–¿Lista? –pregunto Lauren mirando a la pequeña por el retrovisor.
Ambos ojos esmeraldas intercambiaron una mirada.
–¡Lista! –exclamo la castaña, y Lauren encendió el auto.
Se despidieron con la mano de Camila, quien seguía de pie afuera de la casa. Al parecer tenía pensado pasar el lunes en casa ya que por lo que le dijo a Lauren, no había trabajo en la oficina. Y en dado caso de que lo hubiera, sus compañeras se encargarían de llamarle.
El día anterior realmente había sido demasiado estresante para la joven madre, pues habían visitado a los padres de su esposa.
Durante toda la cena tuvo que aguantar los constantes reproches de la señora Jauregui.
"¿Por qué la dejan ver televisión hasta tarde? Y para colmo, series de terror. ¡Tiene 5 años!"
"Deberían dejar de consentirla tanto."
"¿Por qué esa falda está tan corta?"
"Camila, debes aprender a ser más responsable y ser más madura. ¡Ya tienes una hija, no puedes seguir comportándote como una adolescente! Ahora pon esa banana de vuelta en su lugar... y tú también Mily."
A la castaña no le gustaba ser grosera con la madre de su mujer, pero desde que Clara supo que Lauren salía con alguien, y ese alguien era nada más que Camila, no tuvo más remedio que aceptar a su hija. Pero eso no quería decir que el paquete incluía a su, en ese entonces, novia.
Lauren se había encargado de hablar con ella en diversas ocasiones, pero la mujer parecía no entender. Incluso llegaron a tener una fuerte pelea, que hizo que Lauren se distanciara de sus padres por semanas, hasta que la pequeña comenzaba a lloriquear por ver a sus abuelos.
Camila suspiro y se giró para entrar nuevamente a la casa, pero un auto se estaciono frente ella, y de él bajo la persona menos esperada.
–¿Qué haces tú aquí?
*
–Que no.
–Que si.
–Que no –volvió a contradecirla.
–Que si –la imito.
–Mami Camz me quiere más a mí –trato de parecer enojada, pero se notaba claramente como trataba de no reír.
–Disculpa que te lo diga querida –respondió Lauren en tono de burla–, pero yo llegue antes que tú.
–Si, pero ella me quiere más. Porque tú le pegas.
Lauren se tomó el tiempo de mirar de reojo a su hija mientras la señal cambiaba a verde, la pequeña con el peluche mirándola con un tierno puchero en sus labios.
–¿Pegarle? –pregunto confusa–. ¿De dónde sacas eso Em?
La castaña se abrazó más a su oso mientras miraba a su madre.
–Porque la otra noche la escuche gritar.
A Lauren se le subieron los colores al rostro, definitivamente aquel día Emily no estaba dormida.
La bocina de los autos detrás de ella la sacó de su vergonzoso momento con su hija y acelero tratando de pensar en una excusa.
–Yo no la golpeo, cariño –al fin dijo.
–¿Entonces? –pregunto aún más confundida.
–Pues... pues... ¡ya llegamos! –estaciono el coche frente al preescolar y miro a Emily–. Mami Camz pasara por ti, bebé.
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El Matrimonio Perfecto -Camren
Fanfiction"La cuestión es... que a veces las cosas parecen malas y no lo son. A veces hay otra explicación para lo que está pasando." "¿Y si esa explicación es incluso peor?" Esta novela es 100% mía, espero les guste