Moonlight ♡

Yoshiko

Me alegro de que fueras tú.

Me alegro de que fueras tú.

Yoshiko no podía dejar de repetir esas palabras en su cabeza durante toda la mañana. Se despertó pensando en ellas, resonaron en su cabeza durante toda la ducha, e incluso ahora que estaba metiendo todas sus pertenencias en sus maletas. Seguramente no había manera de que pudiera dejar de pensar en ello.

Esas palabras la asustaron. No era algo que hubiera pensado alguna vez Riko le diría, bueno, enviarle un mensaje de texto. Fue sorprendente completa y absolutamente sorprendente. De alguna manera se había convencido a sí misma de que ella lamentaba ese beso, que realmente no significaba nada para ella, pero debió haber leído su mente y le envió ese mensaje de texto.

Sin mencionar que su corazón bailaba y saltaba en su pecho mientras leía esas palabras en ese momento, mientras la sangre subía a sus mejillas y las mariposas estallaban en su estómago.

Ella lo odiaba .

Lo odiaba porque esa no es la reacción que debería tener cuando piensa en Riko y su suave ondulado cabello y la forma en que sus mejillas se sonrojan cuando la peliazul la llama hermosa... Ella era su novia falsa y nada más .

Pero luego tuvo que ir y decirle que estaba contenta de que fuera ella también. No es que no lo dijera en serio, porque en realidad quiso decir cada palabra, es solo que fue la cosa más confusa de la historia.

Su relación era la cosa más confusa cuando realmente pensaba en ello. Son amigas... pero ¿las amigas se envían mensajes diciendo que su beso significó algo para ambas?

Claramente no lo hacen. Yoshiko  no se acuesta pensando en You, no siente mariposas cuando piensa en ella y definitivamente no siente la necesidad de besarla en momentos aleatorios. Ahora, al igual que los días anteriores, cuando salieron de su habitación de hotel, Yoshiko se puso nerviosa por volver a ver a Riko. Sabía que simplemente iban a ignorar los eventos de la noche anterior y actuarían como si nunca hubieran sucedido, pero aún podía sentir las mariposas arrastrándose por su estómago y la adrenalina corriendo por sus venas mientras seguía a su mejor amiga por el pasillo al ascensor.

You estaba hablando sobre cuánto extrañaba su juego semanal (a veces quincenal) de Call of Duty, donde comían una cantidad ridícula de Cheetos flaming hot. Aunque anhelaba sus sesiones de videojuegos, no podía encontrar en sí misma lo que realmente le importaba en ese momento.

Había demasiados sentimientos extraños sucediendo en su cabeza.

Con un ding, la chica intentó empujar todos sus pensamientos nerviosos y preocupaciones a la parte posterior de su cerebro, pero ese plan finalmente fracasó una vez que puso sus ojos en su suave cabello ondulado y escuchó su leve risita mientras conversaba con sus amigas más cercanas...

—Carajo—. Maldijo por lo bajo con molestia como resultado del calor que surgía en su estómago y el repentino salto en su pulso. Su mano se apretó alrededor del asa de su maleta y luego otra vez trató de alejar sus nervios.

—¿Qué? ¿Olvidaste algo arriba? ¿Huelo mal?— You preguntó mientras agarraba su camisa y se olía a sí misma, causando que Yoshiko la mirara. No se dio cuenta de que su mejor amiga estaba justo a su lado. —No creo que huela mal.

—Uh— comenzó, el calor corriendo por su rostro, aún no estaba lista para decirle a su amiga sobre lo que estaba sintiendo. —Mierda, no, es realmente... quiero decir, no es nada... solo algo estúpido.

You la miró con incredulidad.

Yoshiko esbozó una sonrisa incómoda y luego volvió la cabeza para evitar la mirada de You. Una vez que se acercaron a Riko, su agarre en el asa de su maleta se hizo aún más fuerte.