ᴇɴᴛʀᴇ ᴇʟ ᴘᴀsᴀᴅᴏ ʏ ᴇʟ ғᴜᴛᴜʀᴏ [ᴛᴀᴋᴇᴍɪᴄʜɪ ᴇs ᴢᴇɴɪᴛsᴜ] [ᴢᴇɴɪᴛsᴜ ᴇs ᴛᴀᴋᴇᴍɪᴄʜɪ]

○𝚅𝚒𝚟𝚒𝚛 𝚘 𝚖𝚘𝚛𝚒𝚛○

¡𝑯𝒐𝒍𝒂!
¿𝑺𝒂𝒃𝒆𝒏? 𝑴𝒆 𝒆𝒔𝒕𝒂 𝒆𝒏𝒕𝒓𝒂𝒏𝒅𝒐 𝒎á𝒔 𝒚 𝒎á𝒔 𝒈𝒂𝒏𝒂𝒔 𝒅𝒆 𝒉𝒂𝒄𝒆𝒓 𝒎á𝒔 𝒄𝒂𝒑í𝒕𝒖𝒍𝒐𝒔, 𝒆𝒔 𝒎á𝒔, 𝒇𝒂𝒍𝒕𝒂 𝒚𝒂 𝒄𝒐𝒎𝒐 𝟏 𝒔𝒆𝒎𝒂𝒏𝒂 𝒐 𝒕𝒂𝒍 𝒗𝒆𝒛 𝟐 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒒𝒖𝒆 𝒔𝒆𝒂𝒏 𝒗𝒂𝒄𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔 𝒅𝒆 𝑱𝒖𝒍𝒊𝒐. 𝑺𝒊 𝒔𝒆 𝒇𝒊𝒋𝒂𝒏 𝒆𝒏 𝒆𝒍 𝒄𝒂𝒍𝒆𝒏𝒅𝒂𝒓𝒊𝒐, 𝒑𝒖𝒆𝒅𝒆 𝒒𝒖𝒆 𝒍𝒐 𝒗𝒆𝒂𝒏 𝒄𝒐𝒎𝒐 𝟏 𝒔𝒆𝒎𝒂𝒏𝒂, 𝒑𝒆𝒓𝒐... 𝒕𝒐𝒅𝒐 𝒆𝒔 𝒅𝒆𝒑𝒆𝒏𝒅𝒆 𝒅𝒆 𝒎𝒊 𝒄𝒐𝒍𝒆𝒈𝒊𝒐 𝒚 𝒅𝒆𝒍 𝒅𝒊𝒓𝒆𝒄𝒕𝒐𝒓 𝒅𝒆 𝒆𝒔𝒕𝒆.

𝑨𝒍 𝒆𝒏𝒕𝒓𝒂𝒓 𝒂 𝒗𝒂𝒄𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔 𝒗𝒐𝒚 𝒂 𝒕𝒆𝒏𝒆𝒓 𝒎á𝒔 𝒗𝒆𝒏𝒕𝒂𝒋𝒂𝒔, 𝒚𝒂 𝒒𝒖𝒆 𝒗𝒐𝒚 𝒂 𝒕𝒆𝒏𝒆𝒓 𝒖𝒏 𝒑𝒐𝒄𝒐 𝒎á𝒔 𝒅𝒆 𝒕𝒊𝒆𝒎𝒑𝒐 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒆𝒔𝒕𝒂 𝒎𝒂𝒓𝒂𝒗𝒊𝒍𝒍𝒐𝒔𝒂 𝒉𝒊𝒔𝒕𝒐𝒓𝒊𝒂.

𝑩𝒖𝒆𝒏𝒐... 𝒅𝒊𝒔𝒇𝒓𝒖𝒕𝒆𝒏𝒍𝒂 :𝑫

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-o...oye ¿qué hiciste?- preguntó Agatsuma en estado de shock.

Su cuerpo empezó a separarse lentamente del chico con colmillos en los dientes, a pesar de esta acción, no fue capaz de borrar aquel rostro horrorizado que decoraba su rostro.

Aunque ya era demasiado tarde, la pequeña arma del mechones amarillos penetraba con más fuerza esa parte de sus músculos.

Mientras que Keisuke quedó atónito al recibir y sentir esa pequeña navaja clavarse en su cuerpo.

Sentía que su cuerpo empezaba a temblar, sentía caerse o desmayarse por aquel dolor insoportable en esa parte de sus músculos.

La navaja empezó a mancharse de un líquido carmersí, que mientras más profundo iba, el dolor aumentaba más.

Pero eso no fue suficiente para detenerlo, así que, como si fuese un soldado en la militar, se puso firme y fingió no dolerle nada.

Zenitsu ya no aguanto más escuchar como la navaja penetraba más y más su piel. Escuchar su piel desgarrandose era como escuchar una galleta crujiendo lentamente, lo cual para él era una tortura para sus pobres oídos.

La mirada fría del rubio se clavo en Kazutora. Un aura espeluznante invadia y rodeaba su cuerpo. Tenía en mente hacer muchas cosas de lo que no fue capaz.

El ojiazul miro enfadado a Kazutora ¿qué pasaría si Kazutora llegaba a matar a Baji? Ideas muy locas, tanto posibles como imposibles pasaban por su mente.

Sabía a la perfección que ni de estar cerca ocurririan estos sucesos. Organizaciones peligrosas, personas muriendo a su alrededor... ¿qué clase de broma le jugaba su mente?.

-¡déjalo!- gritó a los cuatro vientos. Imposible que todo eso pase, pero todo era posible en este mundo.

▪︎𝑻𝒐𝒅𝒐 𝒆𝒔 𝒑𝒐𝒔𝒊𝒃𝒍𝒆 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒆𝒍 𝒒𝒖𝒆 𝒄𝒓𝒆𝒆.

Se avalanzo al azabache de mechones amarillos, y le dio un cabezaso en el pecho.

Tan fuerte fue el golpe que ambos salieron volando por los aires como si fueran simples muñecas de trapo.