Un Alfa Sentando Cabeza |Jinx| (En Pausa)

１５

Días después de que Dan y Jaekyung hablaron sobre ir al hospital para revisar el hombro del alfa, finalmente lo hicieron. Sin embargo, esas semanas antes de ir estuvieron marcadas por una tensión entre ambos, sobre todo por parte de Jaekyung, ya que odiaba todo lo relacionado con las visitas al hospital.

Las luces fluorescentes del hospital bañaban la sala de espera en un blanco frío. Jaekyung estaba sentado, con el ceño fruncido, mientras se ajustaba una bolsa de hielo improvisada sobre el hombro. Su mandíbula estaba tensada, en parte por el dolor, en parte por la frustración de estar ahí en lugar de entrenando para su próxima pelea.

Dan estaba sentado a su lado, echó un vistazo discreto hacia él. El silencio entre los dos era tenso, pero no incómodo, se había vuelto habitual después de tantas sesiones en las que Dan, como fisioterapeuta, había tenido que recordarle al alfa lo importante que era cuidar de su cuerpo y desde que le empezó a exigir dias de reposo absoluto. Pero esta vez, Jaekyung se había empujado demasiado lejos. Y Dan lo sabía.

-¿Te duele mucho? -preguntó finalmente, rompiendo el silencio. Su tono era calmado, casi profesional, pero con un matiz de preocupación que no podía esconder.

Jaekyung soltó un bufido, sus ojos fijos en la pared blanca frente a ellos.

-No es nada. Solo un tirón -respondió con desdén, pero Dan sabía que no era solo eso.

-Llevas diciéndome eso las últimas dos semanas. Y ahora estamos aquí. Así que, obviamente, es algo -dijo Dan, su voz firme, sin perder la paciencia.

El alfa lo miró de reojo, con un destello de irritación en sus ojos oscuros. Pero Dan no se amedrentaba. Había lidiado con tipos duros antes, y sabía que Jaekyung, por muy alfa que fuera, no estaba por encima de aceptar ayuda. Aunque siempre se resistiera al principio.

Antes de que Jaekyung pudiera responder, una enfermera apareció en la puerta de la sala de espera.

-Joo Jaekyung -llamó, mirando la tabla con su historial.

Jaekyung se levantó lentamente, su cuerpo musculoso moviéndose con cuidado, claramente sintiendo el dolor en su hombro. Dan lo siguió, manteniendo una distancia respetuosa pero lo suficientemente cerca como para asegurarse de que el luchador no hiciera ninguna estupidez, como intentar hacer las cosas por sí mismo.

Una vez dentro de la sala de examinación, el médico, un hombre alfa de mediana edad con gafas y una actitud eficiente, les dio la bienvenida.

-Bueno, Jaekyung, parece que tenemos un problema con ese hombro, ¿eh? -dijo el médico, ajustándose las gafas mientras revisaba el expediente.

Jaekyung asintió, su mirada fija en el médico, pero sin decir una palabra. Dan intervino, sabiendo que si no lo hacía, Jaekyung probablemente se minimizaría el problema.

-Ha estado entrenando sin parar para su próxima pelea, y lleva semanas quejándose del dolor en el hombro. Estoy bastante seguro de que es una inflamación o algo peor -explicó Dan, detallando lo que ya había observado durante las últimas semanas.

El médico asintió, acercándose a Jaekyung para examinar el hombro. Palpó con cuidado la zona, presionando ligeramente en algunos puntos clave mientras observaba las reacciones del alfa.

Jaekyung se mantuvo en silencio, aunque su mandíbula se apretó aún más en un esfuerzo por no mostrar dolor. Dan lo observaba, su mirada fija en el rostro de Jaekyung. Sabía que este momento era crítico. Si el diagnóstico no era bueno, podría significar semanas, quizás meses fuera del ring, y eso era algo que Jaekyung odiaría más que cualquier dolor físico.

-Parece una inflamación del manguito rotador -concluyó finalmente el médico, enderezándose y mirando a ambos hombres-. Es algo común en luchadores como tú, especialmente cuando exigen tanto de sus cuerpos sin darle tiempo suficiente para recuperarse.

Jaekyung se quedó en silencio, su mirada fija en el suelo mientras procesaba la información.

-¿Cuánto tiempo? -preguntó finalmente, sin levantar la vista.

El médico suspiró, anticipando la reacción del luchador.

-Depende de cómo reacciones al tratamiento, pero estaríamos hablando de al menos tres semanas de descanso y fisioterapia. Si no lo haces correctamente, podrías estar fuera del ring mucho más tiempo.

Dan sintió cómo la tensión en el aire se intensificaba. Tres semanas eran una eternidad para alguien como Jaekyung, especialmente con su reputación de no dejar nunca de entrenar. Podía ver el conflicto en los ojos del alfa: la necesidad de curarse frente al impulso incontrolable de volver a pelear lo antes posible.

-No puedo permitirme estar fuera tanto tiempo -respondió Jaekyung en voz baja, su tono cargado de frustración.

Dan dio un paso al frente, colocándose junto a Jaekyung.

-No puedes permitirte empeorar esto tampoco. Si sigues así, podrías estar fuera por muchos meses. Tienes que ser inteligente al respecto, Jaekyung.

El alfa lo miró con una mezcla de enojo y resignación, pero en el fondo sabía que Dan tenía razón. Siempre lo sabía. A pesar de que odiaba mostrarse vulnerable, especialmente frente a Dan, había una parte de él que confiaba en Dan más que en nadie. Y aunque nunca lo admitiría, necesitaba esa presencia calmada y racional que lo mantenía en equilibrio.

-Está bien -murmuró Jaekyung finalmente, mirando al médico- Haré lo que sea necesario.

Dan exhaló, aliviado. Sabía que esta sería solo era una de las batallas ganadas en una larga serie de discusiones sobre el descanso y la recuperación, pero al menos era un comienzo.

El médico les dio las instrucciones para las próximas semanas: descanso absoluto durante los primeros días, seguido de fisioterapia intensiva. Dan tomó nota mental de todo, sabiendo que él mismo se encargaría de la mayor parte de las sesiones de rehabilitación de Jaekyung.

Cuando salieron del consultorio, el silencio entre ellos era más ligero, menos tenso. Jaekyung seguía luchando contra la idea de no poder entrenar, pero había una sensación de alivio, quizás porque sabía que Dan estaría allí para asegurarse de que lo superara.

-Te recogeré mañana para la primera sesión -dijo Jaekyung, metiéndose las manos en los bolsillos mientras caminaban por el pasillo.

- Yo iré solo, no te conviene manejar con dolor

Jaekyung asintió, sin necesidad de decir más. Sabía que, aunque odiara el proceso, estar al lado de Dan lo haría un poco más llevadero, un poco bastante...

Regresé🎉🎉

Debo avisarles que las actualizaciones, como siempre, no tienen fecha y que no sé si serán frecuentes o no a lo largo de la semana. Pero tranqui que no me olvidé de Wattpad JAJA, para nada🤭👍

Y discúlpenme si hay faltas ortográficas o mala redacción💋