〃El azabache miro esos lindos labios y sintió un delicado latido en su corazón, sabia que tenia que besar a ese chico antes de que las estaciones los separaran, sabia que tenia que descubrir ese "dulce misterio de amor".
❝¿Qué si me gustas...? Mi co...
Autumn. "Cuando cierro mis ojos lo único que esta en mi mente es... '¿que se sentirá ser amado por ti?''¿que se sentirá haber conseguido tu amor?' es lo único que quiero saber."
El azabache se encontraba pensando, su bloqueo habia vuelto de una forma tan rápida que podía sentir el enojo recorrer su cuerpo.
Su celular sonó y al notar de quien se trataba trago en seco para contestar.
"Por fin contestas una llamada mía."
—lo lamento infinite yo he estado... —fue interrumpido por aquella voz que se escuchaba al otro lado de la linea.
"si, dejemos tus mediocres excusas para otro día, ¿te parece? Ahora. Scourge me dijo que tenias la mitad incluso mas que la mitad pero, ¿que crees? No hay ningún correo o algún mensaje sobre algún pedazo de la historia."
—¿debo recordar esa parte del trato? Querías el libro completo, no partes de este. —contesto de malhumor. —¿desde cuando cambiaron las cosas?
"Desde el día que nunca me dijiste de que iba a tratar, desde que me dijiste que querías mas tiempo del que me pediste."
—bien, existen los bloqueos a la hora de querer escribir, ¿no lo sabias?
"Te recuerdo que fue tu idea acercarte a mi y firmar un contrato."
"Así que, vas hablándome con mas respeto shadow."
El azabache se quedo callado, se sentía enojado, pero era culpa suya.
"Te daré los últimos cinco días y regresaras aquí para que pueda poner tu libro en venta."
—¿que? ¡Acabo de mudarme aquí!
"¿y me importa? Mhn... No, si en los próximos cinco días no tengo tu nuevo libro en mi mano olvida todo lo que hablamos." "Tienes una deuda que pagar shadow y lo sabes muy bien."
—tsk... —se quejo, la presión que estaba teniendo lo estaba llevando al estrés. —bien.
"de acuerdo, ya lo sabes."
"como no hagas lo que te estoy pidiendo yo mismo hare que te busquen por todos lados."
La llamada se colgó, el azabache se sentía enfadado.
Si no lograba terminar la otra mitad que le faltaba estaría perdido.
˗ˏˋ 🍂 ˎˊ˗
El cobalto se encontraba enfrente de su puerta principal, su mano se encontraba cerca de la cerradura.
¿Enserio iré a decirle sobre mis sentimientos? ¿Enserio destrozare nuestra amistad en tan poco tiempo? Era lo que pensaba, por primera vez le daba miedo ir a la casa del azabache.
Pero, en el fondo quería dejar de ser un cobarde.
Suspiro y con nervios abrió la puerta para con pasos lentos ir a la casa del mayor.
Mierda... Es cierto, vivimos demasiado cerca, pensó pues se sentía algo idiota.
Cuando estuvo cerca de aquella puerta, podía sentir su corazón latir a una gran velocidad juraría que se le saldría del pecho en ese instante.
Dio unos pequeños toques y esta vez la puerta fue abierta al instante algo que le sorprendió.
—¿que? —ese mismo tono, algo estaba mal.
—hola shadow. —el menor quiso ignorar sus pensamientos al escuchar la voz grave de su 'amigo', pues técnicamente esa era su actitud. —¿tienes un momento?
—no sonic, no tengo un momento.
—juro que sera solo un minuto, no mas de tres... Máximo cinco.
—todo esto es tu culpa sonic. —su mirada era de enojo y seriedad, el estrés lo habia consumido por completo. —con tus absurdos "¿tienes un momento?" "¿estas libre esta tarde?" por favor... ¿No puedes dejarme cinco minutos en paz?
—no entiendo de que hablas... Yo siempre... —fue interrumpido, el menor nunca habia escuchado al mayor tan enojado, tan enojado con el.
—¡por tu culpa nunca podre terminar mi maldito libro! ¿¡Sabes cuanto tiempo tomaste de mi!? Desde que llegue aquí no has dejado de tocar mi puerta una y otra vez.
—no... No creí que te molestara... Tu siempre aceptabas... De buena forma.
—pues ya no más, ojala nunca hubiera aceptado tus estúpidos y inútiles planes. —hablo con enojo, sin pensar en que estaba destruyendo el corazón del menor y de paso, el suyo.
—¿que...? —contesto en un hilo de voz, podía sentir sus ojos picar.
—¡ojala nunca te hubiera comprado esa maldita cometa! —finalizo para cerrar de un portazo su puerta, dejando al menor afuera.
El menor no podía creer lo que habia escuchado, se sentía en una pesadilla.
Todo este tiempo... Fui una molestia para el... Pero, ¿por que no me lo dijo? Penso el cobalto mientras sentía sus lagrimas caer.
Se alejo para volver a su casa, podía sentir un increíble dolor en su pecho.
Hubiera preferido ser un maldito cobarde que alguien que se arriesgaba para despues conseguir un final como el que estaba viviendo ahora mismo.
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