25. Tu otra vez...

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Antonella POV.

Son las 7am, hoy el día empieza temprano.
Paul fue a entrenar, mientras yo me quede cuidando a Mili.
Cuando Paul regresó, ahora a él le toca cuidar a la bebé, porque ahora me toca a mí ir a "entrenar"

Tengo dos semanas post-parto, entonces no puedo hacer gran cosa... algunos hipopresibos, para que la distasis, por el embarazo, se empiece a cerrar y algúnos estiramientos.
Pero que valla hacen la diferencia. Me despierta ese poquito ejercicio.

Volví al depa, para una Milenka ya cambiada y lista para el día (dormir, cagar, llorar y comer). Paul me ayudó a hacer el desayuno.

Huevos con verduras. Mi cosa menos favorita, pero bueno. C'est la vie.

Mi mamá tenía razón. Poco a poco todo se acomoda... y te dejas de sentir como una mierda.

Todo va muy bien. Paul trabajo un rato, yo me subí al simulador, después de demasiado tiempo, aprovechando que Mili está dormida.
Paul mandó a hacer un adaptador para que mi panza entrara, no estaba cómoda.
Ahora lo empiezo a estar... lo extrañe demasiado.

-Uhh! Mira esos tiempos?- Paul exclamó al ver que los tres sectores estaban morados.
-Wow! Rompiste récord mundial!- dijo cuando acabó la vuelta y apareció en la pantalla "mejor tiempo registrado en el mundo"

-Wow- exclamé en voz baja

-Estás que ardes mi amor- beso mis labios- este tiempo sin correr te sentó muy bien, eh

-Si - rei- lo que pasa cuando uno extraña cosas...

-Muy pronto volverás... estoy seguro

Paul fue interrumpido por el timbre de la casa. Que también despertó a Milenka

Corrí a su cuna, para calmarla. Quién será?

Escuché como la puerta se abrió y Paul hablar con alguien. Pero quien?

Nuestros papás y hermanos siempre avisan antes de venir...

Salí del cuento con Milenka en brazos, para encontrarme a... Léo, mi ex.

Fuck. Lo detesto. Se fue del país sin avisar, me rompió el corazón y luego jugó conmigo por meses. Hasta que me harté.

-Que haces aquí?- dije seria cuando llegue a la puerta

-Quería verte... hace tiempo no sé nada de ti - se acercó a mí para abrazarme, yo me hice a un lado

-lárgate. No quiero nada que ver contigo

-Antonella, porfavor, yo te amo- suplico

-Si me hubieras amado, no me habrías abandonado de la nada para luego solo jugar con mis sentimientos! - levanté la voz, no lo suficiente como para despertar a Mili- ya cambié de pagina, ya hasta tengo una hija y un increíble novio. Cosa que nunca fuiste.- dije antes de cerrarle la puerta en la cara.

-Antonella maldita sea! Abre la puerta!- Léo tocaba la puerta desesperado -Porfavor! Tenemos que hablar

Respire hondo para tranquilizarme y me concentré en Mili.

ES ELLA - Paul AronDonde viven las historias. Descúbrelo ahora