Capitulo 24: Compromiso 2

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Narra Angelis

-Cambiando de tema. Tenemos una exclusiva-dijo la reportera de la televisión.

-En este momento vamos a pasar con nuestra compañera Gabriela la cual nos tiene una exclusiva-dijo la reportera.

-Así mismo como lo dijiste Diana. Tenemos una exclusiva. Estas imágenes que están viendo son nada más y nada menos que el hijo del magnate Roberts Parker comprometiendo a Danna Scott, la hija de la famosa empresaria Gia-dijo la reportera y vi a Ares. Rápidamente apague el televisor. Ya no podía ver más.

-Señorita Lee, abajo la espera su padre-dijo la sirvienta. Asentí, me levante bajé las escaleras. Allí estaba Paul.

¿Qué hacía él aquí?

-Hola-dijo Paul levantándose.

-Hola-respondí y levanté una ceja.

-¿Te acuerdas de mi?-preguntó el.

-Si, lo recuerdo-susurré y el sonríe.

-Soy Paul Williams-dijo el.

Él era con el hombre que iba a casarme.

-Oh-dije y mi padre me miró.

-Los dejaré solos para que se conozcan y hablen-dijo mi padre yéndose.

-Sigues igual de hermosa, desde la última vez que te vi. Te traje un regalo-dijo él y me entregó un ramo de rosas. Debo admitir que ese simple gesto me sacó una pequeña sonrisa.

-Están muy hermosas, gracias-dije y él me regaló una sonrisa.

-No sé si tu papá te explico todo-dijo él y solo asentí.

-Si-dije.

-¿Qué piensas?-preguntó él y yo lo miré.

Debo de alguna manera olvidar a Ares.

-Que si acepto, pero antes tienes que saber algo. Yo estoy embarazada, tengo un mes exactamente-susurré y él me miró.

-Yo te acepto a ti y a tu bebé-dijo el acercándose a mí con una sonrisa y dejó un beso sobre mi frente.

-Prometo hacerte la mujer más feliz del mundo, lo verás-dijo él y solo asentí. Mis padres salen de el despacho aplaudiendo con una sonrisa, y mi padre tenía una botella de champange.

-Esto se merece un brindis-dijo mi padre.

Narra Ares

-Viste esto Ares, a ver si ya se te quita la ilusión de una vez y por todas-dijo Danna lanzándome un periódico u observé la primera plana.

Angelis iba a casarse con un hombre que fácilmente podría ser su padre.

Mis ojos se llenaron de lágrimas y tiré el periódico a la basura. Danna se acercó a mí y me abrazó por detrás.

-Déjame quererte Ares, por favor-dijo Danna y observé nuestro reflejo a través del espejo. Danna se pone frente a mí y llevó mis manos a su vientre.

-Falta poco para conocer a nuestro bebé-dijo Danna y yo iba a sacar mis manos pero ella las sostuvo.

-¿Porque rechazas a nuestro bebé?-dijo Danna con sus ojos llenos de lágrimas.

-Esto es nuevo para mí Danna-dije y ella me miró.

-También para mí Ares, y estoy dando lo mejor de mí. ¿Porque tú solo no puedes hacer lo mismo?. Debes olvidarte de Angelis-dijo Danna y acaricié su mejilla.

-Vamos a empezar de cero, por favor. Prometo que vamos a ser felices los tres-dijo ella y me besó. El beso comenzó suave y luego comenzó a subir de tono. Hasta que ambos terminamos desnudos en la cama teniendo sexo.

*****

-Ares-escuché su voz y rápidamente me di la vuelta.

-Isabela-dije y ella se acercó a mí.

-¿Cómo estás? No te vez bien, te noto preocupado-dijo ella y la miré.

-Yo estoy pasando por una situación un poco complicada, pero yo no importo ahora-dije y ella me miró.

-Quiero que conozcas a alguien, por eso te cité aquí-dijo ella y asentí. Estábamos en un parque lleno de niños. Ella se levantó y hizo un sonido y rápidamente una niña viene hacia ella.

La niña viene hacia mí corriendo.

-Hola-dijo la niña que tenía como unos 3 años.

-Hola-dije y la niña se parecía mucho a mi. La niña se fue corriendo y Isabela me miró.

-Esa niña que vino a verte es tu hija Ares-dijo Isabela y sentí como si un barde de agua fría cayera sobre mi cuerpo.

-¿Qué?-susurré y ella me miró con sus ojos llenos de lágrimas.

-Si Ares, hace menos de un año me diagnosticaron una enfermedad terminal y... quería que conociera a nuestra hija y que ella conociera a su papá. Solo quiero que la cuides si algo me pasa, que la protejas-dijo ella con sus ojos llenos de lágrimas.

No puedo creerlo.

-¿Porque te fuiste y nunca me lo dijiste?-dije un poco molesto.

-Porque tus papás, ellos amenazaron con hacerle daño a mi familia. Dejarlos sin trabajos, y hacerles la vida imposible. La única condición que tuve fue irme lejos. Y nunca te busqué porque realmente creía que me odiabas-dijo Isabela y la miré.

Debo admitir que tenía mucho coraje.

-¿Cómo se llama la... mi hija?-pregunté y ella sonríe.

-Victoria, es una niña muy inteligente. Tiene tres años acabados de cumplir-dijo Isabela con una sonrisa.

Victoria

¿Esto era una señal?

*****

-Hola Ares-dijo mamá cuando entré pero cerró su boca cuando vio a Isabela junto a mí y a la niña.

-¿Qué hace ella aquí?-preguntó mamá.

-Vino para que conociera a mi hija-dije tomando entre mis brazos a Victoria. Mi madre miró fijamente a Isabela y luego me miró a mí junto a la niña.

-No puedo creer lo que ustedes hicieron, creí que ustedes eran personas honestas pero ya veo que esta maldita casa está llena de malditas mentiras. Cada vez te detesto más y deseo no haber sido tu hijo. Mira que ocultarme que yo tenía una hija, eso no se hace-dije con coraje.

-¿Hija?-dijo Danna apareciendo en la sala.

-Si, Ares y yo tuvimos una niña-dijo Isabela y Danna me miró.

-Por Dios, no puedo creerlo-dijo Danna.

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El Chico ParkerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora