Nacimiento de serpientes y fugas masivas
"Severus, ¿ya has hablado con Harry?" Preguntó Dumbledore, sus ojos brillando intensamente. Sólo estaban McGonagall, Severus y Dumbledore en la habitación en este momento. Acababan de tener una reunión de personal a las seis de la mañana, que había ido mucho mejor que las anteriores. Todo el mundo parecía bastante jubiloso en este momento, y no era sólo porque fuera Navidad. Minerva se animó y miró a ambos hombres con curiosidad; ¿que esta pasando? ¿Por qué Severus tendría que hablar con su Gryffindor?
"No", se burló Severus, con el labio curvado en señal de desprecio.
"¿Por qué Severus necesitaría hablar con mi alumno?" Preguntó McGonagall indignada, entrecerrando los ojos desagradablemente. No hablaba con los estudiantes de Severus y no le gustaba la idea de que Severus hablara con sus Gryffindors.
Severus simplemente le sonrió, regodeándose e incitándola.
"¡Albus!" dijo con gravedad, exigiendo respuestas, con las manos firmemente plantadas en las caderas y los labios fruncidos con agitación.
"Hablaré contigo sobre eso más tarde, Minerva; aquí no", advirtió Albus, mirando a su alrededor; no confiaba en muchos lugares, o más bien no confiaba en ningún otro que no fuera su oficina. "Severus, necesitas comenzar lo más pronto posible, es importante—lo sabes."
"Muy bien," dijo Severus bruscamente como si ya no pudiera molestarse en discutir con el Director.
"Excelente", sonrió Dumbledore, una vez más feliz de salirse con la suya.
"Poppy ha enviado a Umbridge a San Mungo", dijo Minerva.
"¿Qué?" preguntó Severus sorprendido, ella había hablado de hacerlo pero él en realidad no esperaba que lo hiciera... al menos no todavía. Tuvo que evitar hacer pucheros; bueno, al menos Dobby aún podría darle la poción.
"Sí; Albus, debes decidir si quieres contratar a un instructor de Defensa; ya no podemos seguir tomando las clases temporalmente. No ahora que se acerca el momento para que los estudiantes tomen sus OWL y EXTASIS", afirmó Minerva. bruscamente.
"No es posible que encuentre a alguien tan cerca de fin de año", protestó Dumbledore de inmediato.
"¿Pero está bien que nos esforcemos tanto? Para empezar, no hay suficientes maestros, sin que nosotros ayudemos con una clase básica tan necesaria para tener éxito en el mundo mágico", dijo Severus bruscamente, no es que fuera así. realmente quejándose. Le gustaba enseñar Defensa, pero con los EXTASIS por delante, tenía Pociones para enseñar a estudiantes avanzados. Pociones complicadas, al menos para los estándares de sus estudiantes, y no podía permitirse el lujo de distracciones.
Minerva y Severus estuvieron de acuerdo mientras ella asentía entendiendo y de acuerdo con la declaración. Albus Dumbledore realmente esperaba demasiado de ellos; No ayudó que no hubiera suficientes profesores en el edificio para los cuatrocientos y tantos estudiantes que estudiaban en Hogwarts.
"Tendremos que arreglárnoslas", dijo simplemente Dumbledore.
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Harry bajó al Gran Comedor; Fue genial tener el dormitorio para él solo. Ningún Ron ronca ni habla en sueños; ni Dean ni Seamus mirándolo a sus espaldas. No compartir la ducha; mejor aún, no tener que hacer cola. Estaba sentado en la mesa de Gryffindor, que estaba básicamente vacía, salvo por los pocos estudiantes que también se habían quedado. Lo mismo podría decirse de las otras tres mesas: Slytherin, Hufflepuff y Ravenclaw.
Acababa de terminar su desayuno cuando le entregaron el periódico. Había terminado un buen trabajo, porque mirándolo fijamente había ocho magos y una bruja que habían escapado de Azkaban. No era alguien que juzgara a una persona por su apariencia... bueno, en realidad eso no era cierto: había juzgado a la gente antes. Sin embargo, al mirarlos, pudo ver la maldad que emanaba de sus fotografías de Azkaban. No necesitaba seguir leyendo para saber que eran Mortífagos. Tenía razón: todos habían escapado de Azkaban. Mientras seguía leyendo, se atragantó con la risa, ignorando las miradas que le lanzaban los profesores. ¡Estaban culpando a Sirius Black por la fuga masiva! Harry se mordió el labio; Esto debe significar que los guardias de Azkaban y los Dementores ya estaban de SU lado. Ya era bastante malo que el Ministerio hubiera enviado Dementores tras él; ¿Qué haría Voldemort con este tipo de poder? La preocupación y la aprensión comenzaron a recorrerlo. Parecía como si la guerra realmente hubiera comenzado. Entonces, Dementores... ¿eso significaba que él también tenía a los gigantes de su lado? Esto fue lo que pasó cuando el maldito Ministerio desterró a la gente por ser diferente. Gigantes, trolls, hombres lobo, dementores... probablemente vampiros y cualquier otra "criatura oscura" del mundo. O más bien, lo que el Ministerio había considerado "criaturas oscuras". Esto fue su culpa; Si no desterraran a la gente, Voldemort no podría conseguir tantos seguidores.
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Un nuevo lugar para quedarse (a new place to stay - completo) severitus
RandomHarry Potter es llamado a la oficina de Dumbledore y le dicen que lo trasladarán a otro lugar para mantenerlo a salvo. Ya no tiene que quedarse en casa de los Dursley, pero Dumbledore le dice que tiene que quedarse con Severus Snape. Durante unos dí...