KIVI -one shots

Tu y yo II

Narrador omnisciente: 

Aquél día no pasó nada entre ellas, aunque Violeta intentase lanzarse un par de veces, falló las dos, la primera no fue por culpa de Chiara, sino de su móvil, pues su madre había llamado para preguntarle como estaba, la segunda si que fue su culpa, pues en el último momento se echó para atrás, haciendo que Violeta saliera disparada de la casa en dirección a la suya. 

El trabajo fue entregado, tuvieron matricula de honor en esa asignatura, Chiara, que no se dio cuenta aquél día que Violeta la quiso besar, estaba confundida por el comportamiento de la ahora pelirroja, supuso que una vez ya tuvo el trabajo hecho no servía de nada ser su amiga. 

Violeta por otra parte se moría de celos al ver a Olivia y a Chiara juntas, las dos tenían mucho en común, menos mal que la chica estaba en una clase diferente, sino se hubiera desgastado los dientes de tanto apretarlos. 

Los últimos examenes estaban a la vuelta, Salma necesitaba los apuntes hechos ya, nadie se los quería prestar y con sus amigos no le salía ponerse a la defensiva, lo mejor era pedírselos a la "empollona" de la clase, primero a buenas, sino ya cambiaría la cosa. 

El timbre tocó, señalando el fin de la clase de matemáticas, cuando el profesor salió por la puerta Jill entró, avisando de que tenían guardia, que Noemí se había puesto mala, que aprovechasen para estudiar o leer, que si pasaba algo estaba en la planta de arriba. 

Salma vio su oportunidad de acercarse a Chiara, si le gritaba o algo peor nadie le iba a decir nada, pues nadie le decía nada a Salma Díaz. 

- Oye tú - dijo refiriéndose a Chiara mientras cogía una silla para sentarse delante suya - que me hagas caso - dijo cogiendo su lápiz - ahora 

- Qué pasa - preguntó Chiara 

- Necesito apuntes, de Lengua, Inglés, Matemáticas e Historia - enumeró 

- Todavía no los tengo echo, pero cuando los tenga... - fue interrumpida

- Me vas a mentir a mí? - se levantó arrastrando la silla, el sonido hizo que toda la clase se girase hacia ella - que me los des, que te importa, si en una tarde ya los tendrás hecho todos - dijo enfadada

- De verdad que no te los puedo dar, es que todavía no los hice - y era verdad, pues Chiara parecía de puertas hacia fuera que era muy aplicada, pero simplemente era extrañamente inteligente, pudiendo entender las cosas con solo mirarlas. 

- A mi no me trates por idiota - dijo cogiéndola del cuello 

- Salma para ya - se quejó Denna

- Pues que me de los malditos apuntes - dijo enfurecida 

Chiara siempre había temido esto, el bullying, estaba paralizada, no le iba la boca, no podía hablar, sentía la mirada de todos encima de ella y no sabía que decir para que la creyese 

- Habla cuatro ojos - le espetó 

- N-no... t-tengo - dijo cuando sintió que sus gafas volaban por los aires, Salma creía que la chica la estaba tomando por idiota, vio como sus gafas negras se rompían en el suelo. 

Nadie hacía nada, no era tan importante como para que otro compañero le echara cara a Salma. 

- Dame tu mochila - dijo Salma intentándose calmar - que me des la put4 mochila - le gritó al ver que estaba paralizada

Como la inglesa no reaccionaba la cogió ella misma, la tomó por la base y la vació entera, sin encontrar lo que quería. 

- DÓNDE ESTÁ RESPONDE - Dijo desesperada