My different Alpha // Bossnoeul

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El mejor regalo para iniciar su cortejo. Su alfa merece lo mejor, lo más hermoso que puedan ver sus ojos, aunque, será imposible, ya que Noeul es lo más hermoso que han visto sus ojos azules.

Sus ojos vagaban por el centro comercial buscando el regalo perfecto, no importando el precio. No encontraba nada que representará a su alfa.

— Ya dejemos de mirar aquí y mejor vamos a la tienda donde venden todo tipo para empezar un cortejo — Pavel se encontraba aburrido, llevaban caminando más de cinco horas y Boss no se decidía a comprar nada diciendo — No es lo que se merece Noeul, no me gusta, no tiene algo relacionado con mi alfa, Pavel no seas imbécil.

— Allá venden cosas comunes, yo no quiero cosas comunes Pavel, quiero algo especial. Quiero enamorarlo más.

Pavel resopla — Llevamos más de cinco horas pedazo de mierda, mis pies me duelen. Soy un alfa sensible Boss, necesito comida — Boss gira sus ojos — Porque acepté tu invitación.

— Te autoinvitaste Pavel — el alfa rubio se encoge de hombros — Oh, mira— Boss apunta a una floristería.

— ¿Le llevarás flores? Boss, Noeul trabaja en una floristería— Pavel mira a Boss con un gesto de enojo — No puedes darle más flores de las que tiene.

— No le daré flores — Boss resopla — Bueno, si son flores, pero... Es diferente, lo he estado pensando desde que Noeul se fue de mi departamento hace una semana.

— Vamos a ver si ahí encontramos lo que buscas — Boss asiente.

Los dos alfas mayores, con trajes elegantes, entran a la floristería. Era hermosa con arreglos por doquier y luces. Su lobo casi se muere de la felicidad al ver lo que estaba buscando.

Boss se separa del alfa rubio para acercarse al estante de arreglos de flores en un envase de cristal. Era hermoso. Sus manos toman uno de los envases amando el cómo las flores se veían recordando la vez que vio a Noeul.

Pavel llega a su lado — ¿Esto es lo que buscabas? — Boss asiente aun mirando los envases — Son hermosos, mira esta rosa roja — Pavel tenía un brillo en sus ojos. Los envases eran preciosos y la verdad si le recordaba a Noeul.

Era un regalo perfecto para iniciar su cortejo.

Una de las vendedoras de la floristería les atendió con amabilidad explicando cada tipo de flor que tenía allí y lo importante que eran. Boss se decidió por comprar una de esas, aunque faltaba algo más.

Los dos alfas salen de la floristería con sus compras. Boss llevaba su precioso envase de cristal. Pavel llevaba lo mismo, lo diferente es que eran copitos de nieve y no una flor.

Boss sentía en su pecho que algo faltaba, así que se dirigió a una joyería que se encontraba allí en el centro comercial.

Compro el mejor collar que vio, era precioso y perfecto. Pavel se sentía feliz ahora que estaban comiendo en uno de los locales.

— ¿Falta algo más? — Pavel mordía su hot dog con ansias mientras observaba a Boss mirar el collar.

— Quisiera algo que llevará su olor — Boss tenía el labio entre sus dientes mientras observaba el collar.

— Puedes impregnar el collar con el olor del alfa.

— ¿Cómo hago eso?

— En la tienda de cortejo venden ese tipo de cosas, podemos ir allí y pedirle a la vendedora que nos llene el collar del aroma que quieres.

Boss guarda el collar en la cajita mientras su lobo asentía ante lo dicho por Pavel.

— Me parece buena idea — se levanta — Vamos — empieza su andar dejando a Pavel con la mitad del hot dog en su boca.