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Jaekyung miró a Dan con preocupación mientras este último se calmaba. Estaban estacionados en una calle bastante transitada pero adentro del auto no se escuchaba mucho del exterior, asi que no se escuchaba el bullicio de la ciudad. El problema de Dan era profundo, y Jaekyung, siendo un alfa naturalmente protector, sentía una necesidad gigante de consolar a su omega.

—Dan, mírame —dijo Jaekyung, con voz suave pero firme— Estoy aquí contigo. Todo va a estar bien — el alfa se fuerza a decir debido a que pensaba que no era muy bueno consolando, pero de verdad se estaba esforzando.

Dan levantó la mirada, sus ojos hinchados y rojos por el llanto. A pesar de su tristeza, asintió más calmado.

—No sé qué haría sin ti en estos momentos —susurró Dan, su voz era baja y suave y posó su vista hacia abajo.

Jaekyung sonrió, pasando su mano por el cabello de Dan, tratando de transmitir toda la calma y seguridad que podía. Sabía que las palabras a veces no eran suficientes, pero era lo único que podía utilizar en ese momento.

Pasaron unos minutos más en un silencio tranquilo observando el movimineto de la capital, Seúl, sin embargo, un vistazo al reloj del tablero le recordó al alfa que ya era muy tarde. La no he había caído y con eso una ligera brisa fresca sacudía los árboles.

—Ya es muy tarde...—dijo Jaekyung, con una ligera preocupación en su voz— lo siento por no llevarte a donde querías, ¿Aún necesitas ir?

—Tranquilo, iba a ir al hospital a ver a mi abuela, de todas formas no tengo ánimos ahora —respondió el omega sabiendo que su abuela se preocuparía si lo veía así.

—Mi penthouse queda cerca de aquí... quieres... ¿Quieres quedarte por esta noche conmigo? —miró al omega —Solo para que descanses, por supuesto —dijo rápido por si había sonado mal.

Dan asintió lentamente, sintiéndose demasiado agotado. La idea de estar en un lugar seguro, bajo el cuidado de Jaekyung, era reconfortante en ese momento.

Jaekyung encendió el auto y empezó a conducir hacia su hogar. El trayecto fue tranquilo, apenas interrumpido por el suave murmullo del motor. Cuando finalmente llegaron al penthouse de Jaekyung, el alfa ayudó a Dan a salir del auto, sosteniéndolo con firmeza pero con cuidado.

 Cuando finalmente llegaron al penthouse de Jaekyung, el alfa ayudó a Dan a salir del auto, sosteniéndolo con firmeza pero con cuidado

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Al entrar al edificio, Dan se sintió un poco abrumado. Las paredes estaban decoradas con obras de arte contemporáneo, y los suelos brillaban con un pulido mármol blanco. El conserje los saludó cortésmente, y Jaekyung respondió con un asentimiento rápido. Tomaron el ascensor hasta el último piso, y Dan se dio cuenta de que no tenía idea de lo lujoso que era el hogar de Jaekyung.

Cuando las puertas del ascensor se abrieron, Dan quedó boquiabierto. La entrada del penthouse era impresionante, con techos altos y un diseño minimalista pero exquisito. Grandes ventanales ofrecían una vista panorámica de la ciudad iluminada y del hermoso cielo nocturno.

Un Alfa Sentando Cabeza |Jinx| (En Pausa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora