Segunda vida [Padre no quiero casarme]

V

"...¡Su hermano mayor está aquí! ¡Haré algo! ¡Lo juro!..."

Fragmento de un recuerdo-.

"Arthur" aquella voz neutral lo llamo mientras ambos observan a Eleonor bailar al ritmo de la música con su padre "Desde que nació mi querida Eli tuve un deseo..."

"¿Un deseo, Marquesa?" su voz infantil la hace sonreír.

"Si, deseo que mi pequeña se case con un hombre que la respete"

"¿No con un hombre que la ame?" pregunta sorprendido.

"Amar no siempre significa que la respetará" observa el cielo nocturno "no se que nos deparará el futuro, así que Arthur...

...Protege a Eli"

Arthur cierra la puerta de la habitación de Eleonor con cuidado de no despertarla, alcanzo al Duque cuando esté se la llevaba, al parecer esté no se dio cuenta que la estaba cargando, se la entrego y se fue, sabe a donde irá. Baja hasta la cocina donde saca de su pequeño bolso hojas de té, un pequeño recuerdo llega a su mente, cuando se dejaba disfrazar por la pequeña Eleonor y tenían fiestas de té, la razón por la que aprendió a hacerlos, incluso infusiones.

—¡¿Quién anda...?! ¿Sir Arthur?—el cocinero siente su cuerpo temblar cuando la mirada amenazante del caballero se posa en el.

—Buenas noches—saluda con indiferencia hirviendo el agua.

—¿Sabe que hora es? No debería estar en la cocina.

—Que yo recuerde, si el Duque o la princesa quieren algo por la noche, usted no duda en usar la cocina—contesta el caballero sin mirarlo.

—Es muy diferente.

—¿Diferente?

—Si la Duquesa quiere algo, debería decírmelo a mi.

—Eso es curioso, ¿No fue usted... quien le puso vidrios a la comida de la Duquesa?

El cocinero se queda callado sorprendido, ¿Cómo es que el caballero lo sabe? Inculpo perfectamente a la sirvienta que envenenaba la comida de Eleonor, ni el Duque se dio cuenta.