𝐌𝐞𝐥𝐚𝐧𝐢𝐚 y el Cáliz de Fuego

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 46

Una olvidada, antigua, oscura pero poderosa maldición impidió que se reuniera con sus seres queridos. Ha estado condenada durante siglos, hasta que el heredero del causante de su sufrimiento, al igual que su felicidad, sea destruido, solo porque no quiso hacer lo que le pidieron. El Señor de las Tinieblas se alzará de nuevo, pero no será el único, en cuanto él recobre sus fuerzas.... va....a... salir de su prisión que.... se puso a si mismo....

Las palabras de Trelawney comenzaron a sonar por la cabeza de Melania una y otra vez, el Señor Tenebroso habia vuelto y el alma condenada también regresara, todo este tiempo hablaba de Mysteria Addams. No lo podia creer, su ancestro estaba ahí frente a Voldemort. Si hubiese realmente pensado que era ella quien volvería creería que seria una mujer mayor pero parecía alguien de 15 o de 16 años.

Los demás la miraban sorprendidos, confundidos, y algunos con miedo por la forma en que salió del diario, a Mysteria.

Todos estaban en silencio, solo se escuchaba el viento y el ruido de los cuervos.

Mysteria levanta la mirada y mira la Marca Tenebrosa, mueve ligeramente los ojos como señal de enfado antes de volver a ver a Voldemort quien tenia lista la varita para usarla contra ella si era necesario.

Pero en vez de decirle algo ella se mueve y camina hacia Melania quien estaba adolorida en el suelo, se arrodilla ante ella y revisa la herida, frunce el seño y se arranca un pequeño trozo de su capa para vendarla y parar la sangre.

Melania no podia creer que su ancestro estaba ahí, frente a Voldemort, la bruja que había sido temida y que todos habían temido decir su nombre, la que provoco hace mil años terror en el mundo, la mujer que solo atacaba para proteger a la familia.

Harry la mira sorprendido e incrédulo, la reconocía, el año pasado vio una pintura de ella, no podia creer que estaba ahí junto a Melania.

-Listo- susurro Mysteria despues de vendar la herida-, lamento que hayas que tenido que pasar por esto- viéndola a los ojos-, pagara por lo que te hizo.

-No lo puedo creer- se escucho la voz de Voldemort. Mysteria rápidamente se levanta y voltea a verlo-, no puedo creer lo que ven mis ojos... Mysteria Addams- dijo viéndola fijamente. Los Mortífagos se miran entre ellos sorprendidos y asustados al oír eso-, eso es imposible, tu deberías estar muerta- dijo incrédulo.

-No tengo porque darte explicaciones, Tom- dijo sin inmutarse. Voldemort apretó los puños al escucharla llamarlo así-, si, se quien eres, puede que estuviese atrapada en ese diario durante casi mil años pero tenia un informante. Por cierto, me hablo que le pediste la corona de su madre.

Voldemort abrió los ojos al oír eso y le apunta con su varita.

-¡No se quien eres!, ¡Es obvio de que no eres Mysteria Addams a pesar del enorme parecido que tienen!, ¡El diario debe ser un traslador, con eso llegaste aqui!. Pero no importa, no importa, intentaste asustarme pero eso no funciona conmigo. ¡AVADA KEDAVRA!

Mysteria mueve su capa, usándolo como escudo, el maleficio la golpea pero desaparece sin causarle ningún daño, mucho menos quitarle la vida.

-¿Qué...? - susurro Voldemort incrédulo de que haya podido evitar el maleficio fácilmente con solo usar su capa.

El Ángel de la Muerte usa su oz y lo pone frente a los Mortífagos haciéndolos retroceder, todos sacan sus varitas pero estas salen volando de sus manos cayendo a unas cuantas lapidas tras de Melania y Mysteria

-Has cometido una estupidez en atacar a mi familia con mi diario cerca y tener a tus mortífagos aqui- dijo Mysteria, sacando su varita-. El hecho de que ellos te hayan mostrado lealtad y atacar a familias inocentes han condenado a los suyos.