Domisker Boat

6. Wesker

Tras decirle a Dominique que se podía quedar en mi casa a dormir todo el camino en coche hasta ella ha sido...¿Raro? No se cómo explicarlo.

Casi habíamos llegado y yo avisé a Dominique de que no quedaba mucho, ya que notaba que tenia bastante sueño, ella se asomaba todo el rato hacia adelante para poder ver bien las casas.

Tras notar que el coche frenaba Dominique preguntó: -¿Ya hemos llegado?-

-Sí- la miro de reojo y esbozo una leve sonrisa.

Salimos del coche y le dirijo hacia la puerta, ella miró hacia arriba para ver la altura del edificio, era una casa de dos pisos.

-¿Esta es su casa?- pregunta mirándome de reojo.

-Así es- le confieso.

Abro la puerta y le cedo el paso a ella primero.
Nada más entrar ella mira alrededor como si no se quisiera perder ni un detalle.

-El dormitorio está arriba- le dije ya que deducía que querría irse a dormir. Ella rápidamente me miró y me siguió.
Le volví a ceder el paso hacia las escaleras para que subiera ella primero, lo cual no sé si fue muy buena idea ya que ahora mismo tengo el culo de la jefa ante mis ojos por la diferencia de alturas.

Aprieto la mandíbula muy fuerte y cuando por fin llegamos al piso de arriba relajo la mandíbula.

-Tu te puedes quedar en mi habitación si quieres, esa tiene baño propio, así no tendrás que salir cada vez que quieras ir al baño - aclaro.

Me acerco a la habitación y abro la puerta para que pueda entrar. Dominique se queda mirando la habitación.

-Eeeh...- me mira e intenta no reír

-¿Qué pas...- no acabo de decir la frase ya que me giro y miro hacia la habitación, veo que está MUY desordenada, hay ropa por el suelo y la cama esta desecha.

Entró rápidamente a la habitación y empiezo a recoger la ropa que hay por el suelo -Hostia, lo siento, eeh...perdón- la meto dentro del armario como una bola y coloco la sabana más o menos bien para que aparente que está hecha.

-No se preocupe si la voy a deshacer igualmente- me dice sonriéndome.

La miro -Disculpeme jefa- me rasco el cuello -eeeh ahí tiene el baño...- le digo señalándole el baño -y bueno espere un segundo- abro la puerta del baño y me asomo para comprobar si el baño estaba igual de desordenado que el resto de habitación. -perfecto- el baño estaba bien.

-Pues muchas gracias Wesker- dice asintiendo y sonriendo.

-De nada, lo que necesite estoy en la habitación de al lado- le digo dirigiéndome hacia la puerta que es donde se encuentra ella, desde que abrí la puerta no se ha movido.

Me paro en frente de ella y me quedo mirando como se ríe por todo el alboroto que tenía montado y por lo nervioso que me he puesto al ver el cuarto así -De acuerdo- me responde sonriendo.
Le devuelvo la sonrisa.
Ahora mismo estamos cada uno a un lado del marco de la puerta cara a cara, me quedo embobado mirando esos ojos amarillos tan llamativos y esa sonrisa que veo pocas veces en ella.

-Eeeh...-rompe el silencio que había entre nuestras miradas -me voy a dormir- dice alejándose un poco de mi pero sin romper contacto visual.

-Eeeh si si, perdón, ya me...- me tropiezo con mi propio pie al intentar salir de la habitación -Joder- me quejo.
Dominique se ríe, -me voy, buenas noches jefa- le digo desapareciendo de la vista de Dominique.

-Buenas noches Wesker- dice ella acercándose de nuevo a la puerta para cerrarla.
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Me despierto por sexta vez en lo que llevo en la cama y me vuelvo a recolocar boca abajo en la cama buscando otra vez una buena postura para dormir cómodo en esta cama de mierda.
Aparte de ofrecerle mi habitación a Dominique porque tenía su propio baño también era porque sé lo incómoda que es la cama de invitados y no podia permitir que Dominique pasara una mala noche.

Me vuelvo a quejar y en lugar de cambiar de posición por séptima vez me siento en el borde de la cama y cojo el móvil para mirar la hora, son las 7:00 am, vuelvo a dejar el móvil en la mesita de noche y me restriego los ojos con las dos manos.

Finalmente me levanto y salgo de la habitación para ir al baño, al salir de la habitación miro hacia la puerta de mi habitación donde está Dominique durmiendo, no la veo, simplemente veo una puerta de madera pero aún así sonrío mirándola.

Ahora sí me dirijo al baño y enciendo el grifo, me empapo las manos con agua fría y me la echo sobre la cara para despertarme, me miró al espejo apoyando las manos sobre el lavamanos. Estoy en bóxers y sin camiseta, lo cual no sé si es muy buena idea ya que Dominique podría salir en cualquier momento del cuarto y verme así, cosa que dudo ya que ayer estaba muy cansada y esa cama es tan cómoda que te absorbe y no quieres levantarte nunca, cosa por la que tengo que luchar todos los días de mi vida para no llegar tarde al trabajo.

Me vuelvo a la habitación de invitados y me pongo el pantalón para tampoco llamar tanto la atención por si sale Dominique, los pantalones son los mismos que ayer ya que no puedo ir a mi habitación para coger otro.

Cojo el móvil y me lo meto en el bolsillo para volver a salir de la habitación, bajo las escaleras y voy hacia la isla de la cocina americana, saco el móvil del bolsillo y me meto en Spotify para poner mi lista de música pero recuerdo que Dominique está durmiendo arriba y no puedo hacer mi rutina mañanera que es hacerme el desayuno mientras escucho música, así que lo pienso mejor y apago el movil y lo dejo encima de la encimera.

Me pongo a preparar mi desayuno y el de Dominique para cuando se levante, como no sé lo que le gusta desayunar le he preparado lo mismo que desayuno yo, un huevo cocido, una tostada con mantequilla y un zumo de naranja. He puesto su plato encima de la encimera y un post-it al lado que pone "Te he preparado el desayuno, disfrútalo".

Yo me he sentado a desayunar en el balcón, es donde siempre suelo hacerlo ya que las vistas son preciosas y además así me da el aire fresco de la mañana y me despierto más rápido.