TENTACION

66 7 8
                                    

Hoby consiguió meterse en el camisón de satén plateado , pero mareado como estaba por los efectos del alcohol, no acertaba a meter los botones en los ojales.

Frustrado, alzó la vista hacia el espejo, y la sorprendió el aire tan sexy y sofisticado que le otorgaba el camisón abierto, dejando parte de su pecho y trasero al descubierto.
Parecía mucho más maduro así.

Se rió ante su ridícula fascinación, y se dejó caer sobre la colcha rosa pálido de la cama con dosel, dejando una de sus piernas totalmente al descubierto hasta la altura de su trasero.

El joven cerró los ojos despreocupado.
¿Qué importaba?, se dijo dejándose arrastrar por el sueño, no iba a entrar nadie a verlo.

Nadie... excepto Taehyung, que abrió la puerta muy despacio y entró con sigilo para casi caerse de espaldas ante lo que vio.

Se quedó sin aliento.
Hoby respiraba tranquilo, se había quedado dormido, Taehyung suspiró aliviado.
Mejor así.
No habría sido capaz de decir nada coherente.

Nunca había pensado en Hoby como un adulto, pero, en ese momento, viéndolo allí, con ese camisón plateado y su delicioso trasero totalmente expuesto a la vista, lo excitó tremendamente y su entrepierna se lo hizo evidente.
Se había quedado paralizado junto a la puerta, asimilando por primera vez el hecho de que Hoby ya no era una chiquillo.

Lo que tenía frente a sí lo declaraba a gritos.

Y entonces comprendió cuál era el motivo por el cual se había sentido tan raro últimamente, por qué había estado sobre protegiéndolo, por qué andaba todo el díahaciéndolo enfurecer deliberadamente... Porque lo deseaba.

Cerró sin hacer ruido la puerta tras de sí, y se acercó a la cama.
¡Dios, era tan precioso,casi una visión ! Los músculos de su rostro se contrajeron.

Se daba asco a sí mismo por estar devorándolo con la mirada, pero no podía evitarlo,esas piernas bronceadas y bien definidas, su hermoso y redondo trasero era una invitación al pecado.
Se preguntó si habría permitido que alguno de los chicos con los que había salido lo tocara.

El solo pensamiento lo puso furioso y todo su cuerpo se tensó.
La idea de imaginar a otro hombre mirándolo, acariciándolo, abriendo la boca sobre aquellos suaves montículos y estimulando su parte más sensible para endurecerlo...
Sacudió la cabeza para apartar esos horribles pensamientos.

-Hoby -lo llamó con la voz ronca por la Exitacion.

El joven se revolvió en sueños, haciendo que la parte trasera del camisón se abriera por completo.
Taehyung se estremeció ante la increíble visión que se le ofrecía de su hermoso trasero perfecto, maravilloso y delicioso.

Masculló una palabrota entre dientes y se obligó a inclinarse sobre el para acomodar el camisón.
No podía creer lo nervioso que estaba.
¡Si hasta le temblaban las manos! Gracias a Dios que Hoby no estaba despierto para verlo tan vulnerable.

El joven gimió sensualmente cuando los duros nudillos de Taehyung rozaron su piel, y se arqueó hacia él aún dormido, como un gatito mimoso.
Taehyung contuvo la respiración.
El tacto de la piel de Hoby tenía la suavidad de la seda, era además tremendamente cálido.

Apretó los dientes y abrochó cada botón del camison, hasta el último.
A continuación, lo tomó en brazos y lo levantó, para retirar la colcha y meterlo de nuevo en la cama.
En ese instante, los ojos del joven se abrieron perezosos.
Observó los duros rasgos de él en la oscuridad y sonrió suavemente.

-Estoy dormido, Taehyung -murmuró acurrucándose contra su cuello.

El dulce aroma que emanaba de él y la presión del frágil cuerpo del chico estuvieron a punto de hacerle perder el control.

Hombres de Seúl.     TAEHYUNG  Libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora