a todos!- decía mientras gritaba alarmado y apuntaba hacia el dragón rojo.

Los reyes de Kenedith estaban consientes de que Bakugou y sus padres pertenecían a la tribu dragón, que en esos años aún no era un Imperio, pero el caprichoso e idiota hijo de los Kenedith no era consciente de eso, y solo pensaba que los dragones eran bestias desalmadas que mataban humanos. Sí en la actualidad algunas personas aún no saben de la existencia del Imperio dragón, en ese entonces lo sabían aún menos, así que era de esperarse que los guardias solo pensaran en proteger a su príncipe y persiguieran al "peligroso" dragón.

Tiempo y Destino. [Katsuki Bakugou AU Medieval X Male Reader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora