MORGAN
Harrys, salió del coche y con un gesto elegante abrió la puerta.-"De vuelta a casa, ¿no?"- dijo con una sonrisa que no alcanzaba sus ojos.
Me quedé perpleja, observando el edificio de la organización la cual nunca me había detallado a mirar.
- "Este no es mi hogar, Harrys," respondi con firmeza, mi voz apenas un susurro en la brisa nocturna.
-Ya verás que lo será- replicó Harrys, cerrando la puerta tras de mi con un suave clic.
Fue entonces cuando el agente Connor apareció, como si hubiera surgido de las sombras mismas.
- "Qué bueno verla otra vez, señorita Morgan," dijo con una sonrisa que no lograba ocultar la seriedad de sus ojos.
Lo miré fijamente, mi corazón latiendo con fuerza.
- Nunca volvió a practicar sus defensas ," dijo, desafiante.
-Sé defenderme, agente-añadi, cruzándose de brazos.
Connor no dijo nada, solo se acercó un paso, y con un movimiento rápido y preciso, desarmó mi postura defensiva . di un paso atrás, sorprendida y ligeramente asustada.
-"¿Está segura?" preguntó Connor, una ceja arqueada en interrogación.
Me recupere rápidamente, mi orgullo herido pero con espíritu indomable.
"Más que nunca," respondi, y con un brillo desafiante en mis ojos, Me adentré en el edificio que prometía ser mucho más que un simple lugar de trabajo.
Segundos después...
Mientras caminaba por el pasillo, noté las miradas curiosas que me seguían. Los ojos se abrían con sorpresa a medida que avanzaba, como si yo fuera un enigma que todos intentaban descifrar.
"¿Por qué todos me miran, Harrys? ¿Tengo algo en la cara?" le susurré, intentando ocultar mi inquietud.
Harrys me lanzó una mirada coqueta y respondió con una sonrisa traviesa. "Resulta que ahora eres la favorita del jefe. ¿No lo sabías?"
La sorpresa me golpeó como una ola. "¿Del jefe?" pregunté, mi curiosidad despertada por la revelación inesperada.
Harrys se inclinó ligeramente hacia mi, bajando la voz a un susurro confidencial.
-El agente Connor siempre habla de lo sorprendido que está contigo -dijo, con una chispa de complicidad en sus ojos.frunci el ceño, desconcertada.
-¿De qué estaría sorprendido?
Harrys miró a su alrededor antes de continuar, asegurándose de que nadie más pudiera escuchar.
-Digamos que le han estado informando todo lo que haces para acercarte a Esteban- reveló con un tono que sugería que sabía mucho más de lo que decía.
-"¿Qué? ¿Quién, Harrys?" - mi pregunta fue un susurro urgente, mi mente girando con posibilidades y sospechas.
Pero antes de que Harrys pudiera responder, una voz lo interrumpió. Era el Agente Connor diciendo:
-Tranquila Morgan pronto lo sabrás.
Abrí los ojos en forma de sorpresa , cómo era posible que hubiese podido escuchar nuestra conversación si estábamos susurrando.
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You Arrived
RomanceEl amor, esa fuerza que se manifiesta en las películas, libros y poemas, era para Morgan un fantasma, una sombra que nunca se materializaba. Pero cuando el amor finalmente llamó a su puerta, no vino solo; traía consigo un misterio oscuro y temible.