Beso de Suerte ♡ Joe Jonas

♡ Capítulo 13 ♡

Joe

Danna logró tranquilizarme y me puso a ver Purple Heart mientras ella iba a cambiarse, porque con mis ocurrencias había mojado su camisa lo suficiente para generarle una neumonía. Mis estornudos se redujeron entre más tiempo estaba debajo de la cobija. Al salir estaba lista con un camisón negro, se aplicó una crema en las piernas (proceso que observe atentamente) y entró a mi lado en la cama.

- ¿Cómo te sientes? - colocó su mano en mi frente.

- Mejor, gracias - tome su mano en mi frente y bese su palma -. ¿Qué fue lo que me diste?

- Un remedio que me hacía mi mamá cuando era niña. Es una bebida de jengibre con limón, canela y pimienta. Sagrada para cualquier gripe.

- Eres fantástica - sonrió acariciando su mejilla.

- Gracias, Jonas - sonrió y acarició la cadena que reposaba en mi cuello. No me había quitado su regalo por nada del mundo -. Estuve pensando.

- ¿Sobre?

- Nosotros - desvió la mirada - Tu carrera es una locura, Joseph.

Se me cortó la respiración. - Ajam - murmuré, preocupado.

- Y me aterra.

- Danni... - iba a tratar de decirle algo, no quería que se fuera pero ella me colocó un dedo en los labios sin dejarme terminar.

- Sabes, siempre me he preguntado cómo habría sido crecer con mis padres - miró hacia los ventanales -. Que ellos hubieran estado en mi fiesta de quince, que estuvieran para la boda de mi hermana, el nacimiento de Santiago. Me he preguntado tantas cosas en la vida.

Acaricie con ternura su mejilla al ver sus ojos brillar por las lágrimas. Siempre que hablaba de ellos se ponía así y solo quería abrazarla con fuerza.

- Estoy tan cansada de preguntarme las cosas, Joseph - suspiro -. Estoy harta de los "y si hubiera".

- Cualquiera puede hartarse de eso, Danni - me senté a su lado.

- Por eso no quiero preguntarme esto - señaló mi pecho y luego el suyo.

Mi cerebro se quedó helado mientras calculaba.

- Pensaras que soy tonto, Danni - murmuré -. Pero estoy un poco perdido.

Ella sonrió lo que me relajó un poco.

- Me asusta lo que conlleva tu carrera y tu fama - explicó -. Además, tienes dos hijas.

- Te amaran.

-Puedes estar con cualquier mujer que quieras. Te vas a cansar de mi.

- Quiero estar contigo - me apresuré a decir.

Danna sonrió -. Lo sé, Joseph - puso su mano sobre la mía - Por eso mismo, no quiero pensar en ti en el futuro y decir "y si hubiera".

- Yo también odio los hubiera - susurré comenzando a entenderlo.

Danni se acercó un poco más mirando mis labios - Quiero ver que podemos llegar a ser, Joe. Que nunca seamos un "y si hubiera"

- Eso significa que... - también mire sus labios.

- Si quiero ser tu novia, Joseph Jonas.

Ella sonrió mirando mis ojos, sus iris verdes brillaban cual estrellas. Cuando logré procesarlo también sonreí abiertamente. Sin dudarlo una vez más uní sus labios a los míos. Nunca me cansaría de su sabor, su forma. Cada pequeña sensación que me producía era perfecta. Danna colocó una de sus piernas a cada lado de mis caderas, posicionando sobre mi como si hubiera estado destinada a hacerlo toda la vida. Enrede mis dedos en su cabello acercándola a mi y profundizando el beso, embriagándome con su olor por completo.