𝐌𝐞𝐥𝐚𝐧𝐢𝐚 y el Cáliz de Fuego

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 21

Si el nombre de Melania hubiese sido anunciado a nadie le parecería raro, de hecho lo considerarían normal ya que todos vieron como ella lanzo su nombre al cáliz, pero que hayan nombrado a Harry era otra cosa

Harry, por el otro lado, permaneció sentado, consciente de que todos cuantos estaban en el Gran Comedor lo miraban. Se sentía aturdido, atontado. Debía estar soñando. O no habia oído bien.

Melania estaba confundida, no sabia que decir, pero sabia que Harry no pudo haber puesto su nombre ya que quería un año tranquilo.

-Yo no puse mi nombre- dijo Harry, totalmente confundido-. Ustedes lo saben.

Uno y otro le devolvieron la misma mirada de aturdimiento. En la mesa de los profesores, Dumbledore se irguió e hizo un gesto afirmativo a la profesora McGonagall.

-¡Harry Potter! -llamó-. ¡Harry! ¡Levántate y ven aquí, por favor!

-Vamos -le susurró Melania, dándole a Harry un leve empujón.

Harry se pisó el dobladillo de la túnica y se tambaleó un poco. Avanzó por el hueco que había entre las mesas de Gryffindor y Hufflepuff. 

-Bueno... cruza la puerta, Harry -dijo Dumbledore, sin sonreír.

Harry pasó por la mesa de profesores. y Melania lo perdió de vista.

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Melania se habia quedado esperándolo en el Gran Comedor, Dedos se habia querido quedar pero hizo que Fred se lo llevara. Estaba muy confundida, no entendía lo que estaba pasando.

El Gran Comedor se hallaba desierto. Las velas, casi consumidas ya, conferían a las dentadas sonrisas de las calabazas un aspecto misterioso y titilante.

Pero no podia hacerse preguntas cuyas respuestas no tiene, y al parecer nadie se las puede dar.

En eso recordó sus visiones, a veces con tocar algo puede ver algo del pasado o del futuro. Mira el cáliz, si lo toca y con suerte tiene visiones podría ver quien puso su nombre, podría funcionar.

Camina hacia el cáliz y lo mira fijamente, el juez quien elegiría a los participantes, tiene ganas de romperlo porque no la escogió, pero luego se vengara. Lo toca esa esa gran fuerza que la obliga a levantar bruscamente la mirada.

Un hombre pálido, ligeramente pecosa y cabello color paja y llevaba un gran saco se acerca al cáliz, mira su alrededor y pone un papel doblado. Al ver que las llamas del cáliz consumieron el papel el hombre saca algo de su abrigo y lo bebe antes de irse corriendo.

La fuerza se desvanece y se recarga bruscamente contra el el cáliz, respirando agitadamente.

Con eso confirma sus sospechas, Harry no habia sido quien puso su nombre en el cáliz, fue alguien que no tiene idea de quien es, no era un profesor, uno de los organizadores del torneo y mucho menos un estudiante. Pero ¿Por que hizo eso?

Escucho una puerta abrirse y se separa un poco del cáliz. Y vio a Cedric Diggory y a Harry salir mientras hablaban. Cedric fue el primero en verla y por la poca iluminación que habia en el Gran Comedor no podia distinguirla.

-¿Hola?- saludo un poco dudoso.

Melania no responde, en cambio saca su varita, susurra el hechizo y de a punta sale una pequeña luz que permiten que la vean bien.