~Serendipia (Jimin Fanfic)~

Capítulo 11

La pelinegra recibió un mensaje de Jungkook diciendo que debía encontrarse con él en el parque porque era una emergencia. Asumió que era algo que le pasaba a él o a Jimin, así que a toda prisa fue allá.

Al llegar vio que todo estaba bien, incluso Jungkook se llegó a reír cuando vio la cara de pánico que tenía.

—¿Qué te pasa, por qué estás molesta?

—Me dijiste que viniera aquí porque era una emergencia.

—Y lo es. Se trata de Jimin.

—¿Qué le pasó? ¿Está bien? —preguntó preocupada.

—No, nada serio.

—¿Y por qué me dices que es una emergencia? —Casey le golpeó el brazo a Jungkook.

—¡Oye, eso duele! —el mayor hizo un puchero.

—Bueno, te lo mereces por mentirme.

—Si te dijera que quería hablar contigo, ibas a decir que no —se quejó Jungkook.

—¿Cuándo te he dicho que no, eh?

—Olvídalo, no te lo diré —Jungkook se cruzó de brazos.

—Si no lo haces, le diré a mamá que me pegaste —dijo Casey, sacando su lengua.

—Está bien, está bien, te lo diré —Jungkook hizo una pausa. Su rostro cambió de uno alegre a uno serio, y le sorprendió un poco. —Quiero decirte algo sobre Jimin, no es nada malo, pero quiero que lo sepas, ya que eres una buena amiga para él. Por favor no le digas sobre esto, puesto que es muy quisquilloso con este tema.

Casey asintió. Era todo oídos.

—Jimin tiene una condición neurológica que es común entre las personas. Él no es de mucha gente, pero desea hacer amigos, incluso si le es difícil. No le gusta el contacto físico, a menos que sea yo o tú. No le gustan las cosas fuera de lugar, ni los ruidos, ni las luces. Esto le provoca unas crisis que suele tener cuando escucha sonidos fuertes o cosas que no funcionan para él. Por eso tengo que ir a consolarlo, ya que tiene problemas para calmarse. Tampoco soporta la frustración. Le gusta tener todo perfecto y si ve algo fuera de lugar se enoja —Jungkook, suspiró.

Al escuchar a Jungkook, algunas cosas empezaban a tener sentido para Casey. Al conocerse en la escuela, no le gustaba que lo tocaran. Siempre quiso estar solo, a pesar de que ella era insistente. Incluso aquella vez cuando sonó la alarma de incendios que tuvo su primer episodio, porque no sabe cuántas ha tenido antes de conocerla. Y también cuando organiza las cosas según el color y el tamaño.

Sentía curiosidad, pero al mismo tiempo tenía mucho miedo.

—Me he dado cuenta. En la escuela lo hace mucho —dijo Casey.

—Lo que te voy a decir ahora no es para que sientas pena por él, sino para que lo entiendas mejor y lo ayudes —Jungkook respiro hondo y continuo hablando. —Jimin es autista, Casey. No es grave, pero... sí.

La pelinegra había escuchado sobre el autismo, pero nunca lo entendió del todo. Ahora muchas cosas le tenían sentido. Los ruidos, los toques, el contacto visual, el orden de las cosas, las crisis, todo.

—¿Tiene cura? —preguntó Casey, frunciendo el ceño.

—Desgraciadamente no. La condición es de por vida, y lo ha estado padeciendo desde los 4 años.

Casey se sentía mal consigo misma por no prestar más atención a Jimin. Pensaba que esa era su personalidad, aunque un poco extraña a decir verdad.

—¿Qué es básicamente el autismo?

—Pues el autismo, es un trastorno complejo del desarrollo neurológico que afecta la comunicación, interacción social y el comportamiento. Las personas con autismo pueden tener una amplia gama de síntomas y niveles de gravedad. Por lo menos la de Jimin es moderada y él es verbal, hay otros que no. Esto se suele diagnosticar en la primera infancia, aunque hay personas que no lo saben hasta después de la adultez. Otros tienen discapacidades intelectuales, otros no. Otros son verbales, otros no.

—Jimin obviamente es verbal, ¿no?

—Por supuesto. Y con esto que te digo no es para que pienses que él está loco o tiene una enfermedad, más bien es una diferencia en su cerebro.

—Eso explica por qué Jimin tartamudea cuando está nervioso, o juega con sus dedos. Otra cosa que también me impresiona es su amplio conocimiento en muchos temas que suelen ser aburridos para otros —dijo Casey.

—No te creas, él tiene dificultad para comprender ciertas cosas, como por ejemplo, la comunicación no verbal, entiéndase los gestos corporales, las expresiones faciales, el tono de voz, muchas cosas y... oye, ¿estás llorando Casey? —preguntó Jungkook.

—No, solo me están sudando los ojos —respondió Casey, su cabeza agachada.

—No te sientas mal Casey, esto no es culpa de nadie. Solo te lo digo para que intentes entender un poco más a Jimin.

—Haré eso, no te preocupes.

—Quiero agradecerte por ser amiga de Jimin. Eres su primera amiga, así que, por favor, no lo dejes a un lado, ¿de acuerdo?

La pelinegra asintió.

Ahora tenía más razones para quererlo.

•••

—Cariño, ¿qué pasa? ¿Por qué lloras? —la señora Smith se mostró preocupada al ver el estado de su hija.

No pudo contener sus ganas de llorar, estaba tan sorprendida por la noticia que no quería creer que fuera verdad. Empezó a sentir pena, algo que Jungkook le dijo que no hiciera.

¿Por qué él?

—Casey dime, ¿qué te pasa?

—Jungkook me dijo algo sobre Jimin.

—¿Qué te dijo?

—Que Jimin es autista —Casey dijo en voz quebrada.

Su madre se separó del abrazo y la miro con ternura, simpatizando con su hija.

—Lo siento mucho cariño, pero míralo del lado positivo. Es un chico carismático, supereducado y realmente me gusta. Lo que tienes que hacer es ayudarlo y ser su mejor amiga —la señora Smith tomo los cachetes de Casey y los acarició con amor.

—No me gusta que se burlen de él en la escuela, eso me duele.

—Lo sé, cariño, pero tú no tienes control sobre eso. En este mundo lleno de basura, la gente se comporta como quiere y no siente compasión por nadie. Pero también existe gente buena como tú, y ese tipo de gente es recompensada por serlo.

—Amo mucho a Jimin mamá —dijo Casey.

—Lo sé cariño, y si realmente lo quieres, no sentirás lástima por él, sino que lo ayudarás, ¿de acuerdo?

La pelinegra asintió. Ella solo esperaba poder ayudarlo.