𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 06

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-Melania, querida. Es hora de despertar- la voz de la señora Weasley se hizo presente en la habitación.

Melania, Merlina y Pubert, quien dormía sobre Melania, abren los ojos de golpe. La señora Weasley se sorprende lo rápido que fue despertarlos. Ya que con sus hijos tarda siglos en levantarlos.

-Buenos días niñas, buenos días bebé- dijo la señora Weasley, acariciándole la cabeza a Pubert-. Es hora de irse.

Ambas se sientan, y Pubert cae de sentón en medio de ambas, voltearon y vieron a Ginny y a Hermione en proceso de despertar.

-¿Tuviste pesadillas?- pregunto Merlina a su hermana.

-Si, ¿Despertaste triste?- pregunto Melania.

-Mas o menos, es un lugar nuevo y diferente- dijo viendo su alrededor-. Por poco olvido que no estamos en casa.

-Imagínate cuando estés en Nunca Mas- dijo, levantandose-. Iré yo primero, luego vendré por Pubert.

Merlina asiente mientras saca una cabeza decapitada, de quien sabe donde, Pubert lo toma comienza a jugar con el.

Melania entra al baño, se da una rápida ducha, se pone unos pantalones, camisa y botas negras. Mueve sus dedos para peinarse y sale del baño para encontrarse a Merlina, cargando a su hermano como pelota.

-Esta mojado- dijo Merlina, entregándoselo.

Melania lo toma y ambos entran al baño, le da un baño rápido y sale con el, envuelto en una toalla al cuarto de Ginny.

-¡Yo sigo!- dijo Ginny corriendo al baño

Merlina entra y cierra la puerta. Ginny suspiro y se recargo en la pared para esperar su turno.

Melania entro al cuarto y vio a Hermione, medio dormida, buscando sus cosas para después salir. En cuanto salió Melania cerro la puerta con llave, hizo movimientos con las manos y le pone talco y crema al cuerpecito de su hermano, luego el pañal para después vestirlo con una camisa gris y pantalón y zapatitos negros. Al terminar toma su mochila y bajan a la cocina.

Al terminar toma sus cosas y bajaron a la cocina.

La señora Weasley removía el contenido de una olla puesta sobre el fuego, y el señor Weasley, sentado a la mesa, comprobaba un manojo de grandes entradas de pergamino. 

-Buenos días- dijo Melania.

-Buenos días niños- dijo la señora Weasley con una sonrisa-, sienta a Pubert en la sillita de bebé. ¿Las chicas ya despertaron?

-Esperando que Merlina termine de alistarse- dijo Melania, sentando a su hermano.

La señora Weasley les sirvió gachas de avena en los cuenco, y rápidamente le pone un babero a Pubert para que no se ensucie.

Melania comenzó a comer, al mismo tiempo que le da de comer a Pubert.

Pocos después se escucharon pasos provenientes de las escaleras, Fred, George, Harry, Ron y Pericles entraron a la cocina. 

George le revolvió el cabello a Pubert haciéndolo reír, Ron casi se tropieza con la silla y Harry se sienta a lado de Melania. 

Merlina entra a la cocina y se sienta a lado de Pubert, él pequeño al verla le extiende su manita y ella solo lo mira y le extiende su meñique. Pubert la toma y sonríe.

-¿Dónde están Bill y Charlie y Pe... Pe... Percy? -preguntó George, sin lograr reprimir un descomunal bostezo.

-Bueno, van a aparecerse, ¿no? -dijo la señora Weasley, cargando con la olla hasta la mesa y comenzando a servir las gachas de avena a los chicos en los cuencos con un cazo-, así que pueden dormir un poco más.

𝐌𝐞𝐥𝐚𝐧𝐢𝐚 y el Cáliz de FuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora